Proyecto Alzheimer

MARCO TEÓRICO

Planteamiento del problema

El Alzheimer, es una enfermedad neurodegenerativa que se manifiesta como deterioro cognitivo y trastornos conductuales. Se caracteriza en su forma típica por una pérdida progresiva de la memoria y de otras capacidades mentales, a medida que las células nerviosas (neuronas) mueren y diferentes zonas del cerebro se atrofian. La enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia, es incurable y terminal, que aparece con mayor frecuencia en personas mayores de 65 años de edad.

Por consiguiente, a medida que progresa la enfermedad, aparecen confusión mental, irritabilidad y agresión, cambios del humor, trastornos del lenguaje, pérdida de la memoria de largo plazo y una predisposición a aislarse a medida que los sentidos del paciente declinan. Gradualmente se pierden las funciones biológicas que finalmente conllevan a la muerte. La causa del alzhéimer permanece desconocida. Las investigaciones suelen asociar la enfermedad a la aparición de placas seniles y ovillos neurofibrilares. Los tratamientos actuales ofrecen moderados beneficios sintomáticos, pero no hay tratamiento que retarde o detenga el progreso de la enfermedad.

En este orden de ideas, el Grupo de Investigación Internacional de Demencia 10/66, determinó que en Venezuela, la prevalencia estimada de la enfermedad tipo Alzheimer en personas mayores de 65 años está alrededor del 7%; esta cifra se traduce en 100 mil personas. Este dato estadístico parte de que en el país existe casi un millón de personas de la tercera edad que sufren algún tipo de trastornos cognoscitivos. Simultáneamente el enfermo de Alzheimer sufre un drástico cambio en su personalidad, con tendencia a deprimirse o irritarse. La persona ya no puede seguir instrucciones, sufre confusión y desorientación en el tiempo y el espacio, pudiendo incluso, llegar a perderse en lugares conocidos para él. Además, la persona puede presentar alteraciones del juicio, confundir a sus seres queridos y, en muchos casos, hasta desconocerse a sí mismo.

Los tratamientos para esta enfermedad se vuelven muy costosos debido la frecuencia de su uso y muchas veces pueden no ayudar ni dar ningún beneficio en la vida del paciente con Alzheimer. En otro maro de ideas conocemos que el romero posee propiedades como potente protector natural del cerebro, ya que era utilizado por los antiguos griegos para mejorar profundamente la memoria, hasta el punto en que los estudiantes griegos usaban una corona de flores cuando rendían sus exámenes con la intención de potenciar su capacidad mental.

En atención a la problemática expuesta, nos planteamos las siguientes interrogantes:

¿Es posible utilizar una infusión de romero (rosmarinus officinalis) como alternativa de oxigenación en la memoria de las personas que padecen Alzheimer?

¿Qué beneficios tendría la utilización de una infusión de romero (rosmarinus officinalis) como alternativa de oxigenación en la memoria de las personas que padecen Alzheimer?

¿Cuánta efectividad poseería la utilización de una infusión de romero (rosmarinus officinalis) como alternativa de oxigenación en la memoria de las personas que padecen Alzheimer?

¿Qué resultados se obtendrían al utilizar una infusión de romero (rosmarinus officinalis) como alternativa de oxigenación en la memoria de las personas que padecen Alzheimer?

Objetivos de la investigación

Objetivo general

Utilizar una infusión de romero (rosmarinus officinalis) como alternativa de oxigenación en la memoria de las personas que padecen Alzheimer.

Objetivos específicos

 Determinar los beneficios que tendría la utilización del romero (rosmarinus officinalis) como alternativa de oxigenación en la memoria de las personas que padecen Alzheimer

 Demostrar la efectividad que poseería la utilización del romero (rosmarinus officinalis) como alternativa de oxigenación en la memoria de las personas que padecen Alzheimer

 Evaluar los resultados se obtendrían al utilizar el romero (rosmarinus officinalis) como alternativa de oxigenación en la memoria de las personas que padecen Alzheimer

Justificación de la investigación

El Alzheimer es una enfermedad degenerativa de las condiciones mentales, que se presente normalmente en personas a partir de los 65 años. La persona ya no puede seguir instrucciones, sufre confusión y desorientación en el tiempo y el espacio. Además es una de las formas más comunes de demencia senil. A su vez el romero es un estimulante de la circulación sanguínea, propiedad que beneficia la irrigación cerebral y con ella, la prevención y tratamiento de las enfermedades seniles.

