HISTORIA DE LA ARGENTINA 1806-1852

MARCELA TERNAVASIO

HISTORIA DE LA ARGENTINA  1806-1852

(Jakubowicz   geografía 2º año)

RESUMEN:

Este libro relata la vertiginosa historia abierta por la Revolución de Mayo de 1810 hasta la caída de Juan Manuel de Rosas en 1852. Recorre así los conflictos, las ideas y las decisiones de los hombres –desde los primeros patriotas, pasando por los generales de la guerra de la independencia, hasta los caudillos como Quiroga, López o Urquiza, quienes se enfrentaron a la construcción de un nuevo orden.

Con la revolución de 1810, cuando la unidad virreinal comenzó a fragmentarse, se abrieron de pronto múltiples alternativas para la organización política. Los diversos proyectos que surgieron dieron origen a disputas y profundas controversias entre aquellos que los imaginaron y se comprometieron con su causa.

Las tensiones entre el ideal de una organización federal y la vocación hegemónica de Buenos Aires signaron de manera dramática los intentos de configurar un sistema que ya no habría de fundarse en el derecho divino de los reyes sino en el principio de la soberanía popular.

CAP. I - SER PARTE DE UN GRAN IMPERIO:

1756-1763: Guerra de los 7 años (Europa-conflicto sobre todo entre Francia y Gran Bretaña por coaliciones establecidas con otras potencias. Motivo: ocupación de Silesia por Prusia. España se une al conflicto en 1762, junto a la facción perdedora. Gob. Ceballos llega a ocupar la colonia de Sacramento, con auxilio de indígenas de las misiones jesuitas. Rechazo de una flota anglo-portuguesa: Banda Oriental para Portugal, costa occidental, incluida Bs. As., para Gran Bretaña). Determinó la necesidad de fortalecer las defensas militares y garantizar la explotación económica eficaz.

Reformas Borbónicas: la dinastía de los borbones desde comienzos del siglo XVIII era la gigantesca ampliación  de los dominios del rey de España, que jurídicamente pasaron a depender de la colonia de castilla. Este proyecto dinástico de unión entre los reinos de Aragón y Castilla dio lugar  a la consolidación de ampliar sus territorios durante los siglos XVI y XVII.

A mediados del siglo XVIII la corona se propuso transformar la naturaleza del orden hispánico, debía transformarse en un imperio comercial siguiendo el modelo de gran Bretaña. Dicho viraje se volvió más palpable luego de la guerra de los siete años, una guerra internacional que se libró entre 1756 y 1763 en Europa, América y Asia, y que cambio el equilibrio de poder del nuevo mundo.

El nuevo diseño político territorial de todo el imperio se destacó como una de las transformaciones más ambiciosas de la primera dinastía, así fue como al calor de este clima reformista la religión rioplatense se convirtió en un punto estratégico durante los siglos XVI y XVII. Al no poseer riquezas en metales, que si presentaron en abundancia otras regiones, el rio de la plata era una zona marginal dentro del imperio.

Portugal al asecho del atlántico sur por su expansionismo puso los ojos en esa zona por ser un punto estratégico para el comercio marítimo. Ello condujo a la metrópoli a reorientar su atención a esa región y crear el Virreinato.

División en 4 virreinatos y 5 capitanías generales. Resistencia por:

-Quita de autonomía política

-Disminución del “status” de algunas ciudades, que pasaron a ser subordinadas

-Nuevos impuestos (causa de la rebelión de Túpac Amaru 1780)

Con el fuerte contenido militarista de la reformas, España intento fortalecer su presencia en América a través de plazas militares estratégicamente ubicadas.

¿Qué implicó el nuevo diseño territorial?  Con las reformas se buscaba centralizar el poder de la corona, reforzar la figura del monarca y asegurar un mayor control de las posiciones ultramarinas. Para eso se trasladaron funcionarios directamente desde España con el objeto de limitar el enorme influjo de las principales ciudades que habían adquirido las familias locales criollas más poderosas. Por otra parte se buscó reglamentar el libre comercio de 1778 que también busco reforzar este proceso de centralización. Esto no significo que se podía abrir el puerto para comerciar con otras potencias, por el sistema de monopolio impuesto por España. Solo se habilito el comercio en la colonia, imposibilitando así  el tráfico de metales y afianzando el monopolio de dicha potencia en el atlántico.

Los límites del ajuste imperial: algunas ciudades no estaban contentas con el diseño territorial borbónico, los pueblos indígenas se resistieron, el nuevo trato que los habitantes americanos recibieron por parte de la corona fue percibido por muchos como humillante, lo cual concluyo en resistencias violentas, como ocurrió en 1780 con la rebelión de Tupac Amaru en Perú, la cual fue duramente reprimida por las autoridades coloniales.  

Las revueltas vinieron a favorecer las zonas marginales, como el caso del Rio de la Plata. Buenos aires se convirtió en un puerto legalizado donde se instaló la Real Aduana.

En  la rica región del Alto Perú estaban ubicadas las minas del Potosí. Su producción fue destinada en gran parte al sostenimiento de las nuevas autoridades virreinales.

