Sociología de la cultura

: Sociología de la cultura

Conceptos y problemas

(Mario Margulis. Editorial Biblos. Bs. As. 1ª edición- 2009)

La noción de cultura: introducción

El concepto “cultura” tiene un grado de abstracción y por la diversidad, una complejidad de los temas que abaca y un carácter histórico.

Es frecuente usar “cultura en el sentido de erudición y de refinamiento, que tiene alguna relación con su etimología que remite a la acción de cultivar.

[…] los pensadores de las Luces conciben a la cultura como una característica humana. Cultura como suma de saberes acumulados y transmitidos por la humanidad, considerada una totalidad, en el curso de la historia” (Cuche, 1999:12-13)

La idea de naturaleza humana se refiere a un hipotético hombre natural, a un hombre genérico que poseería características compartidas por todos los seres humanos; las variaciones observadas serían meras apariencias, modalidades de la actuación de un ser humano genérico, postulado como unánime y universal.

En el contexto colonizador y eurocéntrista comenzó a desarrollarse la antropología

Que se fue construyendo como una disciplina que reflexionaba sobre las costumbres y las formas de vida extrañas que se presentaban en las distantes regiones exploradas y colonizadas por los europeos, lo que era lo otro, una ciencia de lo exótico, desarrollada por los países más ricos que estudiaban a otros pueblos extraños y pobres que fueron objeto de conquista y explotación. Se va abriendo camino hacia el conocimiento y al ir madurando como disciplina comienza a ir avanzando gradualmente hacia la comprensión cultura para ir expresando esas características tan disímiles que presentan los pueblos con los que se entra en contacto: “el estilo de vida de un pueblo”.

La palabra kultur, que quería expresar el sentido profundo del espíritu alemán, su identidad, se opuso en un principio a “civilización”, concepto referido, a las maneras y las modalidades que caracterizaban a la corte francesa y que llevaba implícita una idea de progreso.

Herder pretendía expresar las peculiaridades y la idiosincrasia de cada pueblo en oposición a la idea de universalismo de los franceses, propia del espíritu de las Luces. Sostenía que cada pueblo tenía derecho a su diversidad, a su orgullo, a su espíritu particular. Fue un precursor del relativismo cultural.

La definición más aceptada por la antropología del siglo XIX es la de Tylor en su obra primitive culture, “cultura o civilización, tomadas en su sentido etnológico más extenso, es todo complejo que comprende las creencias, el arte, la moral, el derecho, las costumbres y las otras capacidades o hábitos adquiridos por el hombre en tanto miembro de la sociedad”.

Diversos procesos y acontecimientos en la sociedad occidental convergieron para que la noción de cultura se orientara hacia definiciones menos abarcativas: cambios tecnológicos en la primera mitad del siglo XX, el desarrollo de los medios masivos de comunicación, las dos guerras mundiales y la urbanización. Además influyó su utilización creciente en otras disciplinas y los importantes cruces interdisciplinarios e influencias recíprocas: por una parte, los estudios sobre el lenguaje durante el siglo XX, tanto el desarrollo de la lingüística (y su relación con la antropología a partir de la obra de Claude Lévi-Strauss) y de la semiótica como la dedicación de la filosofía a esta temática. (Lenguaje: se ha determinado así a la tendencia presente en la filosofía del siglo XX).

El concepto “cultura” fue modificando su alcance: pasó gradualmente de designar a la totalidad de una sociedad, lejana y exótica, a referirse a un nivel acotado en el análisis de las sociedades complejas, pasadas o presentes.

Signos, lengua y cultura

Los antropólogos comenzaron tempranamente a tomar conciencia de que el contacto con los europeos

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