Religión, Cultura y Valores. Actividades Lectura: El principito

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Actividades

Lectura: El principito

Se recomienda la lectura completa del libro El principito, aunque para realizar esta actividad nos centraremos en el episodio del encuentro con el zorro del capítulo 21.

Accede al texto desde el aula virtual o a través de la siguiente dirección web:

http://www.agirregabiria.net/g/sylvainaitor/principito.pdf

Descubre los valores del encuentro, sus exigencias y sus frutos en este pasaje del encuentro del Principito con el zorro –que representa la sabiduría–. Las imágenes están llenas de simbolismo y, por tanto, de realidades ambitales.

Basándote en este texto, explica qué es un encuentro y cuáles son sus exigencias y sus frutos. Utiliza la terminología que has aprendido con el estudio del tema.

Extensión máxima de la actividad:

2 páginas, fuente Georgia 11 e interlineado 1,5.

Este capítulo de “El Principito” nos muestra el viaje del principito hacia la rebeldía, hacia el conocimiento pleno de lo que es el encuentro, el encuentro con otra persona, por tanto, lo que es conocer el sentimiento de la amistad, del amor y de vivir conjuntamente.

Un encuentro no es solo un acercamiento físico, es el fruto de una unión paciente y generosa entre el hombre y otra realidad. Es un acontecimiento que nos realiza como personas. Debe partir de una actitud de respeto, no se trata de utilizar a los demás como medio para sus propios fines, sino llegar a un enriquecimiento mutuo. La única forma de unidad auténtica debe conseguirse mediante la creación de un campo de juego común, donde cada uno ofrece sus posibilidades y ambos las aceptan activamente, creando una experiencia reversible. El juego es un medio magnífico para aprender, es un aprendizaje para la creatividad que nos tiene que llevar a respetar al otro valorándolo, sin utilizarlo o rebajarlo, sino colaborando en un plan de igualdad, lo que lleva a crear amistad. Entiende la amistad como fruto de la creatividad, cómo puede una realidad ser única para nosotros aunque existan mil realidades semejantes a ellas e incluso mejor dotadas, porque lo importante es crear un vínculo de amor y lealtad entre dos personas. Para que se produzca un encuentro tiene que haber una relación bidireccional.

Un encuentro es pausado, sincero y consciente, que no entiende de prisas, sino de reconocimiento y respeto mutuo. Donde los momentos especiales alcanzan su verdadero valor, lo que hace que ese instante, no se parezca a otro.

Exigencias: La unión o el enlazamiento de ámbitos debe ser creado, y para ello son necesarias exigencias muy específicas, dichas exigencias son las bases del encuentro.

La generosidad, que lleva al respeto, al enriquecimiento mutuo, a colaborar activamente con la otra persona. Se trata de una actitud desinteresada, verdadera y fiel. No se trata a los demás como medio para tus propios fines. Si hago que confíes en mí, consigo que tengas fe y que lleve a una decisión de fidelidad. El proceso debe ser  a ritmo lento, donde la paciencia se ajusta a los ritmos naturales, no puede acelerarse a voluntad de cada uno, muchas veces un rato de silencio es muy valioso para crear vínculos. Además de la paciencia, la cordialidad es fundamental para dar un tono de dulzura a las relaciones humanas. Es importante saber escuchar lo que propone la otra persona, preocuparse e interesarse por ella, de tal forma que podamos compartir nuestras posibilidades, para poco a poco, ir ganado la capacidad de enriquecimiento mutuo.

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