Cuento fantasioso El loco

El loco

Había una vez en un planeta llamado Solary  en un futuro muy lejano que era habitado por humanos y sus habitantes natales los Darianes que a su vez estaban en estado de casi esclavización por los humanos desde su llegada hace casi 250 años al planeta, los Darianes de clase baja llamados “Dantes”  que eran los nativos carentes de tierras propias o tener algún tipo de pedigrí militar antes de la llegada de los humanos,  son perseguidos para trabajar en calidad de esclavo en las minas de centurión donde se extraía un mineral extraño que es altamente toxico para los Darianes, ese mineral se llama Lexo que es usado por los humanos en pequeñas dosis combinado con unos brebajes para evitar el envejecimiento de la piel  y en altas cantidades para combustible de sus naves conquistadoras. Luego están los que escogieron voluntariamente su esclavitud los Darianes de clase alta llamados los “Lidiantes” poseedores de grandes extensiones de tierra llegando incluso a continentes y también siendo acreedores de una doctrina militar muy arraigada fueron los que dejaron el paso libre a los humanos para conquistar su planeta ya que los consideraban dioses de las lejanías divinas y por ser considerados deidades  dieron como tributo a los Dantes ya que los consideraban impuros, salvajes y de segunda clase, los Lidiantes están al servicio de los humanos incondicionalmente.

En una de las minas de centurión había un joven dantes llamado Geed y su familia conformada por su madre Atira, su padre Gulan y su hermana Caída de las estrellas, todos los días el padre y la madre trabajaban en las minas mientras Geed y Caída de las estrellas buscaban en los alrededores y campos cercanos comida que llevar a su humilde y reducido hogar con la condición de nunca de los nunca atravesar  los territorios de un Lidiante conocido como “el loco” quien controla la mina centurión, ya que se le conocía por ser cruel y despiadado con los que se atrevieran a penetrar sus dominios, entonces Geed y Caída de las estrellas con la advertencia bien recalcada  en sus mentes decidieron no acercarse mucho en eso encontraron un árbol de frutos rojos desconocidos para ellos, se acercaron más y descubrieron a una pequeña comunidad de seres cubiertos en su totalidad por unas telas hermosas de diferentes colores desde el negro hasta el azul más brillante de todos, entonces Geed y Caída de las estrellas decidieron entablar una conversación a la distancia:

