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Negocio convencional vs negocio online


Enviado por   •  20 de Septiembre de 2021  •  Ensayos  •  1.314 Palabras (6 Páginas)  •  60 Visitas

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INTRODUCCIÓN

El presente trabajo se realiza con el objetivo de dar a conocer la importancia del comercio en internet para el desarrollo económico a lo largo del tiempo pero donde dejamos la parte del comercio tradicional donde un actividad de venta de bienes y servicios de forma presencial tanto de los proveedores como los consumidores.

Ya que el aumento de usuarios en internet ha aumentado significativamente en los últimos años, ya sea por comodidad, seguridad y sobre todo  por  motivos de pandemia que hemos vivido en los últimos dos años por todo el mundo.

Quien en la actualidad no cuenta con un dispositivo con internet en mano, eso nos hace aún más práctico el trabajo y sobretodo de fácil acceso a cualquier información, tienda, o duda que vaya surgiendo.

Pero a su vez la tienda física debe de desaparecer o continuar, es aquí donde nos preguntamos, cuál de las dos es más importante para el consumidor…

DESARROLLO

Hace ya algún tiempo que el comercio electrónico dejo de ser una previsión a futuro, y se convirtió en una realidad cada vez más presente entre nosotros, algo que convive con nosotros en nuestro día a día. Ofrecer a tus potenciales clientes la posibilidad de adquirir tus productos o bienes online, sin tener que desplazarse hasta un lugar físico, es darles un valor añadido que puede diferenciarte de tu competencia.

Hoy en día buscamos información sobre cualquier producto o negocio a través de la red, consultamos en buscadores, redes sociales, blogs, etc.

El comercio electrónico crece de forma exponencial y su futuro está a la vuelta de la esquina. Cada vez dedicamos más horas a navegar por Internet y como consecuencia cada vez es más habitual que compremos vía web. Esta tendencia no ha hecho sino incrementarse en estos tiempos de pandemia, en los que muchos ciudadanos se siente más seguros realizando su compra online que acudiendo a un establecimiento físico.

Simplemente un ejemplo sencillo, al ir a comer algún restaurante, lo primero que hacemos como consumidor es buscar su página online o redes sociales  para ver sus referencias, ubicación o menú, y que sucede cuando no cuenta con dicha tienda, y lo que sucede es que para cualquier persona que esté buscando un restaurante por la zona e ignore la existencia de dicho restaurante, este restaurante seguramente pasará desapercibido, y eso tarde o temprano tendrá consecuencias comerciales.

Centrándonos en lo que puede aportar la creación de una tienda online para un comercio, hay que subrayar no sólo que con la tienda online y sus redes sociales mejora sustancialmente la relación entre cliente sino que los usuarios pueden acceder de manera directa y rápida a la compra de los productos de esa tienda.

Una tienda online no se mantiene sola después de ser creada, tiene que ser algo dinámico a lo que prestemos atención y dediquemos algo de tiempo; hay que gestionarla y cuidar detalles como el almacenamiento y el envío de pedidos, la atención al cliente y todos los aspectos relacionados con su mantenimiento y mejora.

El del comercio electrónico es un campo a explorar con infinitas posibilidades de desarrollo. Aspectos como asegurar la intimidad y la confidencialidad de los datos de los usuarios son vitales, en especial en asuntos tan delicados como son los pagos.

Ahora regresando a la venta o compra convencional donde asistimos físicamente a un negocio. Hay algo que la tecnología todavía no ha hecho posible; tocar, oler, probar o sentir, solo es posible en un establecimiento físico.

Además, “ir de compras” supone una actividad de ocio extendida en nuestra cultura, una cultura que nos empuja a la calle, a las relaciones humanas. Y es ahí donde debe poner sus esfuerzos el pequeño comercio para competir, sin darle la espalda a la realidad del consumidor.

A la vez, es el establecimiento físico el que favorece la interconexión entre el detallista y el consumidor, las relaciones humanas más estrechas y duraderas.

Por tanto, es necesario crear espacios donde sucedan cosas, no solo pensados para la transacción comercial sino también para el servicio, la educación, el ocio, la diversión o la comunicación.

Darle la posibilidad de comprar online y offline, de atenderle en ambos medios, de ofrecerle servicios adicionales, consultar online la disponibilidad del producto o poder reservar cita para un servicio offline, es algo que el cliente valora porque es fácil, inmediato y requiere poco esfuerzo.

Hoy en día la tecnología nos permite un amplio sector al cual se le tiene que explotar y aprovechar desde todas sus perspectivas. Existen desde las redes sociales que son una manera de promocionarse directamente a los consumidores finales, las páginas web utilizadas como oficinas de información virtuales, donde se ocupan blogs de opinión, columnas de satisfacción de necesidades, correo electrónico como medio de comunicación entre oferente y demandante y además la oportunidad de adaptación de un producto determinado a las necesidades de un cliente o de un mercado en específico.

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