DICTADURA DE F. FRANCO- PRIMERA ETAPA 1939-1956

DICTADURA DE F. FRANCO- PRIMERA ETAPA 1939-1956

POLÍTICA

ECONOMÍA

SOCIEDAD

1) Fuero del Trabajo (marzo de 1938):  Sentaba las bases de la organización corporativa del Estado y del sindicalismo vertical, consideraba acto subversivo la huelga, garantizaba la inamovilidad laboral al trabajador, la propiedad privada, creaba la magistratura de Trabajo y el sindicato único, vertical y corporativo (empresarios y trabajadores en el mismo sindicato por ramos de producción).

2) Ley Constitutiva de las Cortes (1942): creación de una asamblea unicameral de procuradores, nombrados por el poder o de oficio

DERROTA DEL EJE Y AISLAMIENTO INTERNACIONAL

3) Fuero de los Españoles (1945):  en el terreno legal se promulga esta ley, una declaración de derechos y deberes, que realmente consolidaba la organización autoritaria con derechos muy limitados. Ante la derrota del eje se pretende dar un labado de imágen pasando hacia la "democracia orgánica" con una ideología nacional-católica

4) Ley del Referéndum Nacional (1945):  era junto con la anterior, parte de la operación de maquillaje

5) Ley de Sucesión a la Jefatura del Estado (1947): abordaba la cuestión de la sucesión franquista, declarando el Estado español como católico, social y representativo cuya forma era la Monarquía, si bien la Jefatura del Estado correspondía a Franco de modo vitalicio, reservándose la facultad de nombrar sucesor.

Ante la inviabilidad de la polítia autárquica se busca un reconocimiento internacional presentándose como un muro al camunismo en plena Guerra Fria

España era un fiel aliado de USA y la ONU revocó sus sanciones diplomáticas en 1950 . La aceptación definitiva viene en 1953 cuando se firma el tratado de amistad HispanoNorteamericano (ayuda militar y económica a cambio de bases militares).

La situación económica fue de miseria. La vida de los españoles se caracterizó por el racionamiento, el hambre, el estraperlo y las comidas de Auxilio Social. La vida de los españoles se caracterizó por el racionamiento, el hambre, el estraperlo y las comidas de Auxilio Social. La economía estaba desarticulada tras la guerra: la producción agraria e industrial habían caído, las reservas de oro desaparecidas y la red de transportes deteriorada.

La recuperación económica fue muy lenta y se debió en parte a las destrucciones de la guerra y a la crisis económica ligada a la II Guerra Mundial. La política autárquica, que implicaba intentar producir todo lo necesario sin necesidad de comprar al exterior, lo que causó esta lentitud. La autarquía tenía dos grandes ejes:

1- La reglamentación de las relaciones económicas con el exterior: era necesaria la autorización administrativa para la importación y exportación, un intervencionismo que dificultaba la actividad económica

2- El fomento industrial: orientado hacia las actividades de interés militar para lograr la independencia militar y política del nuevo Estado. Se impulsaron las industrias de bienes de equipo con ayudas públicas (alto gasto público). En 1941 se nacionalizó la red de ferrocarriles (RENFE) y se fundó el instrumento fundamental de esta política, el INI (Instituto Nacional de Industria), un conglomerado de empresas públicas que intentaba producir el máximo sin reparar en costes. Se crearon las principales empresas estatales (IBERIA, ENDESA, SEAT) Supuso una falta de competitividad y desaprovechamiento de la favorable coyuntura tras la II Guerra Mundial

Estos años conocieron el racionamiento y el estraperlo. La fijación de precios por debajo de los resultantes de la oferta y de la demanda condujo al desabastecimiento de alimentos y al racionamiento, establecido en mayo de 1939. Los productores debían vender por obligación la producción a la Administración a un precio tasado, y ésta era la única que vendía los productos a los ciudadanos también a un precio fijo. Ante ello surgió el mercado negro, vendiéndose los productos al doble y triple de lo tasado oficialmente por el gobierno. Esta circunstancia sirvió para amasar importantes fortunas en pocos años, por parte de algunos comerciantes ligados al régimen y de algunos falangistas

En 1953 firma del Concordato con el Vaticano, que confirmaba la amplitud de las prerrogativas obtenidas por la Iglesia desde la guerra (Estado confesional, dominio de la enseñanza, validez del matrimonio eclesiástico, exenciones fiscales)

 Ley de Responsabilidades Políticas (febrero de 1939) y la Ley de Represión del Comunismo y la Masonería (1940).

 De este modo se creó un delirante sistema policial de delaciones, denuncias y venganzas. Junto a los juicios militares que llevaron a la pena de muerte a 40.000 personas, se establecieron los juicios civiles que podían acabar con penas de prisión, incautación de bienes, separación de sus puestos de trabajo o el destierro.

Certificados de buena Conducta