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La Etica Del Contador


Enviado por   •  19 de Febrero de 2013  •  4.976 Palabras (20 Páginas)  •  483 Visitas

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INTRODUCCION

El presente trabajo tiene como finalidad, adentrarse en el amplio e importante tema de los principios que debe observar el profesional de la contaduría pública en el desarrollo de las actividades propias de la profesión y en general de sus actitudes frente a las diversas situaciones que implican la interacción con su entorno laboral, personal y social.

Se busca por lo tanto conocer un poco más acerca de aquellos principios que guían al profesional hacia un comportamiento mas correcto y más acertado dentro de su actuar cotidiano. Se intenta con ello tener una idea más cercana y real de lo que implica ejercer tan importante profesión; teniendo presente que esto conlleva una gran responsabilidad con la sociedad en general, debido a que él está llamado a ser quien de cierto modo contribuye a darle a sus clientes y a la sociedad un grado de seguridad sobre el buen manejo de los recursos privados y públicos si es el caso.

De lo anterior se desprende que en este trabajo se vaya a abordar tan importante tema, y se tratara de profundizar hasta donde sea posible en cada uno de los principios que se enunciaran en el desarrollo de éste y lo que implica su práctica o su omisión. Saber que tan primordial es para el desarrollo de la profesión conocer y aplicar estos principios, lo cual hace la diferencia entre los profesionales éticos, exitosos y dignos; y aquellos que no honran ni dignifican la profesión.

1- PRINCIPIOS DEL PROFESIONAL DE LA CONTADURÍA PÚBLICA

Son un conjunto de valores, cualidades y acciones concretas que observadas y puestas en práctica en el diario vivir y actuar del profesional de la contaduría pública conlleva a un buen desarrollo de la profesión como tal, además del buen ver de la sociedad respecto a quienes los incorporan de manera permanente en todo cuanto tiene que ver con sus actividades. Siendo el contador público aquella persona encargada de una gran responsabilidad como es dar fe público sobre hechos que tienen que ver con el quehacer propio de su ámbito profesional, se debe tener muy presente la importancia fundamental que poseen estos principios éticos y su repercusión en los diferentes entornos que estas relacionados con la parte económica y financiera de un ente económico, de una persona natural o recursos de carácter público.

Por lo tanto, se impone una ética inspirada en la dignidad de la persona que conduzca a consensos que sean operativos en al ámbito económico, político y social. Consensos que salvaguarden los derechos fundamentales de la persona y tutelen el bien común. Este debe ser el marco ético para el ejercicio profesional del Contador Público.

Sin embargo no se puede desconocer que además de la parte económica, se puede ver afectada la parte social, dado que implica un cambio en los valores y el accionar cotidiano de una persona o varias personas en torno a una determinada situación. Existe una serie de enunciados que hablan de la ética del contador, a continuación definen:

1.1 INTEGRIDAD

Es el primer principio al que esta llamado el profesional de la contaduría, puesto que es nada mas ni nada menos que la prueba de su dignidad y lealtad frente a la verdad, la equidad y la justicia de un hecho que el conoce. Ese seria el ideal pero no podemos desconocer que el entorno siempre cambiante hace de las suyas y por ello aunque la contaduría publica es una profesión que posee una gran responsabilidad social, para sus profesionales es difícil actuar con integridad si se tiene en cuenta que la sociedad y por ende la presión social han cambiado de dirección. Antes, ellas impedían a muchos apartarse del buen camino, así muchos eran honestos, porque la sociedad no les dejaba otra alternativa. Hoy se estimulan comportamientos que antes se consideraban inaceptables. Este cambio ha sido fruto del deseo sin fronteras de tener poder, lo que ha hecho las personas de nuestra época sacrifiquen todo, sin medir sus consecuencias y efectos posteriores. Sí el Contador Público reduce su ética profesional a lo que está socialmente aceptado, tendrá vía libre para esta clase de indelicadezas y comportamientos poco adecuados. Por eso la ética no se puede reducir a la dimensión puramente sociológica.

La integridad se refiere a que el contador público no solo debe estar armado de conocimientos, habilidades, aptitudes y destrezas que lo lleven a ejecutar un buen trabajo en la parte económica, administrativa y financiera de una empresa; sino además a ser parte activa de una fuente de valores agregados en cuanto a su buen actuar, su moralidad y el buen ejemplo para sus semejantes.

1.2 OBJETIVIDAD

Es la imparcialidad y actuación sin prejuicios. Este prin¬cipio se aplica especialmente cuando se trata de certifi¬car, dictaminar u opinar sobre los estados financieros de cualquier Entidad y está ligado íntimamente con el principio de independencia. La objetividad representa para los auditores, la capacidad de éstos para mantener una actitud imparcial, libre de todo sesgo, para tratar todos los asuntos que queden bajo su análisis y estudio. Este principio ético implica que el auditor en manera alguna subordinará su criterio a la opinión de sus clientes.

Cuando un Contador Público se encuentre comprometido incluso con la prestación de servicios consultivos sobre impuestos y administración, no debe subordinar su juicio a los demás. Cuando se refieren al aspecto impositivo, el Contador puede resolver las dudas en favor de su cliente mientras exista un apoyo razonable que sustente su posición, sin olvidar siempre el aforismo de dar a Dios lo que es de Dios y al Cesar lo que es del Cesar.

“Los contadores profesionales sirven de muy diferentes maneras y deben demostrar su objetividad en variadas circunstancias. Los contadores profesionales en práctica pública emprenden trabajos de rendición de información, declaraciones tributarias y otros servicios de consultoría gerencial. Otros contadores profesionales preparan estados financieros en subordinación a otras personas, desempeñan servicios de auditoría interna, y prestan servicios de administración financiera en industria, comercio, sector público y educación. También educan y entrenan a quienes aspiran a ingresar a la profesión.

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