-¡Hola!- digo Geed sin contestación alguna después le siguió Caída de las estrellas – ¡Hola estamos buscando comida! ¿Podrían ayudarnos? Enseguida se escucharon algunos susurros –son los sirvientes del loco, tenemos que huir, es una trampa- y entre tanto murmuro se alzó una voz femenina diciendo –vengan tomar unas manzanas para aliviar su hambre- después Geed y caída de las estrellas se acercaron a los seres protegidos por el incognito, estos seres teniendo miedo de nuestros protagonistas se alejaron un poco excepto una figura femenina cubierta de una tela negra con bordados rosas en forma de cruces a los costados –¡vamos vengan por sus manzanas! O acaso ¿ya no tienen hambre? Exclamo la figura femenina, -claro que tenemos hambre- digo Geed  enseguida la entidad se despojó de su tela que le cubría su rostro y cuerpo dejando ver la figura de una mujer humana de cabellera larga café, un par de ojos de color verde con toques cafés, su color de piel era un blanco pálido con pequeñas pecas en sus mejillas, Geed y caída de las estrellas sorprendidos porque es la primera vez que ven a un humano, -¿eres humana?- digo Geed   -sí que lo soy, y tú eres un Darian ¿verdad?-contesto la humana con una pequeña sonrisa , - si soy un Darian hijo de mineros esclavizados por el capricho de los humanos y torturado por la indiferencia y desigualdad de los Lidiantes- contesto Geed con voz fuerte y un cierto repudio hacia la humana --oye tranquilo también padezco de los mismos males que tu- contesto la humana –como vas a padecer de los mismos males que yo eres una humana eres la divinidad de nuestros profetas y verdugos los Lidiantes, - yo no soy ninguna divinidad- contesto la humana , - pero si tus ancestros vinieron a este mundo a liberarnos del mal y de nuestros actos profanos – exclamo caída de las estrellas, -miren los humanos no somos entidades divinas somos simples mortales, venimos de otro planeta ,de otro mundo como Solary  llamado la Tierra en busca de recursos para poder subsistir- divulgo la humana, esas palabras no dejaban tranquilo a Geed  ni a caída de las estrellas, -entonces que haces aquí cuál es tu nombre y quienes son los demás que te acompañan- hablo Geed,  -mi nombre es Kenya  estoy aquí escondida porque estoy en una revolución en contra de los Lidiantes y los humanos esclavizadores que han traído tragedias a este planeta durante más de dos siglos, me acompañan revolucionarios como yo. Los Lidiantes y los humanos esclavizadores nos hacen llamar los “Desertores”, pues les hago la misma pregunta ¿quiénes son ustedes? y ¿qué hacen aquí?- contesto la humana Kenya, Geed y caída de las estrellas se quedaron estupefactos al escuchar que había humanos en contra de Lidiantes y otros humanos una idea que nunca se pensaron como posible – pues me llamo Geed y ella es mi hermana gemela Caída de las estrella venimos en busca de alimentos a los alrededores de las minas de centurión- exclamo Geed, entonces la humana Kenya coloco unas cuantas manzanas en una canasta y les dijo que tuvieran cuidado con el loco quien tiene sus territorios cerca y también agrego  que no dijeran nada de los humanos rebeldes una vez terminada la conversación los hermanos emprendieron su viaje de regreso a las minas de centurión con muchas cosas en sus cabezas y las manzanas de alimento para su familia una vez llegando a su  “hogar” les dieron las manzanas a sus padres que nunca habían visto manzanas y le preguntaron que de donde las había obtenido los hermanos contestaron  de un árbol a las lejanías de la mina los padres no teniendo otra fuente de alimento tuvieron que comérselas, ya estando en una cama improvisada pensando entre sueño y realidad lo que ocurrió con la humana y su tribu decidió unirse a la campaña de los desertores para acabar con la esclavitud de su pueblo Dantes.

Por la noche Geed alisto sus cosas y se fue en busca de los desertores   a la zona prohibida de los territorios del loco y se encontró con Kenya recostada en una piedra, Geed la despierta y Kenya sorprendida le pregunta que haces aquí, Geed le dice que se quiere revelar contra los Lidiantes, Kenya le dice que valla con Walon el líder de los desertores para que lo prepare para el combate pero Walon mejor tenía una mejor idea  que le dijera a todos los de la mina de centurión que se revelaran en contra de los Lidiantes, Geed emprende el viaje de regreso a las minas divulgando la palabra de la rebelión y la existencia de los desertores  lo cual termina en caos todos se levantaron en contra de los Lidiantes que estaban resguardando la mina provocando muchas muertes lo cual termina con la llegada del loco el  temible Lidiante en su carro de guerra con lo cual apacigua cualquier intento de rebelión y exclama con fuerte y autoritaria  - ¡quién es el responsable de todo esto!-  en eso todos obligados a muerte a pronunciar el nombre del culpable exclaman  -¡el minero Geed, el minero Geed!-  Entonces el loco  en una rabia inimaginable lo busca y cuando lo encuentra lo encierra y  lo cuestiona  -estas solo en esto-  Geed responde mintiendo que sí que solo fue un ataque de histeria el loco no le cree trae a caída de las estrellas y la tortura para que Geed hable, Geed habla entre llantos y dice la existencia  de grupos rebeldes, el loco le propone un trato si le dice toda la verdad de los rebeldes no matara a toda su familia , Geed acepta    y lo lleva al refugio de los desertores, donde los humanos son masacrados por el carro de guerra del loco y los sobrevivientes reconocen a Geed y lo tachan de traidor propagando la noticia en todas las minas aledañas y se le exilia a vagar por el campo mientras su familia esta encarcelada y se ganó el odio de los desertores.

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