DIMENCIONES DE LAS FUNCIONALIDADES YOICA

1.- Análisis de las cualidades del vivenciar presentes en el caso de Ana O.

1.1.- Dimensión realidad e irrealidad.

En el texto expuesto es posible apreciar que en la fase media-final de la enfermedad Ana sufrió graves alteraciones en la integración del Yo lo que afectaba severamente en el desarrollo de juicios de prueba de realidad. Paso de ser una mujer muy lucida y clara a no distinguir la realidad de su mundo interno con el mundo externo o real. Su yo perdió en un punto, su propósito vital.

El compromiso de su organización psíquica la llevo a un deterioro significativo de la relación con la realidad al punto de construir una ideación de la existencia de 2 “dos Anas” en paralelo, con comportamientos opuestos entre sí, en este punto Ana estaba a la deriva sin posibilidad de conectarse con la realidad y de re-articular su proyecto de vida. En esta etapa sufre además de alucinaciones y delirios que le hacían experimentar incluso síntomas físicos como visión tubular e hidrofobia entre otros que no tenían origen etiológico sino que eran producto de la patología mental.

1.2 Dimensión Actividad-pasividad.

En lo que respecta a esta dimensión se aprecia que en un punto el Yo de Ana no logro adecuarse eficazmente a las condiciones de su medio, esto se gatilla puntualmente con la enfermedad y posterior muerte de su padre. En una primera instancia Ana responde con una conducta que refleja una inclinación exagerada hacia un polo activo, lo que se manifiesta en los extremos cuidados que otorga a su padre, y que la van deteriorando físicamente. En esta conducta es posible observar el deseo de gobernar lo que acontece a través de un “hacer activo” casi compulsivo, en el que no es capaz de integra el polo de la pasividad y “aceptar” las circunstancias propias de la vida de un modo más equilibrado. O tal vez idear un plan para dar el cuidado a su padre sin deteriorar su propia salud lo que refleja una conducta poco madura y falta de diseño.

1.3. Dimensión adhesividad-evitación.

Me parece que la ideación fantasiosa de Ana de sus dos Yo escindidos, es una manifestación de una inadecuada e inmadura integración de los polos de Adhesividad v/s Evitación. En el polo de la adhesividad Ana se muestra más conectada y en armonía con el mundo externo, aunque vulnerable pues se manifiesta triste o angustiada. En oposición a lo anterior el otro Yo de Ana que se manifiesta a través de estos episodios de delirio revela una actitud menos respetuosa con su entorno (lanza objeto, arranca botones), como si una parte de ella quisiese revelarse a la conducta habitualmente adecuada. Si hacemos un paralelo con las estructuras propuestas en la 2° tópica de Freud podríamos decir que el Yo de Ana no fue capaz de cumplir con su función de moderador de las energía psíquicas e integrar adecuadamente las demandas del Ello y Súper Yo razón, por la cual su inconsciente busco una manera

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