Psicología Infantil ‘’ Segundo reporte de lectura: Tu hijo, tu espejo’’

Universidad Autónoma de Chihuahua[pic 1][pic 2]

Facultad de Enfermería y Nutriología

Psicología Infantil

‘’ Segundo reporte de lectura: Tu hijo, tu espejo’’

Alumna:

E.L.E Pamela Cázares Salazar 336821

Docente: M.E.S Rubén Federico Lira Ramos

13/04/2022

Capítulo 4: Cuando ser padre agobia

En ocasiones querer pasar un tiempo a solas, es decir, sin tus hijos, es totalmente normal, el primer año de vida de un bebé es el más complicado en cuanto a los periodos de sueño y descanso. Formar un equipo y hacer turnos para atenderlo o atenderla y realizar las tareas necesarias para ello hará que la situación sea más llevadera. La psicóloga especializada en terapia de pareja Sara Gómez sugiere que cuando tengan un momento libre durante esta etapa, aunque tengan otras prioridades, también dediquen un momento para compartir juntos. Una cena en casa o ver una película juntos son buenas opciones, asegura.

El querer tener un tiempo si hijos no te hace ser un mal padre, somos humanos, y necesitamos un respiro, porque pueden pasar cosas peores si muchos sentimientos y necesidades se acumulan dentro de una persona.

Con la palabra agobio se nombra a un intenso sentimiento de ansiedad, inquietud o depresión, generalmente surgido ante problemas o preocupaciones de difícil o imposible solución.

‘’En general, los sentimientos de agobio de la madre tienen que ver con sus funciones, desde cuidarlos, ayudarlos con la tarea, atenderlos, hasta cocinar para ellos, limpiar, lavar, etc., mientras que para el padre con su función de proveedor.’’

Muchos padres en ocasiones pueden imaginar el como serían algunas situaciones si no tuvieran hijos, todo esto puede venir de ese sentimiento de ‘’agobio’’ que es más común de lo que podemos imaginar, pero el pensar en esto no significa que realmente lo deseen, simplemente como seres humanos imaginamos distintos escenarios.

Capítulo 5: El rechazo y sus máscaras

‘’El rechazo es ese ácido caliente que se cuela en cada espacio de nuestra relación con el hijo rechazado, es esa espina que se clava en el corazón y duele y no nos atrevemos a tomarla con las manos, como es necesario para sacarla, porque tememos resultar heridos; pero el rechazo en sí mismo hiere tanto, quema tanto, duele tanto, que ni siquiera el dolor de reconocerlo es comparable con el dolor de seguirlo cargando.’’ (Martha A. Chávez, 2002)

Quizás lo primero que nos podríamos preguntar ante la cuestión anterior sería ¿Por qué un padre o una madre podría sentir rechazo por un/a hijo/a? La primera razón es su condición humana; el padre/madre es un ser humano con una historia personal, con limitaciones, con necesidades insatisfechas, con miedos, con conflictos.

Algunas de las razones más comunes del rechazo hacia un hijo son las siguientes:

• Ser del sexo opuesto al que los padres deseaban:

Muchas veces el padre o la madre, o en ocasiones ambos, cuando se enteran de que serán padres, automáticamente desean que sea niño o niña y se idealizan desde ese momento, pero al paso del tiempo, descubren que el bebe es del sexo contrario al que esperaban, y hay padres que lo aceptan y aman a ese bebe, pero hay otros que presentan rechazo hacia el o ella desde antes de nacer.

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