Medico De Sefarad

ANALISIS HISTORICO

Hablar de la temporalidad de una obra, un autor o una historia resulta sumamente difícil como un quehacer cotidiano, sobre todo cuando por encima de la temporalidad de este, está el fondo y el mensaje que trasciendo más allá de cualquier barrera temporal.

Las circunstancias en las que esta escrito “El Médico de Sefarad”, son por una parte enigmáticas y hasta cierto punto deducibles, hablemos en primera línea del año en el que el autor español dio a conocer el libro, situémonos en el dos mil cuatro, año de incertidumbre en europa, debida a los ataques terroristas del jueves 11 de Marzo que fueron una serie de ataques terroristas en cuatro trenes de la red de Cercanías de Madrid llevados a cabo por terroristas yihadistas y que vendría a coincidir precisamente con el octavo centenario de la muerte de maimónides y la proclamación del año Maimónides para el parlamento Israelí. Por otra parte en este año se conmemorarían los XXVIII Juegos Olímpicos de verano celebrados precisamente donde fuera su cuna; Atenas. Y donde Maimonides toma inspiración del gran filosofo Aristoteles; todos estos hechos vienen a coincidir con la publicación de este libro.

En un año en el que se vive con temor en la península ibérica, donde no cesan los ataques terroristas ni las ideas de represión en oriente medio que repercuten en todo el globo son uno de los marcos temporales que enmarcan la obra de Vidal.

Esa es una forma de retratar el mensaje que sitúa en la historia de Maimónides y en lo que se convertirá en una incansable cadena de sucesos donde buscara una identidad espiritual cuestionándose la existencia del ser supremo pero no en cuanto a la deidad sino a las gracias que el ha prometido a su pueblo y no aprende a reconocerlas; que indudablemente hasta nuestros días esta búsqueda sigue por gran parte de la literatura iberoamericana y me temo que en la humanidad.

Por otra parte esta hablar de la temporalidad en la historia cosa no más sencilla que la anterior, es una cosa sencilla y complicada a la vez, no es solo por una cuestión paradójica, va más allá, desde mi muy particular punto de vista ya que como es una novela histórica los tiempos que se han establecido pudieran estar alterados por las transcripciones de los mismos expertos; pero mi deber aquí es situarle en algún contexto temporal, pongamos que hablamos del siglo Xll, un siglo en el que las guerras por territorio y el alabamiento y temor al ser supremo rigen los destinos de los pueblos – no porque hoy no se siga practicando- sino porque hoy quizá sea mas complicado encontrar pueblos marcados y llevados especialmente por la fe en cualquier parte del mundo sin olvidar el medio oriente. Si hablamos del siglo Xll hablamos de 1100, un siglo en el que la religión y las leyes de esta tienen un gran impacto en todos los habitantes, un siglo en el que empieza a florecer el arte en muchas partes de Europa, no se quedan atrás las conquistas y las guerras entre pueblos musulmanes, egipcios, etcétera. Siglo también donde se han cimentado los preceptos de la religión judía.

Ya que la historia se sitúa en diversos lugares desde Córdoba España, pasando por Palestina y llegando a Egipto lugares enigmáticos y llenos de magia no se puede concluir una relación espacio-tiempo especifica.

En tiempos como el nuestro no se podría practicar la medicina como en el pasado debido a toda la gama de posibilidades tecnológicas y descubrimientos que se han logrado pero si podríamos poner en juego el humanismo y la lealtad que este reconocido Médico pone en practica siempre.

ESTRUCTURA

La obra literaria en si es una novela histórica cuya forma principal es la narración en primera persona que intercala diálogos entre los personajes que protagonizan el relato, también se intercalan interesantes reflexiones perfectamente aplicables a nuestra época; aunque pueden resultar pretenciosas para quien no este acostumbrado a complicarse la cabeza con cosas como la existencia de un ser superior y otras minucias por el estilo, mucha de la riqueza de la obra está dada principalmente en este apartado al cual debemos ponerle especial énfasis, la narrativa de Vidal no es del todo extraordinaria, pero si tiene un atributo que muy pocas poseen que es la fluidez y el ritmo, cosa primigenia en una novela de estas características, Vidal tiene la avidez gramática y lingüística para situarnos en los momentos clave en el lugar y con las palabras precisas para colocarnos en el horno de sus ideas y poder comprender sin una rebuscada intención intelectual lo que piensa y sugiere de la vida del protagonista; aquí quisiera detenerme para enaltecer la gran labor de investigación y documentación que realiza el autor sobre Maimónides –personaje principal del relato- ya que se ve plasmada en la obra en una ingente cantidad de detalles que llegan a dar una clara idea y ambientación del momento histórico que nos quiere regalar.

Maimónides, Daniel y el Rabí Padre de ambos me parecen personajes cruciales en la obra ya que la historia envuelve e interrelaciona los sucesos entorno a estos tres, personalidades diferentes, encontradas son las que provocan al lector la intriga de seguir adelante en la lectura. La importancia que representa para mi conocer este personaje esta dada en el ser Médico y en la relación y disciplina que enseña y que deja una huella imborrable sobre la practica medica no solo desde la concepción biológica sino también en el ámbito espiritual y psicológico.

SINOPSIS

“El médico de Sefarad” Trata sobre la vida de Maimónides, un conocido médico judío del siglo XII que nació en Al-Ándalus. Hijo de un respetado rabino, compagina

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