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Santo Tomás: Fe y Razón


Enviado por   •  29 de Junio de 2021  •  Tareas  •  1.435 Palabras (6 Páginas)  •  110 Visitas

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Santo Tomás: Fe y Razón

“El único instrumento que los hombres tenemos tanto para perfeccionarnos como para vivir dignamente es la educación”

Tomás de Aquino

INTRODUCCIÓN

El periodo histórico occidental que se conoce como Edad Media se le suele dividir en la llamada Alta Edad Media que van de los siglos V y X y la Baja Edad Media que va del siglo X al XV (Abbagnano y Visalberghi, 1996).

A finales del siglo XI principios del siglo XII la autosuficiencia productiva del Feudalismo entra en crisis y su economía basada en el círculo cerrado se viene abajo, por lo que la actividad productiva se desplaza a las ciudades recuperándose el comercio que consolida a la clase Burguesa y cuyo poder impulsará el surgimiento de las primera Universidades (Abbagnano y Visalberghi, 1996, pp. 151-154; Santoni, 1995 p.197).

Para el siglo XIII la llamada Escolástica (de inspiración neoplatónica y agustiniana), cuyo objetivo es acercar al hombre a la comprensión de la biblia, se encuentra en un periodo de florecimiento y coincide con la difusión de las doctrinas filosóficas de Aristóteles gracias a las traducciones de los árabes (Abbagnano y Visalberghi, 1996, pp. 154-157; Santoni, 1995, p. 208).

En el periodo de la Baja Edad Media es donde podemos ubicar al filósofo y teólogo Tomás de Aquino quien nace en 1225 en Roccasecca dentro de una familia de nobles. La formación de Tomás de Aquino es benedictina y fue alumno en París y Colonia de Alberto Magno quien para esos tiempos había establecido por primera vez, la diferencia entre teología y filosofía. Tomás de Aquino también llego a ser maestro en la universidad de París y Nápoles. Muere en 1274 en Fossanova (Abbagnano y Visalberghi, 1996, p. 175, Santoni, 1995, p. 209).

        

DESARROLLO

La influencia de Aristóteles

El encuentro de la teología tradicional con la filosofía de Aristóteles plantea un problema para la escolástica medieval cristiana acerca del conocimiento verdadero, mientras la primera establece que se encuentra en las sagradas escrituras (fe), para Aristóteles este conocimiento tiene lugar mediante la experiencia sensible y los procesos cognitivos (razón). De ahí que el trabajo de Aristóteles es considerado opuesto a los dogmas cristianos y por lo tanto rechazado por la iglesia (Abbagnano y Visalberghi, 1996, pp. 171-173).

Tomás de Aquino, lejos de alejarse del aristotelismo, logra integrar los principios de esta filosofía (hilemorfismo, ser, movimiento, virtudes intelectuales, virtudes morales, etc.) a los dogmas cristianos (la creación, la encarnación, la trinidad, etc.) para poder explicar a estos últimos de manera racional, demostrando con ello que entre fe y razón no existe una oposición sino una armonía natural (Abbagnano y Visalberghi, 1996, pp. 174-175, Santoni, 1995, pp. 208-2009).

Explicando a de Dios

De esta manera es como Tomás de Aquino hará uso del camino de la razón para poder comunicar a otros sus creencias religiosas, pero antes que cualquier otra cosa, el de la existencia de Dios a quienes la ponen en duda. Para ello parte de los efectos sensibles, del mundo natural, de lo tangible y explica lo que considera son las verdades necesarias con cuya reflexión pretende conducir al establecimiento de la existencia de Dios (preámbulos de la fe), para ello formula 5 pruebas o vías (la prueba cosmológica, la prueba causal, la relación de lo posible y lo necesario, los grados, y la que se deduce del gobierno del mundo), en su mayoría de origen aristotélicas, que podrían resumirse en lo siguiente: si algo existe tuvo que haber sido creado por alguien que no haya sido creado previamente, un ser superior: Dios. También la razón, nos dice Santo Tomás, ayuda a aclarar las verdades de la fe o bien a refutar los señalamientos contra ella, siempre y cuando la razón se sujete a la fe, de no coincidir entonces significa que no se tiene una verdad racional sino una conclusión falsa. (Abbagnano y Visalberghi, 1996, pp. 178-180).

La educación: acto y potencia

Así pues, Tomas de Aquino en su obra más destacada: La Suma Teológica aborda, entre otras cuestiones, el concepto de educación, donde reflexiona acerca del hombre como ser creado a imagen y semejanza de Dios y por lo tanto un ser perfecto en él cual prexisten ya, las cualidades de la virtud. Sin embargo, esta perfección (acto) se encuentra únicamente como una posibilidad (potencia) que tendrá que ser desarrolla. En este punto es donde entra a escena la educación, la cual considera, es el medio idóneo para contribuir a que estas disposiciones se conviertan en buenos hábitos ya que también se corre el riesgo de que conviertan en malos hábitos (vicios). Así pues, la educación vine a ser para Tomas de Aquino (como se citó en Santoni, 1995):

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