Instruir Puede Hacerlo Cualquiera… Pero Educar sólo Lo Hace Un Excelente Maestro

Una sociedad se define no sólo por su actitud ante el futuro sino frente a lo pasado. Los mexicanos estamos preocupados, o mejor dicho, obsesionados por nuestro pasado, pero no tenemos ni la más remota idea de lo que hemos sido, lo más grave y alarmante: no queremos tenerla.

Actualmente existe un México, en el cual su gente vive entre el mito y la duda, ello se ve en cosas pequeñas, como que en la Escuela aprendimos que Cristóbal Colón descubrió América, cuando en realidad a él sólo se le dio el crédito, porque quien enserio fue el verdadero descubridor de ésta fue Américo Vespucio, de ahí que se derive el nombre como tal: América; pero también se ve en cosas grandes, como el sentir que si la selección mexicana de futbol gana, en tiempo de mundial, también ganamos nosotros.

Al respecto Octavio Paz sostiene que: “sobre los restos de la Nueva España se levantó un México reducido y pobre: el México republicano de Juárez y sus sucesores.

Lo básicamente relevante, es que México no se parece en nada a España, aunque haya sido un territorio sometido a la corona española, entonces de qué sirvieron las misiones en materia educativa, sino fue para solamente, adentrar a los aborígenes hacia la religión católica, y sin duda, hacerlos esclavos.

La cruz, al corona, y la espada, hace reminiscencia a la conquista en 1521, por otro lado la internet, una computadora, el avión lo hacen a la era actual. Desde mi perspectiva, hoy en día se vive en un tiempo sin tiempo, en vida dentro de más vidas, estamos en el siglo XXI, a la vanguardia de la tecnología, hemos avanzado practicante en todo, menos en Educación.

Yo me pregunto ¿para que maldito copiar modelos educativos de fuera, en pro “según” de implementar un buen cambio en la Nación?, cuando se puede pensar, repensar, y entonces reelaborar lo que hasta ahora, no ha dado resultados óptimos educativos. No se trata de derogar y agregar artículos a la madre constitución, se trata de, en medida de lo posible, abrogar incluso La Constitución, es decir, de brindar un cambio radical a la sociedad mexicana, que bien merecido lo tiene.

Nos regimos por una Constitución, desde 1917 la cual está viejísima, para ser exactos ¡97 eternos años! Con las misma leyes, cuando debe de estar entendido que la sociedad no es estática, sino que cambia contantemente, junto con su cultura, sus necesidades, en fin, cambia, se mueve y evoluciona a cada instante, por lo tanto esto implica proponer un cambio de verdad efectivo, y que este bien estructurado.

Lo anterior, representa la necesidad de un cambio a la de ya, y desde la raíz; no maquillar el trabajos de nuestros gobernadores, por lo contrario, se debe actualizarse y ajustarse a las nuevas circunstancias, no preferir apropiarse de filosofías ajenas, de Francia por ejemplo, cuando en 1881-1882, donde México siguió el ejemplo Francés al tomar la gratuidad absoluta.

Pero en vista del éxito no obtenido hasta nuestro días, por parte de nadie; es tarea del maestro instruir y no educar, aun cuando no lo marque como tal el Plan y Programa de Estudios vigente, así como también evitar que se siga torcido y ahogado en la ignorancia, a pesar de que al maestro se le cuestione

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