Caso Práctico: Role-playing

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Caso Práctico: Role-playing

Descripción de la actividad y pautas de elaboración

En esta actividad debes imaginar un conflicto para cuya resolución consideres oportuno aplicar la técnica del role-playing. Concretamente, debes seguir estos pasos:

• Describir el conflicto imaginario.
• Explicar brevemente qué dirías al alumnado para que entienda la aportación que le va a hacer el role-playing.
• Especificar la puesta en escena dejando claro qué se escenificaría y quién interpretaría cada papel.
• Reproducir el debate posterior (o lo más importante del mismo). Es decir, debes elaborar un diálogo en el que quede claro qué dirías tú y qué irían diciendo los alumnos y alumnas. Se valorará especialmente que tus indicaciones contribuyan a concienciar al alumnado, para lo cual puede resultar útil que en el debate quede claro cómo orientarías a un alumno o alumna que no haya entendido la escenificación o que se muestre reacio-a a cambiar de actitud.

Para presentar una actividad más completa es conveniente incluir una breve introducción sobre el tema al comienzo del trabajo, una breve conclusión sobre lo que has aprendido al final del mismo y la bibliografía utilizada para elaborarlo. Con estos apartados y una correcta citación bibliográfica estarás adquiriendo, además, conocimientos que te resultarán importantes más adelante para elaborar tu trabajo de fin de grado.

Objetivos

• Comprender correctamente la técnica de role-playing.
• Guiar a los alumnos en la utilización de dicha técnica.

Criterios de evaluación

• Se valorará la comprensión adecuada de la técnica de role-playing.
• Se valorará la capacidad de guiar a los alumnos en su utilización.

Extensión máxima: 4 páginas, fuente Georgia 11 e interlineado 1,5.

Competencias (Educación primaria)

• CB3. Tener la capacidad de reunir e interpretar datos relevantes (normalmente dentro del área de estudio) para emitir juicios que incluyan una reflexión sobre temas relevantes de índole social, científica o ética.
• CB4. Poder transmitir información, ideas, problemas y soluciones a un público tanto especializado como no especializado.
• CB5. Desarrollar aquellas habilidades de aprendizaje necesarias para emprender estudios posteriores con un alto grado de autonomía.
• CG5. Diseñar y regular espacios de aprendizaje en contextos de diversidad y que atiendan a la igualdad de género, a la equidad y al respeto a los derechos humanos que conformen los valores de la formación ciudadana.
• CG6. Fomentar la convivencia en el aula y fuera de ella, resolver problemas de disciplina y contribuir a la resolución pacífica de conflictos.
• CG9. Desempeñar las funciones de tutoría y de orientación con los estudiantes y sus familias, atendiendo las singulares necesidades educativas de los estudiantes.
• CG11. Colaborar con los distintos sectores de la comunidad educativa y del entorno social.
• CG12. Asumir la dimensión educadora de la función docente y fomentar la educación democrática para una ciudadanía activa.
• CG17. Conocer y aplicar en las aulas las tecnologías de la información y de la comunicación.
• CG18. Discernir selectivamente la información audiovisual que contribuya a los aprendizajes, a la formación cívica y a la riqueza cultural.
• CE7. Analizar y comprender los procesos educativos en el aula y fuera de ella.
• CE11. Conocer los procesos de interacción y comunicación en el aula.
• CE12. Abordar y resolver problemas de disciplina.

INTRODUCCIÓN

        El role-playing es una técnica de dinámica de grupo, llamada también técnica de dramatización, simulación o juego de roles. Consiste en que dos o más personas representan una situación o caso de la vida real, actuando según el papel que se les ha asignado. Esta técnica no solo tiene efecto en aquellos que representan los diferentes roles, sino en todo grupo ya que éste participa como observador. Es una técnica muy útil a la hora de la resolución de conflictos en el aula ya que, a través de ella, los alumnos pueden experimentar comportamientos, sentimientos, emociones, actitudes, … y hace que se den cuenta de lo que hacen, de cómo lo hacen y de las consecuencias que pueden llegar a tener sus acciones. Es decir, a través de una situación ficticia, creada a través de una dramatización/diálogo, los alumnos podrán ser capaces de ponerse en el lugar del otro, trabajando así la empatía (imprescindible para la buena convivencia).

