Encuadre Pedagógico: la inclusión y la igualdad en las experiencias socioeducativas

Encuadre Pedagógico: la inclusión y la igualdad en las experiencias socioeducativas.

Aula: 052

Alumna: Vila Anabella

Victoria – Entre Rios

Analisis:

En  la escena de “El Reemplazante”, vemos como el grupo de estudiantes tienen inseguridades, falta de compromiso, violencia simbólica y física entre pares, desinterés en cuanto a la enseñanza –aprendizaje, falta de transmisión de  información de los docentes  para los alumnos en cuanto a lo que se trata de los cambios en su cuerpo, esto debe resultar importante   destacar y poner en jaque  la mirada institucional lo cual requiere mucho  de una la responsabilidad pedagógica. La Institución debe responder y tomar como compromiso las problematicas que  van sucediendo  y ver qué no basta con que un profesor/a  lo asuma, sino que depende de las voluntades individuales, difícilmente de las y los estudiantes reciban lo que la escuela promete y ofrece. Dicen Simons y Masschelein (2014) que esta cuestión de la responsabilidad pedagógica supone ejercer la autoridad, esto es, hacer hablar al mundo, traer al mundo, traer a la vida,  y en  el capítulo vemos que  no solo  basta con que un profesor/a lo piense o lo desee, sino que la responsabilidad pedagógica es un asunto institucional.

Es la institución escolar la que debe de sostener el compromiso, donde los profesores/as deberán “hacer que la escuela sea escuela” generando estrategias para que el mundo, la matemática, la lengua, la música,  “hablen” y  a las y los estudiantes en todos los contextos, en las condiciones que sean, generando igualdad y confianza. Desde una  perspectiva pedagógica, la responsabilidad tiene que ver con dar lo que la escuela promete, “hacer que la escuela sea escuela”. La forma escolar tiene que ser   en un  lugar, un edificio o una plataforma pero debe prometer  tiempo libre, tiempo dedicado al  estudio. Pero para que eso ocurra, es necesario partir de  dos principios: la igualdad, que supone confiar en que todos las/os estudiantes  pueden aprender, y la libertad, que implica confiar en que todos tienen capacidad para elegir qué hacer con lo que la escuela les da.

Creo que la escena donde el Profesor Charly  dialoga con la directora y el asesor pedagógico, explicándole que no está de acuerdo aprobar a los estudiantes y que logren  pasar  de año sin haber alcanzado  los saberes mínimos y  prioritarios en la matemática, le generó molestia  las respuestas de las autoridades de la Institucion, el no querer  apostar a que los  estudiante se les dé la posibilidad de que  tengan un aprendizaje  significativo ,negándole la posibilidad de un futuro prometedor. Es necesario  que  para que esto  no ocurra exista  una responsabilidad pedagógica donde la escuela les ofrezca  un futuro posible  en igualdad de condiciones y que puedan  terminar su escolaridad con  confianza de haber  logrado e intentado  formarse como sujetos pensantes y críticos.

Cuando pensamos en una experiencia de igualdad, pongo la mirada en el asesor pedagógico  donde no confía en que las y los estudiantes  de la escuela puedan interesarse en la materia de estudio, esto parte de un analisis en cuanto a la confianza en las relaciones pedagógicas, como plantea  George Simmel, habla de la confianza  en primer lugar, cotidiana porque se  apunta en el contexto de la escuela, del aula y de la intimidad de la relación pedagógica. La describe como  la que hace acto, que está presente. Y que se produce, sobre todo, en sociedades modernas, cuando hay algo del orden de lo desconocido del futuro.

Es decir, cuando no estamos en la continuación de un pasado tradicional (Simmel ,1991), dice que la confianza se objetiva porque establece un modo de sociabilidad, un modo de relación con el/la otro/a. pero por otro lado, la confianza se diversifica, funciona de una manera circular, en oposición a una lógica de causalidad, actúa sobre lo que creemos que piensan los/as otros/as.

El ser humano nace en una incertidumbre que lo vuelve necesariamente “relativo” a las palabras que lo reciben y a las relaciones que preparan el futuro. No hay que abusar de ese poder que da la confianza; hay que ir renunciando poco a poco a ese poder sobre un estudiante  con cuidado. Partir de una experiencia es exactamente en esto en lo que consiste el acto de dar o tener confianza, se trata de responder a la confianza de la estudiante, dándole confianza. Tiene que ver con la autoridad, con el hacer crecer con la libertad de eso se trata “La confianza es algo así como una ofrenda de libertad”.

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