ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Educacion De La Mujer En El Siglo XVIII


Enviado por   •  12 de Diciembre de 2013  •  594 Palabras (3 Páginas)  •  478 Visitas

Página 1 de 3

EDUCACION DE LA MUJER EN EL SIGLO XVIII

A comienzos del siglo XVIII “ser mujer” era ser analfabeta y esclava del padre y del esposo. Las preocupaciones ilustradas por la educación de las mujeres no surgieron de forma espontánea, ya que, de un lado, eran transposición de las inquietudes pedagógicas generales y, de otro, entroncaban con una corriente de pensamiento que partía de los escritos de Vives y Erasmo en el siglo XVI. Durante el siglo XVIII, los efectos de la reforma y la contrarreforma hacen considerar oportuno instruir a las niñas también en leer y en el catecismo, al tiempo que la creación de instituciones religiosas femeninas dedicadas a la enseñanza (ursulinas, beatas, clarisas…) incrementa las oportunidades de hacerlo, sobre todo para las integrantes de las capas sociales superiores. Al mismo tiempo, continúa el debate sobre las capacidades intelectuales de las mujeres y el tipo de educación que les era más adecuada.

Sin embargo, conformes todos en la necesidad de reformar la enseñanza que se impartía a la mujer, las diferencias surgen al abordar los temas de dónde impartirse, por quiénes y cuál debe ser su contenido.

Respecto a los lugares de enseñanza, para la instrucción femenina, la casa cumplía una doble función. De un lado, se aprendían en ella las enseñanzas menos formales, es decir, las labores domésticas y, si era necesario, una profesión. Para las altas clases sociales representaba la oportunidad de proporcionar a las hijas conocimientos más completos contratando buenos profesores. A partir de este momento, se crean las primeras escuelas elementales, las cuales constituían el tipo de instituciones más numerosas y a las que correspondía la mayor parte de la educación femenina. En estas instituciones, generalmente gratuitas, predominaban las hijas de familias humildes, mientras las de artesanos y comerciantes acudían a establecimientos similares de pago. Por otro lado, menos caros que la educación en casa y más selectos que las escuelas elementales, eran los conventos y colegios de monjas, los cuales representaban el modelo de educación femenina separada por antonomasia.

Es importante señalar que la educación femenina duraba menos tiempo que la masculina. Estas limitaciones materiales unidas a los parámetros del discurso ideológico sobre la educación de la mujer daban en realidad pocas posibilidades a que la enseñanza de las jóvenes pudiese incluir un extenso currículum. Respecto a los saberes, el concepto aplicado era el de conseguir un "adecuado adiestramiento" de las alumnas, exaltando su papel social y su influencia moral como principales elementos conformadores de los programas. Se trataba sobre todo de formar buenas esposas, compañeras del hombre, y mejores educadoras de los hijos y la servidumbre. Los conocimientos intelectuales ocupan un segundo plano y estarían en consonancia

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (3.8 Kb)  
Leer 2 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com