La Sal De La Tierra

La sal de la tierra

La película estadounidense, La sal de la tierra, de 1954 dirigida por Herbert J. Biberman nos muestra como un grupo de mineros del zinc sufren unas condiciones de vida y de trabajo precarias con respecto a sus compañeros anglosajones. Estos últimos tienen mejor salario y viviendas que los mineros autóctonos a pesar de desarrollar el mismo trabajo. Tras un accidente sucedido en la mina, los obreros mejicanos deciden ir a la huelga y exigir igualdad. Esta misma igualdad es la que terminaran exigiendo las mujeres de los mineros, que no están dispuestas a quedarse en casa sin tomar parte de la protesta.

La película basada en hechos reales, fue rodada en Nuevo Méjico, en los años cincuenta cuando se produjo la huelga minera en la localidad de Silver City. Podemos ver como no se adopta una determinada postura política, sino que se da una defensa del respeto a los principios básicos de igualdad y libertad del ser humano.

La mayoría de los personajes fueron interpretados por los propios mineros locales, sus esposas y vecinos de la zona. Entre estos destaca Juan Chacón, que presidía el sindicato de mineros desde 1950 y había sido uno de los principales responsables de la huelga contra la compañía Empire.

Con el rodaje empezaron a sucederse una serie de inconvenientes en torno a la película, llegando a no haber libertad de producción. Además pronto comenzaron las hostilidades gubernamentales contra esta, acusándola de panfleto comunista. Las represalias no se hicieron esperar e incluso se repatrió a la actriz protagonista a su país natal. El equipo además sufrió una serie de amenazas. En marzo de 1954 La sal de la tierra se estrenó comercialmente en los Estados Unidos, aunque ninguna publicación importante aceptó reproducir sus avisos y sólo trece salas en todo el país se atrevieron a exhibirla. El mensaje que emitía la película le costó a Biberman estar en el punto de mira del macarthismo, siendo incluido en “la lista de los diez de Hollywood”, acusado de subversión.

A través de la película se nos intenta esbozar un problema social con un mensaje de trasfondo, la importancia de la unión y como “la unión hace la fuerza”. El director nos muestra una situación real donde no se disfraza a los protagonistas de de superhéroes, sino que se nos muestra una situación donde incluso podemos ver cómo las mujeres no sólo sufren por parte de los patronos, sino también por parte de sus maridos.

La película se centra en dos situaciones:

La primera, es una denuncia clara a la explotación patronal, que reduce al obrero a una situación de semiesclavitud. Nos muestra la crudeza con la que son sometidos los trabajadores y las condiciones en las que vivían. La segunda, es el mensaje de unión y de igualdad dentro de las clases explotadas. Se nos muestra que sólo uniéndonos,

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