Los grupos mercantiles más poderosos vieron crecer sus riquezas hasta la cumbre de la escala social.

La situación en el mundo se vuelve cada vez más complicada, se trastocaron el mundo europeo con el americano, la independencia de 1776 y la Revolución Francesa de 1789. Lo más significativo fue la guerra entre las colonias inglesas y Gran Bretaña al declarar las primeras en independencia, teniendo como aliados a Francia y España en contra de Inglaterra con los EE.UU. entre 1796 y 1802. Las guerras se generalizaron por toda Europa y se hizo sentir en sus dominios americanos.

La flota inglesa bloqueo el puerto de Cádiz y otros puertos hispanoamericanos afectando el influjo comercial entre la metrópolis española y sus posesiones americanas. Ello favoreció a los criollos ya que el gobierno español tuvo que ceder el monopolio y otorgar concesiones comerciales por el bloqueo. Mediante los comerciantes criollos podían ahora traficar esclavos, vender cueros, cebo, exportar mercancías locales e importar café arroz o tabaco.

En 1805 España perdió casi toda su flota al ser vencida por Gran Bretaña en la Batalla de Trafalgar (este más tarde le otorgaría la hegemonía marítima).

En ese contexto las reformas Borbónicas de centralizar el poder en las colonias quedan en declive, ya que el rotundo fracaso del monarca por controlar el comercio entraba en peligro por intereses internos como externos.

Las invasiones inglesas. La aventura de Popham y Beresford

Desde fines del siglo XVIII, Gran Bretaña exhibía cada vez más interés en las colonias hispanoamericanas. Habían elaborado varios planes secretos para invadir las colonias en América ya que era un lugar estratégico que unía el atlántico con el pacifico para las rutas comerciales y contaba con una gran vulnerabilidad militar dentro del virreinato.

El comandante Popham  llevo desde Cabo de Buena Esperanza hasta el puerto de Buenos Aires en 1806, en primer lugar sin autorización británica y luego con su consentimiento.

A fines del siglo XVIII Inglaterra estaba en pleno desarrollo de la Revolución Industrial y expansión comercial de sus productos. En ese marco Napoleón avanzaba por Europa amenazando con destruir todo.

En 1806 y 1807 fue la primera conquista inglesa, quedaron sorprendidos al ser tan bien recibidos por las autoridades y corporaciones de la ciudad. Las tropas del monarca estaban destinadas a las fronteras indígenas y el virrey Sobremonte se retiraba a Córdoba y traslado la capital virreinal y lanzo una proclama donde desacreditaba la ocupación tratándola de inconstitucional.

El 25 de junio las autoridades juran lealtad y fidelidad a la nueva soberanía británica tanto como a las autoridades eclesiásticas y civiles. Desde Córdoba el virrey lanza una proclama donde decía que era ilegal la toma y que a los ciudadanos no les quedo de otra que aceptar las condiciones por verse con la invasión encima sin poder reaccionar, y proclama que la nueva capital del virreinato será en Córdoba hasta que Buenos Aires sea liberada.

El nuevo gobernador Beresford garantizaba todos los derechos privilegios, protección religiosa, etc., aunque también pidió refuerzos que tardaban en llegar y al ver esto los pobladores comenzaron a armar milicias voluntaria en secreto a manos del capitán de navío Santiago de Liniers, de origen francés, al servicio de la corona española, junto a Juan Martin de Pueyrredón y Martin de Alzaga.

Esto ocurrió porque los ingleses lanzaron u n decreto en secreto de libertad de comercio, lo cual interfería con las negociaciones de los comerciantes locales.

Pueyrredón y Liniers pidieron refuerzos al gobernador de Montevideo y este accedió. Pueyrredón sufre una derrota y Liniers cruza el Rio de La Plata dominando los principales  lugares estratégicos de la ciudad y en la plaza mayor se da una Batalla encarnizada donde terminan con la rendición inglesa cuando Beresford levanta una bandera blanca.

En consecuencia quedo al desnudo la incapacidad militar por parte de la corona Española, el dudoso comportamiento del virrey Sobremonte, como los pobladores accedieron a las clausulas en un principio.

Los refuerzos pedidos por Beresford llegaron en 1806 a Montevideo todavía sin saber que la primera expedición había fallado. Al mando del capitán  Whitelocke toman Montevideo y en 1807 se lanzan a re conquistar Buenos Aires. Los británicos desembarcaron en el puerto de ensenada y se pusieron a marchar por las angostas calles de buenos aires. Las tropas porteñas aunque precarias no les falto valentía y los batallones peninsulares al mando de liniers libraron una cruenta batalla también se sumó Martin de alzaga el alcalde del cabildo que organizo las defensa de la ciudad levantando barricadas y obligando a las tropas a marchar por las angostas  calles donde desde las casas le tiraban de todo. Fue muy dura la batalla hubo muchas bajas de ambos lados. Pero al final  los ingleses fueron vencidos el capitán witerlocke debió aceptar la derrota y capitular el 6 de julio de 1807, luego al llegar a Inglaterra fue enjuiciado por una corte marcial por traición y fue bajado de rango.

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