Formación de Emprendedores . Desarrollo de la inteligencia emprendedora

Universidad Autónoma de Nuevo León[pic 1][pic 2]

Facultad de Ciencias de la Comunicación

Formación de Emprendedores [pic 3]

Nombre: Andrea Michelle Záccaro Zavala

Matricula: 1650210

Grupo: N68

Elabora un ensayo de 3 cuartillas del Capítulo 1

• Resumen Unidad 1 Desarrollo de la inteligencia emprendedora

En la actualidad, emprender un negocio no es una tarea fácil, al igual que tampoco es fácil sembrar en los otros el deseo de iniciar un proyecto para así poder tener un equipo que se pueda unir al proyecto que se desea emprender.

Para que se pueda lograr el objetivo, se requiere que la persona que va a iniciar el proyecto posea ciertas cualidades que puedan distinguirlo de los demás. Tiene que desarrollar un criterio y una forma de inteligencia muy enfocada y estructurada la cual en otras palabras se le puede llamar inteligencia emprendedora.

La inteligencia emprendedora se define como un conjunto de habilidades que se pueden utilizar a partir de un proceso de aprendizaje. Todas estas habilidades se manifiestan a través de actitudes, conductas, formas de relación, que lleven a identificar oportunidades de negocios y a tomar acciones objetivas. Es muy importante tener la habilidad de ampliar el panorama de comprensión sobre el tema, para poder completar con mejora continua cada uno de los pasos a seguir para darle vida a lo que se quiere emprender.

Emprender un negocio por default suele ser una meta apasionante, crear una empresa es un ejercicio estimulante para alguien que desarrolla la inteligencia emprendedora. Cuando alguien toma la decisión de llevar a cabo su proyecto, se desarrolla en él la iniciativa, su creatividad, su responsabilidad para llevar a cabo el proyecto y la toma de decisiones.

Se sabe que todos nacemos con un potencial intelectual, también llamado coeficiente intelectual, pero sin embargo un alto CI no es nos garantiza que esto nos de mucho prestigio en nuestros proyectos.

Los sectores público y privado están de acuerdo en que la única manera de lograr la prosperidad de las naciones es desarrollando nuevas empresas. Para sembrar en las personas la cultura emprendedora no sólo significa crear condiciones económicas para crear más negocios. Por supuesto que sabemos que, al crear más empresas, se generar aún mucho más empleo lo cual ayuda exponencialmente a la localidad en la que te encuentres.

La clave está en desarrollar aspectos que sean psicológicos a los cuales nombraremos inteligencia emprendedora, caracterizada por la capacidad para enfrentar contratiempos, tener tolerancia a la frustración, disciplina, la perseverancia, la empatía, la creatividad, entre otros.

El concepto de inteligencia emprendedora es una propuesta innovadora sobre cómo desarrollar las habilidades del emprendedor mediante el reconocimiento de las capacidades personales como la adaptación a nuevas situaciones, tolerancia a la frustración y autocontrol. Sabiendo todo esto, podemos entender que la inteligencia emprendedora puede ser pulida a tal grado de aplicarlo a cualquier proyecto que decidamos comenzar.

Al utilizar la inteligencia emprendedora, el empresario utiliza su curiosidad, pone atención cada vez más a lo que ocurre en mundos iguales al propio. Es la capacidad de poner toda su energía en sus propios proyectos, pero sin perder la curiosidad por otros mundos, otras energías, otros sueños y juegos que movilizan otras voluntades. En todas ellas aparecen las oportunidades, las anomalías, lo que falta; o respuestas a lo que en su propio mundo no se presentaba. Esos mundos diversos están en la propia ciudad, en otras regiones lejanas, y ahora en el universo del Internet.

Ser empresario y buscar lo seguro no es una buena combinación. Los empresarios saben realizar sueños, transformarlos en proyectos auto sustentados, pero ahí no termina la ambición del empresario. El empresario se divierte más en el proceso que en la meta. De hecho, muchos amplían sus empresas, las transforman, las venden o comienzan otras paralelas.

La inteligencia emprendedora produce un ser flexible, adaptable, atento a los cambios, con capacidad y gusto por adaptarse y adaptar su negocio, su organización y sus planes. Desde la revolución tecnológica, la interconexión global de negociosa la crisis financiera hace imprescindible construir planes, organizaciones y ofertas en permanente modificación. Utilizar esta inteligencia emprendedora ayuda a aceptarlas y disfrutarlas como un trabajo que nunca se termina.

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