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Desarrollo Del Lenguaje

lunarojasantos27 de Enero de 2015

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Importancia de la adquisición del lenguaje (del nacimiento a los 2 años)

El aprender a hablar es un proceso prolongado y complejo.

En tanto el niño no esté listo para aprender, desde el punto de vista de la naturaleza proporcionara diversas formas de comunicaciones, de no ser así se prolongara considerablemente un periodo de importancia.

ELEMENTOS DEL LENGUAJE

El lenguaje consta de tres dimensiones fundamentales:

1. Contenido: significado de un mensaje escrito u oral

2. Forma: símbolo en que se representa el contenido

3. Uso: forma en que un hablante emplea el lenguaje para darle un significado en vez de otro

LOS INICIOS DEL LENGUAJE

El desarrollo del lenguaje consiste en aprender a hablar o a producir sonidos, posteriormente aprender el significado de las palabras, después a aprender sin reglas gramaticales y por último a leer y a escribir.

El desarrollo del lenguaje adopta dos formas:

VOCABULARIO RECEPTIVO:

Los niños de muy corta edad entienden las palabras antes de poder decirlas. Cuando tienen un año tratan de seguir las instrucciones del adulto y mostrar en su conducta que conoce el significado de la palabra, como por ejemplo “adiós”

La mayoría de los niños no dicen ni si quiera sus primeras palabras hasta los 12 a 15 meses de edad hasta que dominan suficientemente las capacidades lingüísticas como para utilizar palabras significativas que puedan entender tanto ellos como los demás.

Los bebes usan cuatro formas de comunicaciones anteriores al habla:

1.- llanto

2.-balbuceo

3.- gestos

4.- expresiones emocionales

De estas cuatro formas el balbuceo es el más importante para el desarrollo del habla ya que establece las bases para la comunicación oral.

Para comunicarse de manera eficaz en su lengua materna son la fonología o conocimientos de sonidos del lenguaje; la semántica o comprensión del significado de los morfemas palabra y enunciado y por último la pragmática o los principios que regulan la forma de lenguaje infantil.

El lenguaje en los niños es fundamental para el desarrollo de un coeficiente emocional alto, pues esta forma de expresión les permite y fomenta todo tipo de comunicación que finalmente va a fomentar que el menor aprenda a conocer sus emociones y a partir de eso aprenda a manejarlas y controlarlas.

Es necesario ponerle nombre a lo que está sintiendo y eso lo obtiene al saber que es lo que ocurre en su interior.

Conforme progresa el balbuceo los niños de 10 a 12 mese de edad a menudo reservan ciertos sonidos para situaciones particulares.

Por ejemplo: un bebe comienza a usar un sonido “M” (mmmmmmm) cuando hace peticiones y varios sonidos vocales.

Cuando se les habla a menudo a los neonatos abren sus ojos, miran al hablante y en ocasiones incluso vocalizan.

El primer hito vocal distinto al llanto ocurre a los dos meses de edad cuando los bebes hacen ruidos tipo vocal llamados arrullo; es probable que estos “ooooooohs” y “aaaaahs” es probable que estos sonidos se escuchen después de la alimentación, cuando está despierto, alerta, seco y contento.

Para los cuatro y seis meses de edad los bebes agregan sonidos consonantes como “mamamama” o “papapapa” que pueden sonar como palabras pero no transmiten ningún significado.

Durante los primeros seis meses los bebes emiten sonidos muy parecidos, el balbuceo inicial es influido en gran medida por la maduración del cerebro y los músculos que controlan la articulación verbal.

Durante la fase pre-lingüística discriminan con facilidad sonidos tipo habla y son sensibles a una variedad mas amplia de fonemas que los adultos. Son sensibles a claves de entonación desde el principio y, entre los 7 y 10 meses de edad, segmentan el habla de otros con frases y unidades de tipo palabras.

Los bebes comienzan con arrullos hacia los dos meses de edad y empiezan a balbucear entre los cuatro y seis meses. En el primer año los bebes igualan la entonación de sus balbuceos a las cualidades tonales del lenguaje que escuchan y pueden producir sus propios vocablos para transmitir significado.

Una vez que los bebes comienzan a en tender palabras aisladas, su lenguaje receptivo se adelanta a su lenguaje productivo.

El lenguaje productivo del niño está parcialmente restringido por la extensión y variedad de los sonidos que puede pronunciar, de modo que sus primeras palabras son inteligibles solo para sus acompañantes.

El desarrollo fonológico ocurre muy rápido. Para mediados del segundo año, las pronunciaciones lindas y creativas de los bebes ya son guiadas por reglas, o estrategias, que les permiten producir versiones simplificadas pero aun siguen siendo inteligibles de las palabras adultas.

