Rol del líder y la Gestión de Conocimiento como elementos clave para la sostenibilidad empresarial

Rol del líder y la Gestión de Conocimiento como elementos clave para la sostenibilidad empresarial.

Todos los hombres por naturaleza desean el conocimiento.

Aristóteles (384-322 d.c)

La era tecnológica actual y los procesos de globalización, demandan continuamente la reconfiguración de los elementos intangibles y sus roles en la organización, entre ellos sus estilos de liderazgo, el capital intelectual y los modelos de gestión en sí. Existen teorías y casos de estudio donde se evidencia  muchas veces que es este “valor intangible”, no desde su valor contable, lo que representa la ventaja competitiva empresarial y por ello su sostenibilidad en el tiempo. (Serradell y Pérez, 2003)^[1]. 

En ese sentido, frente al continuo cambio y rápida adaptación que se requiere actualmente en el campo empresarial, es la capacidad individual y colectiva para generar conocimiento lo que permitirá resolver problemas, mejorar procesos o identificar nuevas oportunidades. Indudablemente, la tarea empresarial radica en una gestión adecuada de ese conocimiento generado, donde los procesos estén orientados a la eficiente identificación, almacenamiento, transmisión y utilización del mismo. La relación de interdependencia de la capacidad intelectual, el conocimiento en una organización y la correcta gestión de la misma, es el factor determinante entre la eficiencia y oportunidad en la toma de decisiones de sus líderes, siempre y cuando desde su rol, se comprenda la ventaja competitiva que esto podría representar.

Por otro lado, actualmente existe una tendencia de las grandes multinacionales y de campos de estudio como la Responsabilidad Social Empresarial, donde el entendimiento de la sostenibilidad, involucra el interés en el desarrollo de un entorno social y de  sus individuos, así como del medio ambiente, dado que son el campo donde se desenvuelve la práctica empresarial y en una relación ganar-ganar sin detrimento de la rentabilidad empresarial,  pero si como ente que puede generar grandes impactos positivos en la sociedad.

Lo anterior, necesariamente exige que el nuevo rol del líder organizacional, amplíe su campo de acción e integre en su gestión prácticas orientadas al desarrollo de competencias (no técnicas) de su equipo, si bien para el logro de resultados de la organización, también, y mucho más importante, para el desarrollo de sus colaboradores como integrantes del entorno social donde se desenvuelve la práctica empresarial y como piedra angular para el desarrollo cultural, incluso de un país. En conclusión, líderes empresariales más dinámicos, más empáticos con su entorno, más involucrados en el desarrollo de un equipo, más conscientes en su rol como transformadores de un entorno social.

Es este punto es importante mencionar, que el presente texto contempla la denominación de líder, no ligado a la estructura o jerarquía organizacional, sino a todo rol empresarial que involucre gestión con otros, es decir cualquier rol que pueda generar impacto positivo en un grupo de colaboradores de la organización. Líder entendido como el “individuo de un grupo que ejerce una mayor influencia en los demás, (…) éste presenta la habilidad de convencer a otros de que trabajen con entusiasmo para lograr los objetivos definidos.”^[2]

...