Historia Universal

HISTORIA UNIVERSAL

EL TRÁNSITO HACIA LA MODERNIDAD

España y Portugal eran potencias de segundo orden, atrasadas económicamente y con una estructura señorial. La consolidación del poder supremo fue tomando forma de una monarquía absoluta permitiendo así llevar adelante la expansión colonial. En un primer momento parecía una aventura comercial y con el tiempo se fue convirtiendo en uno de los episodios fundacionales del mundo moderno.

El papel desempeñado por las comunidades italianas durante la Baja Edad Media es importante para comprender la expansión atlántica y la aparición del capitalismo mercantil. Venecianos y genoveses , a través del comercio en el mediterráneo Oriental, se convirtieron en agentes monopolistas de Europa. Venecia se afirmó en Constantinopla e instaló colonias en el Mar Negro. Génova desarrolló una economía mercantil basada en el metálico. Su objetivo era el oro que llegaba a Europa; también la falsa pimienta del Sudán, que se usaba como medio de pago en la costa norte de Africa durante los últimos siglos del Medioevo.

Portugal fue pionero en la expansión atlántica mediante la exploración y ocupación de la costa africana. El tráfico de sal, vinos, pescado y azúcar, sentó las bases de una economía moderna y expansiva controlada por el sector mercantil que hizo posible que se fortaleciera la monarquía. La crisis del siglo XIV impulsó la expansión territorial.

Enrique el Navegante necesitaba incorporar tierras debido a cuestiones económicas, sociales y políticas atrás quedó el llamado divino.

Los progresos económicos fueron acompañados por un interés científico. Se fundó en Sagres una escuela de navegación. En 1448 se construyó un fuerte que proveía de esclavos negros y oro en polvo. Al poco tiempo llegaron a Senegal, Cantor (cambiaban sal por oro); Sierra Leona (hierro, cola y marfil).

Los éxitos en la costa africana alentaron a Portugal a extender sus dominios a costas de Castilla. Isabel y Juana la Beltraneja, peleaban por la sucesión al trono. El tratado de Alcaçobas-Toledo resolvió el problema sucesorio a favor de Isabel la Católica. Portugal obtenía así el monopolio del comercio, colonización y exploración de la costa occidental de Africa y la posesión de las islas que se conocían hasta el momento, excepto Canarias (España). Con la seguridad que otorgaba el tratado, el rey Juan II mandó construir un fuerte en Benin, Elmina, que se convertiría en capital comercial donde se negociaba oro, esclavos, marfil y pimienta.

Portugal tenía el monopolio del camino de la especiería y poseía el oro africano que aseguraba los recursos para poder ingresar en el mercado oriental, en 1497 Vasco da Gama comenzó el viaje que dos años después terminaría en la India. En 1500 con la llegada a las costas brasileñas termina de consolidarse el extenso y efímero imperio portugués.

A mediados del siglo XV la expansión de Portugal no pasaba desapercibida en el resto de los reinos ibéricos.

El tratado que ponía fin a la guerra con Portugal (Alcaçobas-Toledo), era un paso trascendente. Allí, la expansión colonial ya había adquirido un matiz mercantil y las concesiones económicas sólo exigían una participación para el Estado, quien se reservaba la soberanía del territorio; el conquistador, señorío y los resultados inmediatos de la empresa era reservado para todos los que integraban la expedición.

Las capitulaciones fueron contratos que formalizaron la relación entre la corona y el particular que ofrecía sus servicios. La monarquía de los reyes católicos concebía como fuente de poder absoluto querían recrear en América las formas feudales combatidas en Europa. Después de la firma de las capitulaciones de Santa Fe, Colón zarpó en agosto de 14920 y arribó en octubre de ese mismo año a la Isla Watlings creyendo que había arribado a América.

Colón realizaría 3 viajes, hacia 1509 se sabía con seguridad que no era Cipango, sino un nuevo continente. El sueño de Colón empezó a hacerse realidad cuando en 1520 Magallanes encontró el estrecho que llevaría su nombre.

La idea que tenía el hombre acerca del planeta donde habitaba, era cada vez más aproximada a la realidad.

EL IMPERIO CATÓLICO Y LOS PROBLEMAS

La propiedad de las colonias se limitaba a las Antillas, Panamá, Florida y la costa norte de Sudamérica. Durante la primera mitad del siglo España lograría afirmar su autoridad sobre una masa continental que se extendía desde California hasta los confines de Sudamérica, excepto Brasil.

En Cuba, Cortés, inició la campaña que acabaría con la conquista del imperio azteca. De allí, en aproximadamente una década, los españoles ocuparían el resto de México y América Central, lo que les permitió lanzarse sobre Sudamérica.

En 1530 Pizarro se dirigió hacia el corazón del Imperio Inca, descubriendo múltiples riquezas. Si bien la conquista seguía adelante, no era el mismo el ímpetu al inicial.

La conquista en territorios con alta densidad de población dominada por una estructura política centralizada se volvía más compleja cuando esos pueblos estaban organizados como tribus. Las guerras y las enfermedades hacían estragos en la población indígena además de la actitud de depredadores de los españoles. La empresa descansaba sobre relaciones personalistas y bastante independientes de la corona debido a la distancia. Desde un principio los conquistadores habían convivido con la estructura de un estado en formación (casa de contratación y consejo de indias), pero ésta los acorraló de a poco y los desplazó definitivamente. Sus problemas internos

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