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Enfermeria Humanistica


Enviado por   •  13 de Agosto de 2013  •  4.001 Palabras (17 Páginas)  •  3.093 Visitas

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Uno teoría y practica de la enfermería humanística

La teoría de la práctica de la enfermería humanística propone que las enfermeras aborden la enfermería como una experiencia existencial. Puedan describir fenomenológicamente los estímulos que se reciben, sus respuestas y lo que llegan a conocer a través de su presencia en la situación del cuidado del prójimo.

La enfermería es una experiencia que se vive entre seres humanos. La enfermería evoca e influye en la expresión y manifestaciones de la capacidad de seres humanos, para la existencia y su condición para ella. En la enfermera, implica una responsabilidad por su propia condición o capacidad de ser. El termino “enfermería humanística” se eligió para designar una empresa teórica que propone reafirmar e iluminar esta responsabilidad como inherente y fundamental a toda la enfermería artístico-científica. La enfermería humanística es una relación unilateral sujeto- objeto, guiada por una enfermera en beneficio de otro. La enfermería es una relación transaccional que se responsabiliza de investigar y la conceptuación basada en la conciencia existencial.

La experiencia existencial permite el conocimiento humano del ser y de la calidad de ser del otro. Necesita que se reconozca a cada hombre como singular en su situación, luchando y rivalizando con sus compañeros para sobrevivir y llegar a ser, para confirmar su existencia.

La conciencia existencial requiere de la autenticidad con uno mismo. Como aspiración visionaria, dicha autenticidad y sensibilidad es más lo que generalmente se denomina conciencia intelectual. Están implicadas las respuestas auditivas, olfatorias, orales, visuales, táctiles y viscerales.

La autoconciencia, sensibilidad, autoaceptación y realización de las potencialidades nos permite compartir con otros, de modo que aquellos pueden entrar en relación con nosotros. Cada quien tiene su propio mundo de vivencias. Esta cualidad de autenticidad personal permite que las acciones responsables elegidas estén basadas en le conocimiento humano más que en la defensiva humana.

El hombre posee la capacidad inherente para responder a otro hombre como otro hombre. Sólo cada enfermera singular, enfrentada al caos de sus alternativas en una situación dada, puede elegir entre relacionarse o no con otros y cómo hacerlo en su mundo de la enfermería. Elegir relacionarse o responder y cómo hacerlo, es algo que el hombre no puede imponer desde fuera a otro hombre.

Las conceptuaciones literario-descriptivas de la enfermería que reflejan esta cualidad de estar de la enfermera (presencia, intersubjetividad), requieren de enfermeras deseosas de investigar y hacer concientes los misterios de su lugar común y de estimar las ideas singulares, los valores y significados fundamentales de su práctica.

La fenomenología estudio de la “cosa en sí”. La literatura existencial, las descripciones de lo que el hombre ha llegado a conocer y comprender por su experiencia. La fenomenología como el existencialismo valora la experiencia, capacidades del hombre para la sorpresa y el conocimiento y exaltan el desarrollo de lo “nuevo”

Las enfermeras viven al lado de otros seres humanos eventos culminantes de la vida: creación, nacimiento, triunfo, inexistencia, pérdida, separación, muerte. Sus relaciones durante las experiencias reales vividas y sus propias historias adquiridas a través de la experiencia o el estudio hacen única la “mediación” de la situación de la enfermería. La teoría de la práctica pide que la enfermera describa lo que llega a conocer (1) la perspectiva singular de la enfermera y sus respuestas, (2) las respuestas que puede conocer de otros y (3) el llamado y la respuesta recíprocos, la mediación, del modo en que ocurren en la situación de la enfermería.

Filosófica y fundamentalmente la causa se relaciona con cómo percibe, el propósito y la finalidad de la enfermería. La considera como la capacidad para bregar con otro ser humano en las experiencias de máxima intensidad relacionadas con la salud y sufrimiento, en las que los participantes son y devienen según su potencial humano. Propone que las formas humanas de existencia en las situaciones de la enfermería necesitan testimonio y mediante la descripción, las enfermeras comprenderán mejor y se relacionan con el hombre como éste es.

Fenomenológicamente la enfermería es compleja. El estudio y descripción de los fenómenos humanos presentados en las situaciones de la enfermería influirán consecutivamente en (1) la cualidad de la situación de la enfermería, (2) el conocimiento general que posee el hombre de la variación en la capacidad humana para ser y (3) el desarrollo y forma en que éste se da en la teoría de enfermería y ciencia.

