APORTES DE ADAM SMITH, ROBERT OWEN, CHARLES BABBAGE A LA TEORÍA DEL COMPORTAMIENTO ORGANIZACIONAL

APORTES DE ADAM SMITH, ROBERT OWEN, CHARLES BABBAGE A LA TEORÍA DEL COMPORTAMIENTO ORGANIZACIONAL

Por Sebastián Caballero

Para Robbins (2004), el comportamiento organizacional es un campo de estudio que investiga el efecto que tienen los individuos, los grupos y la estructura sobre el comportamiento dentro de las organizaciones, con el propósito de aplicar dicho conocimiento para mejorar la efectividad de las organizaciones. Aunque la administración, en distintas formas y niveles, ha estado presente en todas las épocas de la humanidad, fue hasta el siglo XX donde se dio el desarrollo teórico más fuerte en el campo del comportamiento organizacional. Sin embargo, fue desde el siglo XVIII que se comenzaron a dar los primeros intentos de reflexiones en el campo. Es fundamental entender y conocer estos primeros acercamientos, porque son las bases teóricas sobre las que se fundamentan todos los desarrollos posteriores y aún, las teorías más modernas llegaron a ser lo que son gracias ellos. En ese sentido, la administración moderna debe su existencia y nivel de desarrollo a que en el siglo XVIII se dieron las primeras reflexiones que buscaban mejorar la efectividad de las organizaciones de ese entontes.

Uno de los primeros en proponer un estudio sistemático y sobre cuyos aportes se pararon teóricos posteriores fue el filosofo y economista escoses Adam Smith. Aunque en su época la economía, como disciplina, no se había desarrollado, se le considera el padre de la economía moderna ya que en sus estudios y escritos sentó las bases del capitalismo, tal como lo conocemos hoy en día. Smith, en su obra publicada en 1776 “An Inquiry into the Nature and Causes of the Wealth of Nations" realizó el primer estudio formal sobre economía y, como menciona Alan B. Krueger, no existe libro que haya tenido mayor influencia en la política y el pensamiento económicos, y por tanto en el bienestar de la población mundial, que éste. Sin embargo no solo para el campo de la economía fueron fundamentales los aportes de Smith, su obra fue uno de los primeros acercamientos teóricos a la administración.

En su libro, Smith introduce por primera vez en la historia el concepto de la división del trabajo, aunque hoy en día podría parecer una idea apenas obvia, en 1776 resultó ser una idea revolucionaria, debido a que sirvió para mejorar la efectividad de las organizaciones de su época, y en el mismo sentido, comenzó a sentar las bases del estudio del comportamiento organizacional. La división del trabajo, en cuanto puede ser aplicada, ocasiona en todo arte un aumento proporcional en las facultades productivas del trabajo (Smith, 1776) y Smith lo demostró mediante un ejemplo en la manufactura de agujas. Menciona que un obrero que no está adiestrado con la maquinaria de fabricación de agujas, a duras penas podría hacer una aguja en un día o en el mejor de los casos llegar a 20. Smith se dio cuenta que el trabajo de hacer un alfiler estaba dividido de esta manera en unas dieciocho operaciones distintas, las cuales son desempeñadas en algunas fábricas por otros tantos obreros diferentes. Y se refirió a una fábrica en la que entre 10 obreros, cada uno ejecutando entre 2 y 3 operaciones, lograban hacer más de cuarenta y ocho mil alfileres en un día. Para Smith, la división del trabajo aumentaba considerablemente la productividad debido a que esta generaba que los obreros desarrollaran mejor destreza en las funciones que desempeñaban, se ahorraba el tiempo que se gastaba al pasar de una ocupación a otra y, al tener labores más especializadas, surgían más posibilidades de inventar máquinas que hicieran más eficientes las tareas que realizaban diariamente. El notable avance durante el siglo XIX de los procesos de producción en la cadena de montaje fue estimulado, sin duda, por las ventajas económicas de la especialización, que había señalado dos siglos atrás Adam Smith. (Robbins, 2004)

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