Hominizacion

HOMINIZACION

Muchos de los datos relativos al origen y desarrollo del hombre son todavía desconocidos, pero nadie puede poner en duda que el hombre tiene origen en antepasado de organización inferior, si bien el proceso evolutivo que condujo desde los primates antropomorfos (con forma humana) a la aparición de los primeros seres humanos se encontraron varios factores que contribuyeron a ese proceso. No obstante, no existe acuerdo generalizado entre los científicos en cuál o cuáles fueron los cambios evolutivos más importantes a la hora de acelerar la aparición del ser humano. Por tanto, algunos científicos proponen considerar todas esas transformaciones como un conjunto cohesionado de hechos, cuya conjunción general produjo la aparición de la nueva especie, a lo largo de ese proceso evolutivo fueron surgiendo modificaciones corporales y también alteraciones cerebrales que dieron lugar a la aparición de las capacidades intelectuales que diferencian al ser humano del resto de especies animales, pero aun así las pruebas de nuestros orígenes subhumanos son concluyentes, por anatomía y fisiología, el hombre es simplemente un mamífero y es de resaltar que no somos de los mas especializados, se cuenta con un sistema nervioso algo mas desarrollado en el sentido de mas complicación si se compara con el resto de los mamíferos difiriendo solo en un grado en características psicológicas que lo han llevado a su posición privilegiada1 si bien es claro en lo anterior todo esto forma parte de una evolución concisa de una especie pero para dicho fin como en todo proceso evolutivo tubo que haber un condicionamiento y un periodo de adaptación teniendo así una clara idea que como la alimentación, el medio ambiente, entre otros inciden directamente en este.

A lo largo de los años se han propuesto todo tipo de hipótesis para explicar el origen de nuestras singularidades, obteniéndose siempre un mismo punto de partida, según la cual las peculiaridades del hombre descritas se hallarían unidas por un hilván que refiere serian en buena medida procesos de selección natural que procuraron maximizar la calidad de alimentación y rendimiento de recursos, lo que nos lleva a pensar que los cambios en la disponibilidad alimentaria lo largo del tiempo ejerció una influencia determinante en los homínidos, por que como lo nombra William R. Leonard “somos lo que comemos”2 la pregunta radicaría en ¿Cómo y cuando nuestros hábitos alimenticios difirieron tanto de nuestros antepasados? ¿Hasta que punto nos hemos alejado de las pautas alimentarias ancestrales?3

Es de resalta que la obtención de la comida, su consumo y su utilización en diversos procesos biológicos son aspectos fundamentales de un ser vivo, la dinámica energética entre los organismos y su entorno, comporta consecuencias adaptativas para la supervivencia y la reproducción.

Sin excepción los primates no humanos deambulaban sobre sus cuatro extremidades de hay que se de por sentado que el ultimo antepasado común con los humanos y chimpancés (nuestro pariente mas próximo) fuera cuadrúpedo, existen indicios claros de locomoción bípeda en Australopithecus, que vivió en áfrica hace unos cuatro millones de años en la bibliografía paleo antropológica abundan las hipótesis de esto, proponiéndose que esta posición bípeda liberaba las extremidades superiores para poder cargar a sus crias4, a esta teoría se une Kevin D. Hunt quien postula la idea que les permitía alcanzar alimento al cual antes no llegaban5, en realidad para primar por vía selectiva este tipo de locomoción, tuvieron que intervenir varios factores, determinando así la Dra. Marcia L. Robertson “sostengo que nuestros antepasados se hicieron bípedos, en parte, por que ese tipo de locomoción resulta desde un punto de vista energético, menos costosa que la locomoción cuadrupeda”6.

Quizás las diferencias en le ambiente evolutivo explique la diferencia entre seres humanos y simios antropomorfos, siendo fundamental que el habitad de los primeros homínidos fuera en bosques abiertos y praderas donde resultaba mas difícil hallar sustento presentándose así desplazamiento de varios kilómetros para obtener alimento repercutiendo estos recurrentes desplazamientos en la locomoción7, se resalta de igual manera que en consecuencia con una posición bípeda surge un acontecimiento fundamental en la evolución el desarrollo del tamaño cerebral, según los registros fósiles los Australopithecus no alcanzaron un cerebro mayor al de los simios antropomorfos, solo presentaron un aumento de 400 centímetros cúbicos, observándose un aumento a 600 centímetros cúbicos en el homo y en el homo habilis de 900 centímetros siendo esto un motivo del incremento en el consumo energético, lo que conlleva a Henry M. McHenry a postular que “se a calculado la proporción del metabolismo basal que habrían

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