Ensayo Cultura Y Sociedad

CULTURA Y SOCIEDAD

El presente ensayo intentará explicar la relación existente entre cultura y sociedad a través de los diferentes modelos del individuo, normas, valores, roles, status, ritos y símbolos. Con el objetivo de mostrar de una manera más simplificada la existencia de una interacción entre todos estos elementos a disposición.

Consideramos pertinente iniciar dando un pequeño significado de lo que vulgarmente se considera cultura y sociedad desde un punto de vista no sociológico, donde cultura es el conjunto de saberes, creencias y pautas de conducta de un grupo social, incluyendo los medios materiales (tecnologías) que usan sus miembros para comunicarse entre sí y resolver sus necesidades de todo tipo; y sociedad es un tipo particular de agrupación de individuos que se produce entre los humanos donde la relación que se establece entre los individuos supera la manera de transmisión genética e implica cierto grado de comunicación y cooperación.

Definido estos conceptos podemos decir que el individuo se apoya en diferentes modelos para construir su realidad en los que podemos encontrar el modelo del individuo racional donde el individuo se encuentra aislado de los demás, es autónomo y egoísta. Es racional en el sentido de que busca exclusivamente su felicidad y elabora estrategias coherentes para alcanzarla. La ambición de los sociólogos que adoptan este proceso es explicar los fenómenos sociales partiendo de un individuo privado de todo lo que forma parte de la vida en sociedad como lo es la familia, amigos, entre otros, y que son movidos por la búsqueda de su interés personal; la cual fue rechazada por números sociólogos ya que no se puede demostrar que la búsqueda del interés individual lleve a la satisfacción de todos. Por otra parte tenemos al modelo del individuo cuya racionalidad es limitada que según el sociólogo R. Boundo nos dice que un individuo es racional a partir del momento en que tiene “una buena razón” para hacer algo, lo que quiere decir que tanto el religioso que vive pobremente, como el yuppy que solo quiere enriquecerse, son racionales.

El modelo del individuo socializado nos permite tener en cuenta fenómenos culturales ya que es conveniente reconocer que el individuo nace de la sociedad y que no todos los individuos son intercambiables; este modelo presenta la ventaja sobre los anteriores de que toma en consideración la influencia de la cultura en los comportamientos individuales. Para este modelo Alain Caillè propone la hipótesis según la cual los hombres actúan por placer, para defender sus intereses, por sentido del deber o para liberarse. Así, el placer, el sentido del deber o la libertad pueden ir al encuentro de los intereses materiales.

La hipótesis de un individuo racional nos permite entender que los individuos están en el origen de las reglas sociales. Por el contrario, la de un individuo socializado permite explicar el respeto a las reglas que parecen superiores a los hombres. Diversos sociólogos, como P. Bouedieu con su concepto de habitus han intentado ir mas allá de esta oposición pero ninguna de las teorías ha llegado a ser unánime.

Por otra parte la acción social está guiada por las normas y valores, las normas son las reglas que rigen la acción de los individuos en las sociedades existen dos formas de reglas las explicitas que pueden ser de naturaleza o reglamentaria y las implícitas que se conforman por la interiorización durante el proceso de socialización. Mientras que las normas son concretas, los valores son abstractos. La libertad, el trabajo, la igualdad, el amor al prójimo, entre otros, son algunos de los ideales más característicos de las sociedades. Aunque no son concretos los valores tienen una influencia en lo real y participan en la orientación de la acción otorgando a las normas su legitimidad; los valores a diferencia de las normas, no desaparecen rápidamente sino que subsisten en la sociedad mientras otros valores se convierten en dominantes.

La función de las normas y valores es guiar la acción social. Sin embargo, los comportamientos individuales jamás están totalmente determinados porque la coexistencia de varios sistemas de valores y la maleabilidad de las normas hacen igual de legítimos comportamiento s diferentes.

Por parte de los roles y status podemos decir que el status corresponde a la posición ocupada por una persona en un ámbito de la vida social. Como los ámbitos sociales son múltiples, los status también lo son. Un hombre puede ser a la vez marido, padre de familia, encargado, cazador y concejal. Así el individuo se define horizontalmente en relación con sus iguales y verticalmente, por el lugar que ocupa en una jerarquía. A cada status le corresponden varios roles que obedecen a las expectativas de quienes rodean al individuo. Del mismo modo que las status, los roles no se dejan a la estricta apreciación de los individuos y están, en gran parte,

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