Bases teóricas

Antecedentes de la investigación

Al realizar la revisión bibliográfica concerniente al tema de estudio se encontraron diversas investigaciones y trabajos anteriores que guardan relación con el problema planteado. De esta manera se presenta a continuación alguna de ellas:

Según Dr. Stewart W. (2005), “El Ibuprofeno puede ayudar en la enfermedad de Alzheimer”, en una reunión de Epidemiología de la Escuela Johns Hopkins de Salud Pública, dijo que “Hemos visto evidencia consistente que la inflamación está ligada al desarrollo del Alzheimer. Por tanto, tendría sentido que una medicación anti-inflamatoria pudiese rebajar la profesión de la enfermedad, o incluso jugar un papel en prevenirla”. Realizo un experimento donde Controló el uso de la medicación en 1.686 hombres y mujeres mayores, Aquellos que habían usado las AINE tuvieron una reducción de entre un 30% y un 60% de riesgo de desarrollar el Alzheimer, comparado con los que no usaron AINE o que usaron otras medicaciones para el dolor. Solamente aquellos que usaron AINE que no fuese aspirina, como el ibuprofeno o el naproxeno, experimentaron una reducción significativa en el riesgo. Además, la reducción fue mayor. Para aquellos que usaron AINE- no-aspirina- durante un periodo de tiempo más largo. Ni la aspirina, ni el paracetamol parecieron ofrecer protección significativa.

Por otra parte, el doctor Scott Small (2006), del centro médico de Columbia Presbiteriano en Nueva York “La resonancia magnética como detección precoz” este dice que: “las investigaciones más prometedoras en torno al Mal de Alzheimer se dirigen a frenar la progresión de la dolencia, tan pronto como sea posible”. Además agrega que “no prevemos que seremos capaces de corregir la pérdida de memoria y razonamiento después de un pleno deterioro cognitivo del paciente hacia la enfermedad. Por lo tanto, mientras más pronto podamos diagnosticar a los pacientes de Alzheimer y diseñar métodos para su tratamiento, mejor.” Relató también que cinco de los 13 voluntarios con que experimentaron mostraron una actividad anormal en esta región entorinal, para luego mostrar peores síntomas de Alzheimer. Los otros sufrían de lo que probablemente era un deterioro normal de la memoria producto de su envejecimiento.

Además, Según Vassar R. y Bennett B (2007) “Una enzima podría ser responsable del Mal de Alzheimer” la beta-secretase contribuye de manera decisiva a la formación, en al corteza cerebral del paciente, a las placas de proteínas que caracterizan el Mal de Alzheimer, y desata la destrucción de las células nerviosas. La consecuencia de este proceso es la pérdida de la memoria y del sentido de la orientación y dificultades en los movimientos y en el habla, hasta llegar a un envejecimiento total en pocos años. En EEUU se calculo que cinco millones de personas sufren el mal de Alzheimer. Pero la incidencia es la misma que a nivel mundial: un 20% de los mayores de 70 años puede sufrirlo.

Revisión bibliográfica

 Alzheimer

La enfermedad de Alzheimer (EA), también denominada mal de Alzheimer, demencia senil de tipo Alzheimer (DSTA) o simplemente alzhéimer, es una enfermedad neurodegenerativa que se manifiesta como deterioro cognitivo y trastornos conductuales. Se caracteriza en su forma típica por una pérdida progresiva de la memoria y de otras capacidades mentales, a medida que las células nerviosas (neuronas) mueren y diferentes zonas del cerebro se atrofian, también por presentar en el cerebro grupos anormales de placas amiloides y haces de fibras enredadas (ovillos neurofibrilares) o compuestos de proteínas fuera de lugar, siendo la edad el factor de riesgo más importante para su desarrollo. Se sabe que el número de personas afectadas por esta enfermedad se duplica cada 5 años, después de los 65 años.

En conclusión, El Alzheimer es una enfermedad demencial que lleva a una pérdida de la capacidad intelectual. De este modo se puede decir que es una condición médica que progresivamente deteriora las células del cerebro, los pacientes llegan a olvidarse por completo de sus propias identidades y de las personas que les rodean.

 Síntomas del Alzheimer

Los síntomas normalmente se presentan en adultos mayores de 65 años (aunque también puede afectar a personas de 40 y 50 años). En las etapas tempranas, los síntomas pueden ser muy sutiles. Entre éstos se encuentran:

• Repetición frecuente de frases

• Ubicación equivocada de cosas con frecuencia

• Dificultad para recordar el nombre de objetos conocidos

• Perderse en rutas conocidas

• Cambios de personalidad

• Convertirse en una persona pasiva y sin interés por las cosas que antes disfrutaba

• Algunas cosas que el individuo solía hacer bien se tornan difíciles, como llevar el control de uso de la chequera, jugar juegos complejos y aprender rutinas o informaciones

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