El Papel Del Docente En El Contexto Histórico

EL PAPEL DEL DOCENTE EN UN CONTEXTO HISTÓRICO

“El maestro deja una huella para la eternidad; nunca puede decir cuando se detiene su influencia.”

Ralph Waldo Emmerson, filósofo estadounidense del siglo XIX

El papel del docente empieza desde las sociedades primitivas de tal suerte que la función de la enseñanza es mucho más temprana que el propio proceso de la creación de instituciones educativas. Incluso antes de la escritura se ha desarrollado la oralidad que, junto a otros procesos comunicacionales, tuvieron la importante función de transmitir lo que se consideraba importante. Impulsado por simple imitación o el informe oral, el hombre logró producir y difundir una gran variedad de formas de relacionarse con el mundo que le rodea. Y ahí estuvo presente el maestro. Desde el principio de las civilizaciones el docente es el ser que conoce y enseña un determinado saber, hasta el profesional que transforma ese saber en favor de la dignificación del hombre.

Hagamos un breve recorrido desde la época egipcia en donde se requerían personas con ciertas habilidades específicas que dieron origen a la creación de centro especializados de enseñanza, como el caso de los escribas; en Esparta en donde la educación comenzaba a edades tempranas centrada la mejora de las capacidades físicas del individuo; en Atenas donde el servicio fue realizado por un cobro y para cada tipo de conocimiento se delegaba a una especie de tutor o profesor dividida en paidotribes(desarrollo intelectual), la gramática responsable de aprobar la (escritura y lectura) y el kitharistés (mejora física); en Roma donde el papel de la educación fue interpretado por los rectores que viajaban de ciudad en ciudad enseñando, así como los Luddi

Magister que enseñaban a niños de diferentes clases; pasamos a la época medieval, donde el conocimiento tuvo un claro control de las instituciones religiosas cristianas y aunque se le denomina una época de oscurantismo de ella se derivan dos hechos importantes: la preservación del conocimiento en las bibliotecas y el surgimiento de las Universidades. Tres acontecimientos también generan el cambio: la reforma, el renacimiento y el capitalismo que retoman al ser humano como centro del universo y explican en gran medida las grandes revoluciones liberales a nivel mundial que no sólo cambiaron para siempre la geografía sino la visión del mundo visto desde el modo de producción que se preserva a la fecha.

La educación ha estado cargada de profundas prestaciones pero también es portadora de grandes esperanzas. Las frustraciones de la figura del maestro se han derivado de la desorganización escolar, los deficientes recursos, la política administrativa, entre otros factores. Siempre se ha cuestionado el papel del maestro como formador e instructor. Tiene los privilegios de la edad y del saber, siempre tiene razón, es un ejecutor, es quien distribuye castigos, reproches, premios. La sistematización de la enseñanza evoluciona en el siglo XVII, las propuestas y críticas sobre los maestros a lo largo de la historia son abundantes y han planteado el paradigma milenario del niño frente al docente. Mencionemos solo algunos de los pedagogos pioneros de esta controversia que es la esencia de la filosofía educativa moderna: Rosseau, Pestalozzi, Fröebel, Dewey, Freinet, Makarenco, Montessori, etc. que enriquecieron con diversas alternativas la esencia para la formación y el desarrollo del ser humano social actual. En el siglo XIX se reafirma la importancia de la formación magisterial, “la respuesta de la nueva pedagogía se plasma en un cambio de actitud con respecto al niño, se produce una traslación del eje educativo en un intento de respetar la vida infantil, convirtiendo al maestro en un auxiliar de la educación” .

¿Y en México que pasaba? Nuestro pasado prehispánico se perdió en la brutalidad de la conquista, los

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