Durante el periodo holofrásico, o una sola palabra, los bebes hablan con holofrases y pasan varios meses ampliando su vocabulario una palabra a la vez. Hablan principalmente acerca de objetos móviles o manipulables que les interesan y muestran un incremento acelerado del vocabulario entre los 18 y 24 meses de edad; posteriormente comienzan a combinar palabras en “enunciados” simples.

PERIODO TELEGRÁFICO:

De los 18 a los 24 meses de edad los niños empiezan a producir enunciados de 2 a 3 palabras conocidas como habla telegráfica porque omiten marcadores gramaticales y pequeñas palabras de menor importancia.

Durante el periodo preescolar (edades de 2 a 5 años), el lenguaje del niño se vuelve mucho más parecido al de un adulto, y en la medida en que producen emisiones mayores, agregan morfemas gramaticales como la S para el plural ando y endo para el gerundio y- ó para el pasado; así como artículos, preposiciones y verbos auxiliares.

Aunque cada niño adquiere los marcadores gramaticales a diferentes ritmos y los sobre-regulan por lo que existe una sorprendente uniformidad en el orden de morfemas.

A continuación se presenta un cuadro que explica cómo se va dando el desarrollo del lenguaje del niño en cuatro aspectos conforme al crecimiento.

APRENDIZAJE DEL LENGUAJE DURANTE LA PRIMERA INFANCIA

EDAD FONOLOGÍA SEMÁNTICA GRAMÁTICA/

SINTAXIS PRAGMÁTICA

0-1 año

 Receptividad al habla y discriminación de los sonidos del habla.

 El balbuceo comienza a parecerse a los sonidos de la lengua materna.

 Alguna interpretación de claves de entonación en el habla de otros.

 Aparecen gestos pre- verbales.

 Aparecen los vocablos.

 Poca o ninguna comprensión de palabras individuales.

 Preferencia por la estructura de la frase y patrones de énfasis de la lengua materna.

 Atención conjunta niño-cuidador a objetos y acontecimientos.

1-2 años

 Aparición de estrategias para simplificar la pronunciación de las palabras.  Aparecen las primeras palabras.

 Expansión rápida del vocabulario después de los 18 meses de edad.

 Sobre-extensiones del significado de las palabras.  Los holofrases dan paso al habla telegráfica de 2 palabras.

 Los enunciados expresan relaciones semánticas distintas.

 Adquisición de algunos morfemas gramaticales.  Uso de gestos y claves de entonación para aclarar mensajes.

 Comprensión más rica de las reglas para tomar turnos vocales.

 Primeras señales de cortesía en el habla de los niños,

TEORÍAS DE LA ADQUISICIÓN DEL LENGUAJE:

TEORÍAS CONDUCTISTAS:

Este enfoque, que como hemos dicho tiene como uno de sus representantes más importante al psicólogo norteamericano Burrhus Frederick Skinner, sostiene que todas las conductas del ser humano se rigen por el esquema general de estímulo-respuesta.

Esto quiere decir que lo que hacemos tiene consecuencias que pueden ser buenas o malas, siendo capaces de anticiparlas para comportarnos de una forma u otra.

En lo referente al lenguaje, la teoría conductista afirma que es una conducta más que funciona de forma similar a otros comportamientos del ser humano, como el caminar o la capacidad cognitiva, y que existe gracias a una serie de estímulos que contribuyen a la aparición, mantenimiento y desarrollo de la conducta verbal.

Por ejemplo, nosotros animamos a nuestros bebés a realizar diferentes sonidos. Cuando éstos se aproximan a las palabras mamá o papá, el niño descubre que pueden ocurrir toda clase de acontecimientos, como que sonreímos o le cogemos en brazos.

Defiende que la imitación es la capacidad infantil que sirve de motor o permite acceder al lenguaje, junto a la necesidad de satisfacción de determinadas necesidades como comer, beber o jugar.

En función del refuerzo que obtengan del entorno, los niños cambiarán o ampliarán progresivamente sus emisiones verbales, haciendo que cada vez se parezcan más al lenguaje de los adultos según vayan creciendo.

Para los conductistas el lenguaje se adquiere como cualquier otra conducta, siguiendo dos principios:

A) Control de las condiciones del ambiente y la crianza (papel de los padres como modelos del lenguaje)

B) B) refuerzo de las conductas de aproximación al lenguaje adulto.

Según B. F. SKINNER

Para Skinner, el aprendizaje del lenguaje se produciría por simples mecanismos de condicionamiento. En un principio los niños simplemente imitarían, para después

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