EL DEBATE EN EL SIGLO EN TORNO AL “DESARROLLO” y “BIEN-SER-ESTAR” MÁS ALLÁ DEL MITO DEL PROGRESO

EL DEBATE EN EL SIGLO EN TORNO AL “DESARROLLO” y “BIEN-SER-ESTAR” MÁS ALLÁ DEL MITO DEL PROGRESO.

Resumen

El debate entorno al desarrollo ha abierto las puertas para que se generen críticas y contradicciones a este concepto que surgió en la posguerra como medio para rectificar la posición de los países vencedores. Resulta ser muy complicado la externalizaion de este concepto después de que se ha venido transformando a lo largo del tiempo desde su concepción.

Palabras clave

• Desarrollo
• Progreso
• Buen Vivir
• Pobreza
• Crítica

Introducción

¿Qué es el desarrollo? Según la Real Academia Española este concepto hace referencia a “La evolución de una economía hacia mejores niveles de vida”. Partiendo de este concepto es bien sabido que, muchas veces se puede llegar a confundir con crecimiento, lo cual no tiene nada que ver, puesto que son muy diferentes en cuanto a su concepción. El primero hace referencia a calidad y el segundo a cualidad.

Ahora bien, de donde surge el concepto de Desarrollo, algunos autores consideran la llegada a la presidencia de Truman a Estados Unidos, como el punto de inicio. El desarrollo era entendido por Truman como “la evolución hacia el bienestar y perfeccionamiento del género huma-no”. Según sus afirmaciones Estados Unidos de América y los demás países industrializados, se hallaban “en la cumbre de la escala evolutiva”. (Chiquito A., Mayer E., Llull G., Pinardi C., & Côrtes L. 2019)

Bajo esta premisa, el mundo se divide en dos, Países Desarrollados y Subdesarrollados, el concepto de desarrollo se transforma en un sinónimo de crecimiento económico determinado por el producto bruto per cápita. Surgen muchas mediciones de este concepto y la pobreza se materializa como el principal resultado de estas mediciones.

El desarrollo se ha caracterizado por ser ambiguo en cuanto a su percepción, lo han catalogado como simple progreso inclusive se ha vuelto sinónimo de crecimiento en el debate político, se busca el crecimiento económico basándose en indicadores que se alejan de la realidad y que no aportan nada de valor al debate. Este concepto de desarrollo es lo más alejado a las ideas que se planteaban al comienzo de su uso y aplicación.

En palabras de François Perroux el desarrollo “es la combinación de los cambios mentales y sociales de una población que la vuelven apta a hacer crecer, cumulativa y durablemente su producto real global”. (Guillén Romo Héctor, 2007-2008).

También, por otra parte, Perroux concibe tres conceptos que le ayudan a explicar porque existe el subdesarrollo y con ello entablar un análisis económico. El dominio que se ejercía por parte de los países europeos hacia los países periféricos. La desarticulación que para el se divide en tres; La ausencia de unidad de precios, La ausencia de propagación de flujos, La ausencia de propagación de información. (Guillén Romo Héctor, 2007-2008)

Con el uso de indicadores se buscaba medir que tanto iba encaminado el desarrollo de los países, sin embargo, esto no resulto del todo favorable.

Uno de los indicadores que propiciaron esta búsqueda de reflejar el desarrollo es el Índice Desarrollo Humano de las Naciones Unidas, el cual, basándose en las ideas de Amartya Sen, para ella la expansión de las libertades es la meta principal y el principal medio para el desarrollo el enriquecimiento de las libertades humanas debe incluir la eliminación de las privaciones de la persona. Este indicador busca medirlo basándose no solo en un aumento de utilidades y satisfacción económica, sino como una ampliación de las oportunidades y capacidades de las personas. Si bien este indicador fue pionero en una búsqueda por medir el desarrollo humano, su institucionalización, así como el de muchos otros indicadores, propicia que se desvíen del proceso de innovación del cual provienen generando así muchas críticas a los sistemas de medición.

Thomas Pogge cuestiona en este ensayo que la medición de la pobreza y el progreso de los objetivos del milenio se cumplen, no por el hecho de que estos se hayan cumplido de manera correcta a como se plantearon en un principio sino por el hecho de haber alterado los parámetros de medición, dice que no se mide completamente la pobreza a nivel mundial simplemente se mide con respecto a los países en vías de desarrollo con un crecimiento más rápido que los demás países en la misma situación.

Tomando una de las conclusiones de Thomas en su Critica al Progreso Cosmético de la Pobreza y el Hambre del Banco Mundial y los Objetivos del Milenio:

“Si queremos hacer justicia respecto al problema de la pobreza mundial, debemos trazarnos el objetivo de su eliminación y para conseguir este objetivo debemos construir un plan sumamente realista que asigne papeles y responsabilidades particulares a gobiernos específicos, a organizaciones intergubernamentales, corporaciones. Su principal responsabilidad deberá ser la de incorporar el imperativo de la erradicación de la pobreza, de reformar las instituciones sociales y las políticas que han venido permitiendo la existencia de la pobreza extrema. Esto requerirá la colaboración internacional de expertos, profesionales y de los medios de comunicación.” (Thomas Pogge​, 2014).

Se debe replantear la dirección de los parámetros a utilizar para llegar a una medición mas exacta y que sea factible para todos los países, no solo para aquellos con crecimiento económico. Como esta, existen muchas otras críticas que surgieron debido a la mala interpretacion del concepto de desarrollo.

Ahora bien, el “desarrollo”, al agregarle una característica, no hizo más que redefinirse, y sus críticas en lugar de dirigirse al concepto por sí solo, se dirigieron a los caminos que se debían seguir para alcanzarse, esto derivó en su total resquebrajo en los años 80 y 90, dando paso a las reformas neoliberales.

Si bien las ideas neoliberales no funcionaron en Latinoamérica, acentuaron los problemas sociales y económicos que se venían presentando incluso antes de su implementación, abriendo la puerta al progresismo latinoamericano que buscaba reducir el impacto ecológico, así como la reivindicación del Estado en el mercado y acciones más enérgicas para reducir la pobreza, sin embargo, esto no funciono como se planteó desde un principio.

Si bien el neoliberalismo no funcionó en América Latina, sus ideas sobre el desarrollo lo único que hicieron fue agravar los problemas sociales y ecológicos que se venían presentando desde décadas anteriores, dando paso al progresismo latinoamericano que buscaba la reivindicación del Estado en el mercado, y acciones más enérgicas para reducir la pobreza, sin embargo, esto quedó por mucho muy lejos de lo que se tenía planeado.

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