La Economia Del Futuro Sustentable

LA ECONOMÍA DEL FUTURO – SUSTENTABLE

En la actualidad las empresas y la sociedad presentan una gran dependencia hacia los recursos naturales. Día a día tienden a explotar y hacer uso poco racional de los mismos con la finalidad de satisfacer sus propias necesidades sin importar qué tan alto sea el costo para el medio ambiente; finalmente se dan cuenta que están afectando y limitando dichos recursos.De esta manerase plantea el siguiente interrogante,¿COMO PUEDE CONTRIBUIR LA SOCIEDAD, LAS EMPRESAS, EL GOBIERNO Y LA ACADEMIA EN LA CREACION DE UNA ECONOMIA SOSTENIBLE? En estos términos, si el medio ambiente depende de las actividades que realicen las empresas, la ciudadanía y los organismos estatales, entonces ¿qué pueden aportar al desarrollo de un mundo sostenible?, entendiéndolo como las formas de progreso que satisfacen las necesidades de la actual generación sin comprometer las necesidades de las futuras.

Si se habla de las empresas, su evolución se ha mostrado agresivacontra el medio ambiente ante la sociedad. Se observa que desde el año 1800 se dio inicio a un alza permanente en los índices de contaminación reflejado hoy en día en la degradación de la biosfera, causada originalmente porla revolución industrial como suceso determinante para la historia, dado que propició la aparición de la máquinade vapor, el uso de energíasfósiles, la electricidad, nuevos modelos y métodos industriales destinados a la elaboración de productos ampliamente tecnificados y con mayor valor agregado. Se podría decir que el problema radicó en aquel momento en que el hombre cambió su forma de percibir a la naturaleza, por consiguiente hoy por hoy somos testigos de radicales manifestaciones naturales, como las lluvias ácidas, las variaciones climáticas causadas por los gases de invernadero tales como el dióxido de carbono y el metano, las extremas sequías e inundaciones.

Es cierto, conforme ha pasado el tiempo las empresas y los mismos ciudadanos han buscado salir del marco en el que tradicionalmente se desenvuelven para satisfacer sus necesidades guiadas por motivaciones realmente ambiciosas, pero han olvidadotanto trabajar en la búsqueda de prácticas que contribuyan a una economía del futuro sustentable, como pensar que su implementación disminuiría substancialmente el riesgo de perder el planeta.

Por otra parte el gobierno, como la autoridad que dirige, controla y administra las instituciones del Estado, debe aterrizar en la idea de que el mundo está en riesgo a causa de actividades que están degenerando el medio ambiente. La sociedad, los empresarios, los organismos gubernamentales y la academia pueden pensar que están a tiempo de hacer eficaz una transición a un mundo más verde, por eso es tan importante un cambio de mentalidad hacia la conservación de la biodiversidad, hacer uso racional de los recursos que la tierra les brinda, la utilización de energías renovables como la solar y eólica, la construcción de edificios verdes, la utilización de medios de transporte más eficientes y menos contaminantes y el reciclaje de recursos abundantes en el planeta.

Las empresas pueden efectuar actividades de reciclaje, acceso a capacitaciones, talleres y seminarios que impulsen el conocimiento y el ejercicio eficiente de los recursos y clasificación de basuras, otorgar pre-financiamiento a las organizaciones de comercio justo e incorporar ciudadanos de bajos ingresos a la cadena de valor combatiendo el problema dela pobreza, y de esta manera se crearía una iniciativa de manejo empresarial más responsable social y ambientalmente, con el objetivo de concientizar positivamente a la sociedad. Así mismo los empresarios podrían llegar a implementar un manual o guía que informe a sus empleados las diferentes metodologías para llegar a una economía más amigable con los medios naturales.

Una economía sustentable necesita de la promoción de acuerdos internacionales que avalen programas para el desarrollo de la sostenibilidad tanto en la sociedad y las organizaciones, legislaciones que impulsen la participación ciudadana en actividades sustentables, una sociedad amigable con el medio ambiente, instituciones académicas que incorporen en la educación una formación sostenible desde la infancia, empresas que pretendan disminuir su impacto y un gobierno que promueva y exija un cambio radical en el mundo. El resultado de este proceso depende principalmente de la sinergia que se pueda lograr entre los organismos involucrados.