        El docente asignará los diferentes roles (personajes con diferente personalidad a la propia), actuará de guía (moderador), dejando el protagonismo a los alumnos y los motivará (la motivación es un factor clave para que los alumnos participen activa y positivamente y así obtener un mejor resultado).

        El uso del role-playing en el aula (y sobre todo en situaciones de conflicto) es muy beneficiosa ya que: aumenta la motivación e interés del alumno; fomenta un aprendizaje activo que se adapta a “situaciones concretas”; hay un feedback inmediato; permite vivir situaciones reales desde la seguridad del aula; mejora la comunicación interpersonal, ya que es una técnica abierta y participativa donde surgen diferentes soluciones e interpretaciones de una misma situación; y, lo más importante de todo, la solución surge del mismo grupo/clase, lo que lleva a una posterior reflexión e interiorización de lo aprendido, lo que facilitará la su aplicación posterior en la vida real. La técnica del role-playing consta de 4 fases: motivación (crear un clima de confianza y participación en el aula), presentación (explicación del caso y situación a representar, reparto de roles), escenificación (dramatización donde cada uno desempeña su rol –actores y observadores) y debate (análisis, valoración y búsqueda de soluciones).

CASO-SITUACIÓN

        Se trata de una clase de 5º de primaria con 18 alumnos. Se trata de un grupo-clase, a simple vista, tranquilo y sin conflictos aparentes. En el aula tienen un comportamiento y un rendimiento, correcto acorde a la edad y al curso en el que se encuentran. No obstante, últimamente en el patio se ha observado que el ambiente no es tan bueno como el del aula: hay un grupo de 3 alumnos que atemoriza a 2 alumnos en concreto (insultándoles, quitándoles el almuerzo, despreciándolos y aislándolos), mientras el resto parece que no lo vea (aunque, seguramente, no quieran verlo). El tutor, junto con el claustro de profesores, decide utilizar la técnica del role-playing para intentar que estos 3 alumnos que abusan, y el resto de compañeros que se quedan al margen, se pongan en el lugar de sus 2 compañeros acosados, e intentar que empaticen con ellos y reflexionen sobre su conducta y las consecuencias que ésta tiene.

MOTIVACIÓN

        El tutor elige un día en el que estará toda la mañana con su grupo-clase y les explica que esa mañana la dedicarán a realizar una actividad grupal. Les comenta lo contento que está con su comportamiento y rendimiento en clase, pero les apunta, suave y tranquilamente, que últimamente han observado conductas negativas a la hora del recreo. Insiste en que es un grupo muy bueno y que juntos forman un gran equipo, por eso, hay que intentar acabar con según qué conductas y comportamientos que son negativos para la buena convivencia y que lo único que aportan es malestar y tristeza. Para ver cómo afecta la conducta y comportamiento de cada persona en un grupo, les explica que van a hacer una actividad divertida, en la que todo el mundo participará. Se trata de una pequeña “obra de teatro” llamada: “¿Cambiamos de zapatos?”. Insiste en que confía en ellos, ya que son un gran equipo formado por personas estupendas que puede ser que en algún momento se equivoquen y esto provoque alguna situación o emoción negativa en algún compañero/a. Los anima a participar y a disfrutar con la actividad.

PRESENTACIÓN

El tutor organiza el “juego”: 5 alumno/as serán los actores (cada uno con un rol) y el resto será el público (que deberá estar atento y analizar qué ocurre). Les explica que al final realizarán un debate donde participarán todos de manera conjunta: actores, público y maestro.

La representación recreará la hora del patio y tendrán que escenificar qué ocurre en ese período un día cualquiera. Reparte a cada alumno-actor un papel en el que describe qué rol/personalidad ha de representar durante la escenificación (dejando a un lado su propia personalidad). Les dejará un tiempo para que puedan preparar su personaje. Los personajes repartidos son:

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