La Filosofía Moderna y Algunas Posturas Filosóficas Contrarias al Proyecto Moderno

Escuela de Bachilleres: Joaquín Ramírez Cabañas

Filosofía

Ensayo

Presentado por:

6to semestre

Coatepec, Ver., A 30 de mayo de 2022

La Filosofía Moderna y Algunas Posturas Filosóficas Contrarias al Proyecto Moderno.

Tomando en cuenta el sistema de estudio de la filosofía moderna, podemos decir que se divide en dos enfoques: el racionalista y empirista; en relación con la investigación ligada al desarrollo de la ciencia, a su aplicación a la tecnología y al desarrollo del sistema capitalista.

I. Kant: intenta una síntesis de dos métodos relacionados con el conocimiento. A partir de la crítica y del idealismo estudiaremos a Kant, Hegel y el materialismo histórico de K. Marx.; La angustia de Kierkegaard y el vitalismo de Nietzsche, cual cultura y situación del hombre moderno.

El problema del conocimiento.

— Modernidad.

El objetivo es situar el cambio de sociedades a sociedades actuales. Para esto vamos a revisar el movimiento de la sociedad occidental, el cristianismo y otras sociedades analizadas por Berger y Luckmann.

Reconocen que las culturas de la antigüedad están más alejadas de este tipo tradicional; eran sociedades rurales, premodernas; la temporalidad es vivida al ritmo del cosmos, de la naturaleza y del hombre, ya que se constituyen en sociedades

En estas sociedades, “la religión proporcionaba un conjunto de valores para la organización social; las personas hacen conexiones, reconocen y toman medidas para enfrentar los desafíos ambientales.

El mundo de la vida nos precede, estaba ahí antes de que todos nacieran; este mundo de la vida es un horizonte cultural tan largo como sujetos interdependientes.

Los valores compartidos mantuvieron la cohesión social y ayudaron a enfrentar desafíos en su trato con la naturaleza. Los miembros de estas comunidades creían en espíritus, demonios, hechizos y brujas.

En las sociedades tradicionales, la religión cumplía un papel de ordenamiento nómico, en una realidad ordenada.

Modernidad.

Además de ser un paso histórico, constituye en la filosofía un modo racional de ver la sociedad y al hombre para conocerlos y los pensadores modernos concebían la historia como un proceso significante “que apunta a la emancipación del hombre y sociedad”.

Comienza con el racionalismo del siglo XVII, termina con la Ilustración del siglo XVIII y continúa en el siglo XIX. Tiene una etapa ilustrada y una etapa reflexiva bajo el nombre de modernismo tardío o posmodernidad, que se produce en los siglos XX y XXI.

La modernidad fue patrocinada por estados y el naciente sistema capitalista de producción.

Originalmente, fue un movimiento optimista; la alfabetización aumentó dramáticamente, a partir de las escuelas públicas primarias y secundarias establecidas, se caracterizó por una fe en la dominación mundial orientada.

Modernización.

La modernidad ha ido de la mano de la modernización.

Este último es el aspecto material, el crecimiento económico sostenido, aplicación científica en forma de tecnología, industria; las sociedades modernas están orientadas hacia el bienestar material.

La modernización, hasta el día de hoy, ha sido continua. Podemos decir que ocurre en grados tanto en el tiempo como en el espacio.

— Marshall Berman distingue tres etapas:

Primeros principios del siglo XVI hasta finales del siglo XVIII.

Segundo: comienza con la Revolución Francesa y continúa a lo largo del siglo XIX.

Tercero: Se refiere al siglo XX.

Los logros se acumulan constantemente.

Max Weber estudió una situación histórica que se dio en los primeros procesos de industrialización; los altos salarios no afectaron el desempeño laboral.

Modernidad filosófica.

La filosofía considera los problemas según temas de cada etapa de la modernidad.

Así, en la etapa de filosofía moderna, que va del siglo XV al XIX, aparecieron filósofos admiradores de los logros científicos en las ciencias naturales que se preguntaban si existía un método para la filosofía que hazlos de la misma manera.

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