Los Niños De Hoy

Ensayo

“LOS ALUMNOS DE AYER Y DE HOY”

Según el texto de texto de Pablo Pineau “Otra vez sopa: Imágenes de la infancia y escuela en Mafalda”, se describe a Mafalda no solamente como un personaje de historieta más; es, sin duda, el personaje de los años setenta. Es una verdadera heroína "rebelde", que rechaza el mundo tal cual es.

Mafalda pertenece a un país lleno de contraste sociales que, sin embargo, quiere integrarla y hacerla feliz. Pero Mafalda resiste y rechaza todas las tentativas. Mafalda vive en una relación lógica con el mundo adulto que ella no estima ni respeta, al cual se opone, ridiculiza y repudia, reivindicando su derecho de continuar siendo una nena que no se quiere incorporar al universo adulto de los padres.

Mafalda nos prueba también que los chicos nos aportan una nueva ideología sobre el modo de pensar y una moral gracias a varios temas que son principalmente la justicia, la paz y la mujer.

Mafalda es una niña que no jugaba con muñecas, sino que jugaba con sus mundos, entonces ella tenía un mundo para cada cosa y para cada ocasión.

A su alrededor, una pequeña corte de personajes : Manolito, el chico plenamente integrado a un capitalismo de barrio, absolutamente convencido de que el valor esencial el mundo es el dinero; Felipe, el soñador tranquilo; Susanita que se desespera por ser mamá, perdida en sueños pequeño burgueses. Y después, los padres de Mafalda, resignados, que aceptan una rutina diaria.

La diferencia entre Mafalda y un niño del siglo XXI

La única diferencia entre Mafalda y los chicos del siglo XXI es que a esta nueva generación le gusta la sopa.

Lo que sí es verdad es que hoy están todos dentro del aula. En cualquier colegio público o de gestión privada se encuentran los niños de todos los niveles sociales, inmigrantes, niños con distinto coeficiente intelectual, algunos con deficiencias. Ahí está el que antes era brillante y el que antes estaba en la calle.

Hoy en día hay un gran problema a la hora de dar clases, que quizás en la época de Mafalda no las había. Hoy se escucha decir a muchos maestrosy muchos alumnos también:

"Hoy los chicos se aburren porque no son el centro de atención"

"Ningún profesor puede competir con la televisión o un videojuego para captar la atención de un alumno"

"Los profesores que uno nunca olvida son aquellos que alguna vez nos hicieron sentir que teníamos un gran potencial"

"Lo bueno es que el estudiante caiga en la cuenta de su propia ignorancia y se esfuerce por superarla. No sirve hacer cálculos de memoria y repetir textos que jamás podrán ser aplicados en la vida cotidiana"

"Muchos profesores no soportan que el estudiante pueda enseñarles algo".

Captar la atención de un alumno hoy, es uno de los mayores desafíos de un maestro. En la era de los video- juegos y de Internet, la capacidad de concentración del estudiante ha disminuido dramáticamente.

Consciente de que la tecnología no sólo ha modificado la vida cotidiana sino también las relaciones en el aula, y que los conocimientos que un niño puede adquirir gracias a los avances tecnológicos permiten que hoy muchos lleguen a clase sabiendo más que sus maestros.

¿Qué pueden hacer los docentes que reciben a estos chicos en el aula?

La tarea del maestro es crear un enigma para provocar el deseo de aprender. Debemos estar atentos a sus intereses y acercarles materiales, ya sea libros, programas de computación, juegos, instrumentos musicales o cualquier herramienta que alimente su curiosidad.

Ser un docente innovador: que trae nuevos recursos y se anima a probar estrategias distintas en el aula. “Es aquel que disfruta dentro del aula enseñando y logra que

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