2009-Craig, Baucum-Desarrollo físico, cognoscitivo y lingüístico en la infancia..

Vanegas Calderón Ana Karen

Grupo: 1506

Educación Especial y Rehabilitación Teórica I

DESARROLLO PSICOLÓGICO.

Capítulo 4. Desarrollo físico, cognoscitivo y lingüístico en la infancia.

Neonatos

El primer mes es de los meses más importantes para el neonato debido a que en este mes él aprende a adaptarse a vivir fuera del vientre materno, además éste mes lleva consigo un proceso de recuperación del proceso de nacimiento en el que se ajustan algunas funciones vitales.

Competencias y estados del infante

Estudios publicados sobre el desarrollo señalaban que sólo hasta casi cumplían un año de edad comenzaban a ocupar los centros superiores de su cerebro, que no percibían objetos ni patrones, veían luz y sombras solamente. Se pensaba que durante las primeras semanas de vida la conducta era refleja.

Actualmente se demuestra que fueron subestimadas en gran manera las capacidades del niño. Ahora se sabe el recién nacido es capaz de emitir respuestas organizadas y predecibles así como realizar una actividad cognoscitiva más compleja, con preferencias bien definidas y una habilidad extraordinaria para aprender.

Con todos estos descubrimientos fue posible la realización de métodos más eficaces y exactos para observar su conducta.

Estados de activación del infante

La respuesta del niño se modifica según su estado conductual, en un estado de inactividad alerta, se estimula con facilidad y responde a los estímulos sonoros o visuales aumentando la actividad, si está ya en un estado activo, los estímulos suelen calmarle.

Reflejos

Se le llaman así a las conductas biológicas que pueden ser clasificadas inicialmente como reflejos de supervivencia y reflejos primitivos. Los primeros son reflejos indispensables para adaptarse y sobrevivir, como la respiración, el reflejo de búsqueda y el de succión, los reflejos primitivos, en cambio, aunque no tengan un obvio valor de supervivencia, probablemente hayan sido importantes en alguna etapa de la evolución humana, como el reflejo del Moro (reacción de sobresalto).

Aprendizaje y habituación

En este apartado se hace referencia a la facilidad con la que los neonatos pueden aprender, como ejemplo está un experimento en el que le enseñaron a los bebés a voltear la cabeza hacia la izquierda, acción recompensada con leche y posteriormente la respuesta fue transferida cuando se invertía el lado al que tenía que voltear.

Desarrollo físico y motor

Tras varios estudios guiados hacia el estudio de la maduración, uno de los representantes de estas investigaciones, Gesell, llegó a la conclusión de que el desarrollo no depende de manera esencial del ambiente, en realidad la mayor parte de los logros del niño provienen de un programa biológico interno, la conducta aparece en función de la maduración.

Sin embargo la teoría de Gesell tuvo varias limitaciones, como el hecho de que los niños que estudió pertenecían a la misma clase socio-económica y comunidad, así que el ambiente común pudo haber hecho que su desarrollo fuera similar.  Hoy en día sabemos que el desarrollo es muy distinto cuando los niños crecen en contextos históricos o sociales distintos. La aportación de Gesell no deja de ser importante, pese a las limitaciones de su investigación, si utilizamos sus hallazgos de modo riguroso y sin exagerar su valor tendremos por lo menos un punto de referencia de los hitos evolutivos con qué comparar el desarrollo de cada niño. Sin olvidar que los aportes de Gesell son promedios; los niños normales varían mucho en cuanto a la edad en que adquieren conductas basadas en la maduración, se desarrollan a su propio ritmo y dentro del contexto de su entorno sociocultural.

Resumen de los dos primeros años de vida

Los primeros cuatro meses. En esta etapa los niños usualmente duplican su peso, la piel ppierde el aspecto que tenía cuando recién había nacido el niño, el cabello fino empieza a ser remplazado por otro, los ojos comienzan a enfocarse. Las proporciones de cabeza-cuerpo van cambiando notablemente, dientes y huesos del niño también están cambiando. La mayor parte de los reflejos del niño suelen desaparecer al segundo y tercer mes y lo remplazan de manera gradual acciones voluntarias.

De los cinco a los ocho meses. El niño va ganando peso corporal de manera gradual, el cabello es más espeso y largo, las piernas se van orientando de modo que las plantas de los pies no estén encontradas una frente a la otra. La mayoría de los niños logran un importante hito denominado alcance guiado por la vista: pueden extender las manos, tomar un objeto atractivo y acercárselo, alcanza la coordinación de sus movimientos en un acto completo, adquiriendo una percepción precisa de la profundidad, control voluntario de los movimientos de los brazos y con la posibilidad de ejercer presión, asi como la capacidad para organizar estas acciones en una secuencia. Durante los primeros cinco meses de vida el niño se vale de la información visual para realizar exploraciones directas con los dedos

Las habilidades motoras finas que exigen el uso de manos y dedos siguen perfeccionándose, a los cinco meses el niño ha pasado de una prensión refleja a una prensión articulada voluntaria. A los ocho meses casi todos los infantes pueden pasarse objetos de una mano a otra; y algunos saben ocupar el pulgar para asir.

También se perfeccionan las habilidades motoras gruesas, aquellas en las que se emplean los músculos más grandes o todo el cuerpo. La mayoría de los niños de 8 meses pueden permanecer sentados sin apoyo alguno siempre y cuando sean acomodados de la manera adecuada.

A los ocho meses los niños empiezan a participar en juegos sociales que los hacen reir, y a casi todos les gusta darle y quitarle un objeto a un adulto.

De los nueve a los doce meses. La mayoría de los niños pesan el triple de lo que pesaban al nacer. Se logran mantener de pie sin ayuda y empiezan a caminar. La capacidad de pararse y caminar le da al niño una nueva perspectiva visual. La locomoción le permite una exploración más activa. El desarrollo motor se ve estimulado por cosas nuevas e interesantes que lo invitan a verlas y examinarlas, la exploración de otros niveles y habilidades favorece el desarrollo cognoscitivo y perceptual.

Dieciocho meses. El peso es cuatro veces mayor al que era cuando nacieron, pero la tasa de incremento de peso se reduce. La gran mayoría ya caminan solos, algunos no son capaces de subir las escaleras y les cuesta mucho trabajo patear un balón, porque no pueden sostenerse sobre un solo pie.

Veinticuatro meses. Los desarrollos físicos y motores ya son procesos complejos y dinámicos. El desarrollo del cerebro depende de la información que el niño recibe de sus acciones y exploraciones sensoriales. El contexto social en el que crece el niño favorece u obstaculiza los sistemas interactivos.

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