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El renacimiento filosófico del siglo XII


Enviado por   •  3 de Julio de 2018  •  Apuntes  •  6.130 Palabras (25 Páginas)  •  148 Visitas

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El Renacimiento filosófico del siglo XII

 

Las escuelas de traductores y métodos de traducción

Hacia el 770 o 780 aparecen las primeras traducciones del sánscrito al árabe, sobre todo obras de astronomía, también del copto al árabe especialmente obras de alquimia, y del griego al árabe fundamentalmente obras de Aristóteles. Estas obras en el siglo II, con motivo de la persecución contra los monofisitas que fundamentaban su pensamiento en Aristóteles, marchan a Siria  y se traducen al siríaco. En el siglo VIII se traducen al árabe, mediante ellas los califas comienzan a interesarse por todas las ciencias. Así tenemos que esas obras se traducen del griego al árabe y posteriormente del árabe pasará al latín, dando lugar a las escuelas de traductores y a la libre interpretación de las mismas, sin olvidar de mencionar, los errores de traducción.

La escuela más importante es la de Toledo, que tuvo su máximo esplendor entre los años 1130 y 1180, y que traduce del árabe, el latín y el hebreo. Parecida, pero inferior es la de Zaragoza, la de Astorga y la de Barcelona con esas mismas tres lenguas. La segunda escuela es la de Sicilia, que utiliza el latín, el árabe y el griego; y la tercera es la escuela de Venecia (en parte la de Pisa) que sólo utiliza el latín y el griego.

¿Cómo traducían? la forma de traducir sobre todo en el siglo X consistía en el “Corpus Dionisiacum”; éste era un equipo de tres personas que trabajaban sobre el mismo texto, uno leía en griego, otro traduce oralmente al latín (pues no sabe escribir) y un tercero escribe el latín. Por este motivo las traducciones fueron complicadas.

En el siglo XIII aparece el método actual por el que una persona que conoce las dos lenguas hace la traducción.

¿Qué obras se traducen? En el siglo XII en primer lugar las obras de Física, Medicina y Matemáticas. Los árabes eran los de mayor cultura científica y aportan sus libros. En Filosofía se traduce la “Lógica Nova”, que comprende los Analíticos Primeros y Segundos (la Filosofía de la Ciencia o el Razonamiento), los Tópicos y la Refutación de los Sofistas, es decir la segunda parte de las obras lógicas de Aristóteles. También traducen comentarios árabes de tipo platónico: Liber de causis, atribuida a Aristóteles (que es de Proclo), las obras de Tenistio (comentarista griego neoplatónico de Aristóteles) y las obras de Alejandro de Afrodisia (otro comentarista griego, neoplatónico, de Aristóteles), todos del siglo IV. De esta manera, el primer acercamiento a la filosofía Aristotélica que van a leer, son estos comentarios, lo que plantea problemas falsos.

 

Los nuevos métodos de interpretación

Otra característica de este siglo, es que surgen nuevos métodos de investigación. La ciencia, sobre todo la Filosofía y la teología, durante el siglo XI y a comienzos del siglo XII es fundamentalmente una ciencia de libros, se reflexiona sobre obras clásicas, o mejor dicho, los comentarios de dichas obras: Aristóteles, la Sagrada Escritura, los Santos Padres. Por esto la fuente de la Filosofía en el siglo XII no es la realidad sino los libros. Es una vivencia de lectura.

Esta ciencia de lectura o comprensión depende del método de leer o comentar. Hasta el siglo XI, la ciencia básica para realizar el comentario es la Gramática (entendida como Literatura o Retórica), buscan por ello las formas literarias. El modelo para ellos, los maestros, son los grandes gramáticos latinos (Donato, Prisciano, Cicerón...), y todo el problema entonces es cómo explicar la Biblia a través de las leyes retóricas, el método empleado es la Dialéctica (Lógica). Se busca el razonamiento, examinando sobre todo el contexto, la relación del sujeto y el predicado. Ya en el siglo XIII el fundamento va a ser la Metafísica, la Ontología. Así pues hay una evolución desde la Literatura hasta la Metafísica.

 

Las nuevas escuelas

Surgen a la vez nuevas escuelas. A propósito de ellas, en el siglo XI hay fundamentalmente dos tipos de escuelas. La primera es la escuela monástica. Responde a características propias de la época feudal, y la enseñanza giraba en torno a tres elementos: la biblioteca, el scriptorium y la escuela. Se vive en un ambiente de oración y soledad, por ejemplo se puede ver en los títulos de obras de San Anselmo (Monoloquium, Soliloquium). Ordinariamente rechazan lo que tiene relación directa con la oración, rechazan la Gramática y la Lógica; el estudio en sí está prohibido, porque la enseñanza es una tentación humana, no era una misión propia de un monje. “El monje está hecho para mortificarse, no para enseñar” había dicho San Jerónimo. Esta escuela se opone por tanto al claustro, es una schola Christi, y el método es la lectio divina.

Hay un segundo tipo de escuelas, que son las de los capítulos seculares, en ellas hay una preocupación por el estudio y la educación escolar, se abren en las ciudades, en las catedrales o en las colegiatas. Mantienen, estas escuelas, a sus alumnos hasta los 15 años, luego estos tienen que trasladarse donde haya escuelas superiores. La enseñanza era estrictamente profesional. Estaba basada en la discusión. Para hacer estudios superiores se requería mucha valentía, audacia, porque había que tener dinero y abandonar casi siempre la propia patria. Estaban organizadas  y dirigidas por un clérigo (alguien sometido al obispo), que se llama escolástico o magister scolarum El escolástico se hacía ayudar por profesores ayudantes o agregados.

Esto planteaba un problema, la llamada licentia docendi o permiso para enseñar. Toda esta enseñanza estaba ordenada a la Teología, y el responsable es el obispo, que es el que otorga la licencia para enseñar. ¿Cómo la otorga? ¿Cuáles son los métodos de acceso al profesorado? Por derecho nadie podía impartir la enseñanza sino que era una delegación del obispo: el escolástico tiene la licencia, el obispo delega ordinariamente en él al otorgar esa licencia. Así que el monopolio de la enseñanza, la tiene el escolástico en la diócesis, nadie podía abrir escuelas sin el permiso del escolástico. Esta licencia no significaba tener la capacidad para enseñar sino la autorización para ello, en el siglo XII.

En el siglo XIII habrá una revolución de los profesores contra los obispos, porque dicen que la que debe dar esa autorización es la Universidad. (El término licenciado viene de ahí.)

Lo importante de esto es que cada escolástico enseñaba en principio todo. Era un único profesor responsable. Cada profesor solía ser especialista en un tema. Los alumnos iban a una escuela para estudiar con tal profesor, pasaban luego a otra para formarse con otro, y así recorrían escuelas. Son los alumnos los que buscaban al maestro. Había pues una gran movilidad.

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