La columna vertebral de un gobierno es la sociedad, por lo tanto la preocupación por brindarles unas condiciones dignas de vida a sus ciudadanos sin afectar el planeta debe ser alta. Esto se puede manifestar a través de aportes para contrarrestar el cambio climático, aplicar estándares de sostenibilidad a las nuevas infraestructuras y obras públicas, la creación de un código verde adecuado a las condiciones del país, especial para las empresas y la ciudadanía, creación e implementación de leyes que giren en torno al beneficio del medio ambiente, inversión en investigaciones a través de universidades e institutos especializados en donde se evidencie el desarrollo económico sostenible.

La academia y los centros de investigación de nuestros tiempos, en los cuales la preocupación de la Humanidad es continuar desarrollando nuevas vías de obtención de bienestar económico y tecnologías, tienen la gran responsabilidad de garantizar la formación de conocimientos, habilidades y valores en los futuros profesionales sobre la base de principios éticos, metodológicos, conceptuales, pedagógicos y epistemológicos novedosos, que garanticen un desarrollo sostenible y el alcance de una efectiva solución de la problemática ambiental. Asimismo, las instituciones académicas pueden contribuir con el desarrollo de una economía sustentable, a través de la impartición de cursos integradores cuyo objetivo sea fortalecer la investigación y el interés de los estudiantes por las prácticas que giran en torno a un modelo sostenible. Es necesario resaltar la importancia de crear conciencia y sensibilizar a los jóvenes acerca de la problemática ecológica por la que atraviesa el planeta, pues son ellos quienes deberían tener mayor interés en conservar los recursos de los cuales dependerán en un futuro.

Se está entonces, ante una cuestión transversal, que afecta a todos en la manera de producir, consumir y vivir, requiriendo una respuesta coordinada tanto de las empresas, como de las administraciones, se trata de un reto que necesita de los gobiernos pero que los gobiernos solos no pueden llevar adelante sin el apoyo y la complicidad de la sociedad en su conjunto.

Aunque es un proceso que necesita de tiempo y de una aceptación social, el manejo de una economía verde y un futuro sostenible debería ser el tema de mayor relevancia para cualquier organización, empresario, entidad educativa o gobierno, teniendo conocimiento del aporte que

éste genera a la comunidad, el ambiente y la economía. Muchos han criticado que las distintas aproximaciones al desarrollo sostenible son difícilmente operativas y plantean tantas preguntas como las que pretenden responder, pero más allá de criticar y especular, se debe abordar muchas y profundas transformaciones respecto a que podríamos hacer. La idea es crear estrategias y modelos de negocio con el fin de alcanzar los beneficios de una adecuada gestión de los recursos, todo mediante la iniciativa hacia un cambio en la mentalidad de la humanidad, la implementación de tratados internacionales, la participación activa de la ciudadanía y el cumplimiento de la legislación.

El ser humano debe ser consciente que actualmente vive en un planeta enfermo, un lugar que está siendo destruido, y que la clave para su supervivencia está en las nuevas decisiones y acciones que sean tomadas. Todas estas soluciones se encuentran de una y otra forma en el cerebro humano, en su pensamiento equilibrado con la naturaleza, en la convicción de que no somos sus dueñossinomás bien somos parte de ella, así que debe ser el mismo hombre el que decida si elige colaborar en el proyecto de desarrollo sostenible de su especie y muchas otras que se encuentran a su alrededor, o por el contrario si prefiere contribuir con su deterioro y arriesgarse a perder la casa de la cual se abastecía, sobrevivía y disfrutaba, es el mismo hombre quien debe cambiar la actitud de consumidor ignorante que causa daño sin darse cuenta y cree que el tener más es vivir bien y quien debe unirse a todos aquellos organismos que trabajan por un mejor futuro.

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