Dos fundamentos de la enfermería humanística

La enfermería es un fenómeno que se presenta en diversas formas. Varia con edad del paciente, patología o incapacidad física o mental, tipo o grado de ayuda solicitada, duración de la necesidad de ayuda, ubicación del paciente y potencial para obtener y hacer uso de ayuda, percepción que tenga enfermera de necesidad y aptitudes para responder a ella. La enfermería sólo es un elemento en el sistema evolutivo del cuidado de la salud, por lo cual aparece en nuevas formas especializadas.

Se relaciona con el estado de buena o mala salud de un ser humano o con la sobrevivencia personal de un individuo en particular. No todos los casos de la enfermería sean cuestiones de vida o muerte, sino más bien que cada acto de la enfermería tiene que ver con la condición de vida y muerte de una persona.

La “salud” se valora como necesaria para la sobrevivencia y con frecuencia se propone como la meta de la enfermería. Implica como respuesta humana, la valoración de algún potencial humano, más allá del estrecho concepto salud, considerada como ausencia de enfermedad.

La noción de humanidad se ha asociado con la enfermería por implicar ésta un ser humano ayudando a otro. Equiparar el carácter humanístico de la enfermería exclusivamente con la irradiación de la bondad humana es un serio error de simplificación exagerada. Como transacción humana, el fenómeno de la enfermería contiene todos los potenciales y limitaciones humanos de cada participante.

El acto de cuidar, de 2 o más seres humanos se relaciona en una situación compartida se trata de un evento interhumano. La enfermera y paciente (cliente, familia, grupo) participan necesariamente en los acontecimientos, son interdependientes. Cada uno es originador de actos humanos y respuestas humanas hacia el otro son independientes.

El ser y hacer están interrelacionados tan intrincadamente que es difícil, hablar de uno sin el otro. Las descripciones de la enfermería se centran con frecuencia de modo principal (y en ocasiones exclusivamente) en el aspecto el hacer del proceso, en las técnicas o procedimientos de la enfermería. El acto de cuidar es una expresión conductual del modo de estar de la enfermera.

La enfermería esta embebida en le contexto humano. Por de una respuesta de aliento a una persona que lo necesita, aspira al desarrollo del potencial humano, refleja todo potencial humano y las limitaciones de los participantes. Como transacción intersubjetiva contiene la posibilidad que ambos participantes se influyan y enriquezcan recíprocamente. El fundamento mismo de la enfermería es, por lo tanto, humanista, pues es al mismo tiempo la expresión del hombre y su lucha por la sobrevivencia y su desarrollo ulterior en la comunidad.

Cuando la enfermería es genuinamente humanística, es una expresión vivida del compromiso auténtico de la enfermera. Es un compromiso existencial dirigido a acrecentar el potencial humano. La enfermera humanista valora la enfermería como una situación en la que existen las condiciones necesarias para dicha realización humana y está abierta a las posibilidades que ofrece el aquí y ahora íntimamente compartido de la enfermera y el paciente.

Para que el proceso de la enfermería sea verdaderamente humanista tiene que producir frutos, es decir, ser una expresión real de reconocimiento de la enfermera y una valorización de la enfermería como una oportunidad para el desarrollo del ser humano.

El hombre es producto de sus decisiones y de que el objetivo de la enfermería es ayudar al hombre a estar mejor o a superarse, el esfuerzo de la enfermería humanística está dirigido a incrementar las posibilidades de la toma de decisiones responsables. En la medida que se es más consciente de la libertad personal para elegir se produce concurrentemente la conciencia de la cualidad de elegir, de la responsabilidad que implica siempre la libertad. El acto de elegir se expresa en una respuesta a la situación con la disposición a aceptar la responsabilidad de sus consecuencias previsibles.

El termino “enfermería humanística” se refiere a un tipo de práctica de la enfermería y a sus fundamento teóricos. Ambos están tan interrelacionados que es difícil e incluso un tanto distorsionante hablar exclusivamente de la práctica o de la teoría de la enfermería humanística.

La enfermería humanística se ocupa de lo que es básicamente la enfermería, esto es, por el fenómeno de la enfermería donde quiera que ocurra, sin considerar sus formas especializadas: clínica, funcional o sociocultural. Es así que su dominio abarca cualesquiera o todas las situaciones propias de la enfermería.

La clave está en volver a la fuente, observar el fenómeno de la enfermería tal como ocurre en la vida real. Desde la perspectiva podemos decir que la situación es la que prepara el escenario en que vive la enfermería. Así, las dimensiones principales

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