Leyenda De Roma

LEYENDA DE LA FUNDACIÓN DE ROMA

M.R.D.

El imperio romano celebraba el día de la fundación de su capital el 21 de abril. Según la tradición oficial, Roma debió ser fundada en el año 753 a. de J. C. por los hermanos Rómulo y Remo. Ambos gemelos eran descendientes del príncipe troyano Eneas, que, con unos cuantos amigos fieles, escapó de la destrucción de Troya por los griegos, y después de errar mucho desembarcó en Italia. Se casó con la hija del rey Latino, Lavinia, y, en honor de su esposa, fundó la ciudad de Lavinio. Treinta años más tarde, el hijo de Eneas, Julio Arcanio, quiso dar vida a la ciudad de Alba Longa como heredera de Lavinio. Una larga serie de reyes de la casa de Eneas se sucedió en alba Longa hasta que el gobierno pasó a manos del rey Numitor. Este fue arrojado del trono por su joven hermano Amulio. Amulio mató al hijo de su hermano para que no le arrebatase el trono y obligó a la hija, Rea Silvia a hacerse vestal. Pero el dios de la guerra, Marte, se casa con Rea Silvia,, y ésta le da los dos gemelos Romulo y Remo. Rea Silvia es castigada con la muerte por haber violado el voto de castidad y sus hijos son arrojados a los pantanos del Tíber. Una loba escucha el llanto de los pequeños, los encuentra y los amamanta. Los pastores de Numitor descubren un día a los hijos humanos de la loba, y uno de ellos los toma a su cuidado. Ya adultos, es tan grande su parecido con el abuelo, que Numitor los reconoce como nietos. Para vengarlo, reúnen a los pastores del contorno, asaltan Alba Longa, destronan a Amulio y reponen a su abuelo como rey. En agradecimiento por ello, Numitor les entrega en propiedad perpetua el terreno donde fueron encontrados. Deciden fundar una ciudad. En la disputa sobre el nombre que había que ponerle, Rómulo mata a su hermano Remo y se convierte en el primer rey de la comunidad recién nacida.

Entre la historia y la leyenda

La historia de los orígenes de Roma se pierde entre las brumas de la leyenda. Sus humildes comienzos no debieron distinguirse mucho de los de tantas ciudades de la región del Lacio. Pero con el tiempo, los antiguos historiadores romanos pensaron que la ciudad escogida por los dioses para convertirse en dueña del mundo debía tener un origen heroico, que adornaron con infinidad de leyendas, muchas veces contradictorias entre sí, llenas de dioses y héroes mitológicos.

De hecho, para los modernos investigadores resulta difícil distinguir leyenda y realidad, porque a veces, inesperados descubrimientos arqueológicos sacan a la luz las huellas de personajes y sucesos que parecían meras invenciones legendarias.

Rómulo y Remo

Roma fue fundada, según la tradición, por dos hermanos gemelos, Rómulo y Remo, que, acompañados de bandidos y vagabundos expulsados de sus propias ciudades, decidieron fundar un nuevo asentamiento junto al Tíber. Sin embargo, los dos hermanos no se ponían de acuerdo acerca del lugar en que levantarían su ciudad. Remo prefería el promontorio del Aventino, mientras que Rómulo se inclinaba por la colina del Palatino. Así las cosas, decidieron dejar su disputa al arbitrio de los dioses y -apostados cada uno en su colina-, se quedaron esperando una señal de lo alto.

La mañana del 21 de abril del año 753 a.C., Remo contemplaba el limpio cielo primaveral desde la cima del Aventino cuando divisó seis enormes buitres sobre su colina. Lleno de euforia, echó a correr hacia

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