Lenguaje Por Naturaleza Y Convención .El Cratilo

Lenguaje por naturaleza y convención El Cratilo

Introducción:

En los diálogos de Platón El Cratilo, se desarrollan dos posturas;

Posición de Crátilo (naturaleza): Cada cosa tiene un nombre exacto por naturaleza; no es un nombre aquel del que se valen algunos, después de haberse puesto de acuerdo, para servirse de él, un nombre de tales condiciones sólo consiste en una cierta articulación de la voz. Todos los hombres, tanto griegos como bárbaros, tienen la misma exactitud en sus nombres.

Posición de Hermógenes (convención): Los nombres no tienen otra propiedad que la que deben a la convención y consentimiento de los hombres. Si se reemplaza una palabra por otra, el nuevo nombre no parece menos propio que el primero. La naturaleza no ha dado nombre a ninguna cosa, todos los nombres tienen su origen en la ley y el uso, y son obra de los que tienen el hábito de emplearlos.

También interviene Sócrates en la discusión, para mantener una mediación entre ambas posturas.

Desarrollo:

Convención (Hermógenes)) Naturaleza (Cratilo y Sócrates

La relación entre el significante y el significado es puramente convencional y ninguna descripción lingüística es más adecuada que otra a la realidad descrita, ya que la función del lenguaje no es desvelar ninguna verdad sino persuadir al interlocutor provocándole sensaciones. El lenguaje cotidiano está plagado de inexactitudes y ambigüedades y en ello reside su fuerza como instrumento de persuasión.

El lenguaje no tiene una función epistemológica. El lenguaje tiene una función epistemológica

Términos que asocian a las cosas son independientes de estas El lenguaje cumple con una función y relaciona las cosas. Se necesita una relación entre cosas y el nombre para llevar a cabo la comunicación. La comunidad de hablantes necesita términos comunes.

Todos los nombres son verdaderos, no puede haber nombres falsos. Los distintos pueblos aplican distintos nombres a las mismas cosas.

La verdad del hombre es relativa al que lo utiliza y no es más verdadero un término que otro. Los nombres pueden ser verdaderos o falsos.

La verdad depende del sujeto(el hombre es la medida de todas las cosas) Todas las cosas son las mismas para todos los hombres, y estos no pueden conocer sino la verdad.

(Sócrates) La verdad no reside en los sujetos que conocen sino en una esencia que existe independientemente de los sujetos.

“si ni todo es para todos igual al mismo tiempo y en todo momento, ni tampoco cada uno de los seres es distinto para cada individuo, es evidente que las cosas poseen un ser propio consistente. No tienen relación ni dependencia con nosotros ni se dejan arrastrar arriba y abajo por obra de nuestra imaginación, sino que son en sí y con relación a su propio ser conforme a su naturaleza”

en distintos estados se dan distintos nombres a las mismas cosas, por lo que no parece que se atienda a la naturaleza de las cosas cuando se las nombra (Sócrates)Un nombre para ser verdadero debe referirse no a lo que aparece sino a la esencia fija e inmutable de la cosa nombrada. El término para referirse a los caballos puede ser distinto en distintas comunidades de hablantes, pero todos ellos han de estar referidos a la esencia 'caballo'

El término es un instrumento que sirve para enseñar y distinguir los seres. Como todo instrumento debe ser adecuado a la función que debe realizar, es decir debe ser adecuado a la naturaleza de su objeto.

Todos los hombres

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