Mente retorcida- Yamila Mailen Franklin

Mente retorcida:

Todabia escuchaba su respiracion mientras yacia tirada en el suelo, mi papa gritaba -Dejala abajo, en el zotano.- mientras yo con cara de asombro y disgustado al tocar un cuerpo tan frio por primera vez, con la sangre esparciendose escuche una leve voz y la lanze sobresaltado. -Papa todabia esta viva, respira, acaba de hablarme, podemos ayudarla.-. Recuerdo esa horrible escena repetida siempre en mi cabeza. Mi papa se levanto y clavando una grande cuchilla en la madera fue bajando hasta abajo hasta partir la cabeza de esa muchacha en dos partes. En mi cabeza titilaba la voz de la chica, mi culpa junta y el sonido del cuchillo en la madera deslizandose en un tono tan tormentozo como cuando su craneo se rompio.

Me llamo Hugo, cuando eso ocurrio estaba por cumplir mis 9 ańos de edad, me crie con mi mama pero en un desdichado accidente de transito ella fallecio. Quede al cargo de mi papa, creciendo con esa forma de vida la cual pense estaba bien.. se puede decir que mi mente se retorcio un poco, a veces me confunde, la realidad de ese trauma inmenso creado de a poco, hasta llegaron a lavarme tanto la cabeza que pense que hasta era moral mi comportamiento. Asi me mantuve en mi casa, deje el colegio, mis amigos caian millones de trabajadores sociales a los cuales yo les afirmaba vivir en plena paz junto a mi padre. El me hablaba, de los padres tutores me decia que solo buscaban chicos lindos y chiquitos yo deseaba ser lindo, pero no mi papa decia que yo era feo. Decia que todo el tiempo te hacian trabajar todo el rato y tenias quedarle el dinero a ellos. Que no te alimentaban nunca hasta que mueras de flaco y de fatigado. Que se reian de ti, NO NO NO! yo no queria eso. Mi papa siempre me decia, tu realmente no quieres morir, tu realmente no quierea dejarne solo. Mientras todos los dias una chica ya ia muerta en el suelo. Primero despacio se escuchaba su respirar, luego se escuchaba con sus ultimas fuerzas una suplica mientras estiraba el brazo descando en paz. Cuando tenia 12 años sali a la calle. Deapues de tantos años. La luz enceguecia mis ojos y mientras yo los refregaba se formo una perfecta vista y pude ver. Arboles moviendose, la tierra del suelo cuando un auto pasaba, todo, todo.. pero, lo vi. Era una chica. Yo la veia con ese odio inmenso con mis pupilas dilatadas. Y lance un insulto -Maldita perra, deben morir.- mientras mi padre acariciaba mi pelo observandola. Que ser tan maligno eran las mujeres, aun peores que los padres adoptivos. Sabia que yo era una buena persona al ver como morian, ¿ayudarlas? Ni loco, merecian lo peor. Esperamos a la media noche, agradeci a mi padre por esa vuelta y me fui a mi habitacion. Senti cuando me encontraba en la misma un fuerte azote en la puerta central y corri al comedor a buscar algo de comida. Lleve todo rapidamente a mi cuarto y lo escondi para cuando tuviera hambre en la noche, mi papa siempre decia "-hay que racuinar, las malfitas nunca llevan buen dinero-" se volvio a escuchar el ruido de la puerta, pataleos y gritos de auxilio. Estaba enojado, las mujeres habian matado a

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