Informe sobre el cultivo de maíz

La determinación es el acto administrativo que declara la existencia y

Cuantía d

Introducción

El cultivo del maíz es uno de los más diversificados en el mundo y ocupado tanto para la alimentación humana como en la alimentación de animales de todo tipo desde aves hasta vacunos de carne o leche se encuentra a nivel mundial después del trigo y el arroz que cobra gran importancia en la alimentación tanto humana como animal. Incluso se ha cultivado desde antiguas culturas centroamericanas es conocido el uso que le dieron los mayas a terrenos boscosos que transformaron en cultivables para sembrar maíz que era su principal fuente de alimentación.

Actualmente por los requerimientos internos y superficies sembradas es posible autoabastecer al mercado nacional en gran parte, rebajando así la importación de éste grano a la mínima cantidad según diversas expectativas con el incremento en la producción con el uso de técnicas nuevas y uso de variedades más aptas a la zona en cuestión.

El informe posee una estructura de orden correlativo en la medida de lo posible así se trata de ir por etapa desde la preparación del suelo hasta la comercialización final.

Técnicas de cultivo

Cultivo asociado

El sistema de cultivo asociado al maíz proporciona menores rendimientos finales, aunque esta doble producción supone una alternativa interesante desde el punto de vista de un aprovechamiento sostenible de los recursos naturales. Esta asociación encaja perfectamente en la estructura agrícola gallega, caracterizada por la reducida superficie de las explotaciones.

De este modo, el cultivo asociado haba-maíz es una práctica habitual empleada por los agricultores de la zona, como fórmula tradicional con materiales autóctonos. En esta modalidad el maíz actúa como soporte cuando las variedades de habas sembradas son de hábito trepador.

Monocultivo

La evolución y la modernización de la agricultura en las zonas productoras ha conllevado la puesta en marcha de explotaciones más profesionalizadas. Este hecho supone un cambio en el esquema tradicional del cultivo del haba.

El asociacionismo del maíz y la leguminosa se sustituye en muchos casos por extensiones de monocultivo, en las que las habas crecen con la ayuda de tutores.

Preparación del terreno

Este proceso consiste fundamentalmente en la descompactación de la tierra para el posterior pingado -siembra- de las habas. Es necesario además añadirle al suelo fertilizantes que favorezcan la correcta germinación.

Siembra

Entre los meses de mayo y junio es tiempo de sembrar las habas. Éstas se entierran a una profundidad que oscila entre los 2 y los 5 centímetros. La distancia de separación entre plantas viene determinada por el tipo de cultivo en cuestión: asociado o en tutorado.

Fertilización

Los suelos donde se cultiva el maíz, no tienen la capacidad para proporcionar los nutrientes necesarios para el crecimiento eficiente de las plantas o no otorgarían el rendimiento adecuado, para ello se debe recurrir al empleo de fertilización. El maíz tiene gran capacidad de absorción de nutrientes y requiere de una alta fertilización, la demanda por nitrógeno es alta, además de otros como el fósforo para obtener buena producción.

Cuidados Culturales

Control de malezas

Para que las plantas del huerto reciban la cantidad suficiente de nutrientes y no deban estar luchando por conseguirlos, es necesario realizar periódicamente el desmalezamiento de los canteros, ya que las malezas o yuyos compiten con nuestras plantas por el alimento del suelo.

Para esta tarea podemos utilizar un desmalezador o bien una piocha o azadita. Con ellos se ablanda la tierra de entre las plantas del cantero, y se saca con las manos las malas hierbas que crecieron allí. Cuanta más pequeña sean estas, más fácil será arrancarlas sin dejar pequeñas raíces que sirvan para que vuelvan a brotar.

Protección

Los fuertes vientos y el sol ardiente son dos elementos que debilitan a las plantas.

El viento fuerte puede quebrar las estructuras de sostén de las plantas ocasionando pérdidas que pueden ser evitadas. Cuando vivimos en zonas con vientos frecuentes, es necesario proteger la huerta por medio de cercos vivos. Esto es, se plantan arbustos que puedan ofrecer una cierta resistencia a los vientos; pero que no los corten de manera completa, sino que lo filtren para disminuir su velocidad. Para estos cercos podemos usar plantas ornamentales, pero como nuestro objetivo es producir, qué mejor que el banano para protegerlas y a la vez producir deliciosas y nutritivas bananas.

Si no tenemos suficiente espacio para un cerco vivo, se puede preparar un cerco con ramas, paja seca, hojas de coco, palmeras, etcétera.

La cobertura consiste en proteger el suelo con restos vegetales contra el calor intenso que provoca la muerte de la capa viva del mismo debido a las altas temperaturas. También es útil para proteger de las lluvias, ya que estas pueden ocasionar la erosión del suelo o contra los vientos que evaporan con rapidez el agua, no permitiendo que las plantas reciban lo necesario.

El uso de coberturas sirve además para mejorar la infiltración de agua en el suelo, mantener la humedad y evitar el crecimiento de los yuyos.

Para hacer la cobertura, se pueden usar los siguientes materiales: hojas de pasto, hojas de pasto elefante o Camerún, estiércol

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