ANTECEDENTES HISTÓRICOS DEL IMPUESTO

SECCIÓN PRIMERA

ANTECEDENTES HISTÓRICOS DEL IMPUESTO

En todo trabajo de investigación es importante citar las referencias históricas del fenómeno que se pretende analizar para una mayor comprensión del tema, así pues, en esta sección se expondrán los principales antecedentes del impuesto, a lo que antiguamente se le conocía como “tributo”, los cuales en ocasiones llegaban a ser solo un capricho por parte de los soberanos, como signo de sujeción y dominio.

El fenómeno tributario se ha manifestado a través del tiempo de diversas maneras, como una forma de ejercer el poder sobre los individuos obteniendo parte de su riqueza, de tal manera que los soberanos establecían sobre los pueblos conquistados diversas cargas que debían cubrir.

Se conoce que desde las primeras civilizaciones los hombres se veían obligados a pagar tributos en dos formas, ya sea en especie o prestación de servicios personales, los cuales se imponían de manera injusta y arbitraria e incluso algunos tributos llegaron a ser inhumanos.

1. Los Impuestos en la Antigüedad

Las primeras leyes tributarias existieron en el antiguo Egipto, China y Europa, donde la forma más antigua de tributar era la prestación personal o trabajo físico,  un  ejemplo de ello lo fue el de trabajar para la construcción de colosales pirámides, estatuas, palacios o barcos; esta época se caracterizó por la forma en la que los súbditos hacían la declaración de impuestos, pues estos tenían que arrodillarse y pedir gracia al soberano.

No obstante, entre los príncipes o grandes dignatarios, se pagaba un tributo llamado “parias”, con la finalidad de reconocer el poder o la inferioridad que tenía uno sobre otro.^[1]

Durante la misma época, en el territorio de Perú en el Imperio Inca, todo lo que trabajaba el pueblo era destinado al Rey y este les proporcionaba lo necesario para subsistir, teniendo así una mejor organización y poder sobre su pueblo; el Imperio Inca se caracterizó por el sistema mnemotécnico denominado “quipus” con el cual controlaban el pago de los impuestos, este era elaborado por medio de una cuerda, que de acuerdo a las clases de los tributos estaban coloreados de distinta manera y conforme a su cuantía se anudaban de forma diversa, era tan complicado dicho sistema que con el tiempo desarrollaron la figura de “quipos-camayos”, quienes fueron considerados como los primeros asesores fiscales.^[2]

Más tarde en el antiguo México, en el Imperio Aztecas implemento el pago de tributos en especie, como lo era el de entregar bolas de caucho para el juego sagrado de pelota, águilas, serpientes e incluso cierto número de mujeres y hombres jóvenes conocidos como “mancebos”, a los cuales por razones de tipo religioso se les sacrificaba arrancándoles el corazón.

Con el tiempo, los Aztecas  comenzaron a  entender  la importancia de los tributos y mejoraron su técnica de cobro implementando la figura de los “calpixquis”, que eran las personas que cobraban el pago de los tributos quienes se identificaban con una vara en la mano y un abanico en la otra, estos depositaban lo recaudado en almacenes públicos, llevando un registro de los tributos y riquezas que se resguardaban en los almacenes, a este registro se le conoció bajo el nombre de tequiamal ^[3]; entre sus diversas funciones también vigilaban la distribución de la propiedad comunal y realizaban visitas a los pueblos vencidos para vigilar el cobro de los tributos, si estos eran deshonestos o no cumplían con sus respectivas funciones eran condenados a muerte.^[4]

Los habitantes del Imperio Azteca estaban obligados a contribuir con los impuestos a excepción de los sacerdotes, nobles, niños, huérfanos y esclavos, es importante mencionar que el pago del tributo dependía mucho de la actividad a la que se dedicaba la persona ya sea agricultor, artesano o comerciante.

Para los pueblos que habían sido sometidos por los Aztecas tenían que llegar a un acuerdo y el tributo a imponer era variable según la zona y  la riqueza natural que en él se pudiera explotar, por ejemplo, las aldeas cercanas a las costas tributaban con caracolas, conchas de galápagos, tortugas, solo por mencionar algunas; otros pueblos ricos en suelo tributaban con maíz, frijoles, chía, chile de diferentes especies, piedra, cal, madera, etcétera; y algunas otras regiones de zonas cálidas tributaban con todo tipo de fruta así como con animales exóticos vivos. Para aquellos pueblos cuyas zonas no eran de aprovechamiento, tenían que tributar con la elaboración de armas, como lo fueron los arcos de hueso o flechas y las aldeas que carecían de lo anteriormente dicho ofrecían a mujeres u hombres jóvenes, quienes eran sacrificados a capricho de sus soberanos por razones religiosas, a estos se les conoció bajo el nombre de “mancebos”.^[5]

El Impero Azteca, implemento como sanción el vender como esclavo a todo aquel que no cumpliera con el pago del tributo ya que para los soberanos  no existía razón alguna para dejar de pagar el tributo ya sea con trabajo o en especie.

En definitiva se puede afirmar que en la antigüedad el Sistema Tributario implementado por los soberanos hacia los pueblos vencidos eran solo capricho de los mismos, utilizando a los tributos como signo de sujeción y dominio, donde el pueblo carecía de derecho alguno sobre su patrimonio, a consecuencia de ello se generaron diversas rebeliones y traiciones por parte del pueblo hacia los soberanos ya que los tributos eran implementados de manera excesiva y humillante.

1.2 - Impuestos durante la Edad Media

Posteriormente en Europa durante la Edad Media, y con nuevos intereses sociales y económicos se originaron grandes avances en los sistemas de tributación y podemos decir que durante este periodo el Sistema Fiscal era aún más anárquico, arbitrario e injusto, llegando a ser inhumano.

Durante este periodo los vasallos y siervos tenían dos clases de obligaciones las cuales consistían en las prestaciones de servicios personales y otras más de naturaleza económica que eran pagaderas en dinero o en especie.

...