Mi consideración sobre la evaluación

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Una misma alumna. Dos maestras distintas.

"Uno recuerda con aprecio a sus maestros brillantes, pero con gratitud a aquellos que tocaron nuestros sentimientos."

Es verdad. Y también se acuerda de los otros.

Hace varios años, yo había comenzado una carrera, que luego quedó colgada. Varios años después me propuse terminarla. Para ello tenía que hacer algunas cosas que con el tiempo transcurrido habían cambiado en el Plan de Estudios. Para una de esas cosas pendientes, me asignan a una docente… que había sido compañera mía en esa misma carrera, y era amiga de unos amigos míos; es decir, teníamos referencias el uno del otro, sin ser demasiado conocidos o amigos. Al llegar a la instancia evaluativa, a la hora de cerrar ese tramo, me salió con algunas expresiones tales como…

• Me hubiera gustado…
• Hubiera estado interesante si…
• Quisiera haber visto…

Y -pese a que no podía decírselo, porque ponía en juego mi acreditación y mi nota- yo pensaba:[pic 5][pic 6]

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Debo reconocer que faltan algunos globos acompañando a los anteriores:[pic 11]

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A partir de ahí comencé a denominarlos como profesores que son “Jurados del Bailando”. (Podría ser también de los que se ven hoy día como “Jurado de Bake off”, “Jurado del Gran Premio de la Cocina”, etc.). Son quienes evalúan… una danza, un postre, una comida… en función de lo que les gustó o no les gustó, de lo que ellos quisieran o no quieren, de lo que esperarían o no esperan…

Como todo, esto tuvo su parte buena. De ellos aprendí lo que no quiero ser, lo que no quiero hacer. Así como un profesor nuestro decía que “uno siempre se casa queriendo formar la Familia Ingalls y termina descubriendo que formó la familia Simpson”, yo con estos profesores aprendí qué tipo de profe no quiero ser. Al menos, en criterios de evaluación. Si voy a evaluar determinados aspectos, debo hacerlo saber antes. “El que avisa, no traiciona”. Si no lo aclaré… no hay reclamo. [pic 15]

En estos días de pandemia, por todos lados estoy escuchando “expertos” en Educación. Hoy un Ministro de Educación hablaba de porfolios… Otra ministra de Educación decía que “no se evaluará a los alumnos en el primer trimestre” mientras otros dicen que “Evaluar se va a evaluar, lo que no se desaprobará” o “No se calificará” …

Co-evaluación, Hétero-evaluación, Auto-evaluación, Evaluación permanente, Evaluación Conceptual… Lo cierto es que tampoco hay notificaciones ni indicaciones oficiales para la calificación de los estudiantes. Muchas palabras dando vueltas.

La ciudad del mundo nuevo^[1]
duerme su sueño de paz,
ve la vida en un video
y se le va la vida, creo.

Megáfonos recomiendan,
“Use máscara de gas”,
hay oxígeno vencido
en esta farsa de la paz.

[… ]Mareado de novedades
tambalea el mundo nuevo,
y hay un hambre de verdades
que se fueron de paseo.

[… ] Mundo nuevo, mundo nuevo.

La pantalla me lo cuenta con mi desayuno,

y es probable que no quede ninguno.

Año 2015. Escuela Técnica de la Ciudad de Buenos Aires, en el barrio de Barracas; a unas 15 cuadras del Obelisco, emblema Nacional: la escuela no dispone de Internet. Hay un servicio contratado, hay gente asignada… pero lo cierto es que nunca funcionó, nunca tuvieron conectividad. Creo que aún hoy no funciona.

Año 2020. Partido de Necochea. Pandemia. ¿Cómo saber si un alumno tiene acceso a Internet? Si lo tiene, ¿con qué cuenta para acceder, cuánto tiempo puede hacerlo? ¿Cuánto le cuesta hacerlo? ¿Tiene un lugar adecuado para hacer la tarea? ¿Comparte la mesa de tareas con hermanos? No puede ir a una Biblioteca: ¿tiene en su casa libros o revistas para hacer los trabajos de la materia que yo dicto? Ayer veía chicos en patas, en casas con pisos de tierra, que dan a una vereda de tierra, en una calle de tierra, cortadas de barro y frío… ¿cómo hace un chico el trabajo en esas condiciones? ¿Sale a trabajar? ¿Tiene alguien que le ayude? ¿Vive en el Balneario Los Ángeles? ¿Pudo comer bien hoy, tuvo un desayuno?...

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