Desarrollo Humano y Salud Mental

PROYECTO INTEGRADOR FORMATIVO                

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Pontificia Universidad Católica del Ecuador Sede Ambato

Escuela de Psicología - Psicología Clínica

PLAN DEL PROYECTO DE INVESTIGACIÓN:

Estudio de Caso

Psicopatología de la Psicosis y Perversión – Octavo Semestre

Camila Pico, Viviana Ricaurte, Andy Rodríguez & Frank Vargas

Magister Isabel Ramos

Desarrollo Humano y Salud Mental

Ambato – Ecuador

Mayo 2021

CONTENIDO

INTRODUCCION        4

JUSTIFICACIÓN        5

OBJETIVOS        5

Objetivo General:        5

Objetivos Específico:        5

CRONOGRAMA        5

MARCO TEÓRICO        6

1.        Perversión según Freud        6

1.2        Perversión según Lacan        8

1.3 Perfiles Criminológicos        10

1.3.1 Perfil Criminológico Edmund Emil Kemper III        10

Datos Informativos        10

Firma del Asesino        11

Inicios y Modus Operandi        12

Firma del Asesino        13

Perfil Criminológico        13

Datos Informativos        13

Firma del Asesino        15

METODOLOGÍA        16

Criterios de Inclusión.        17

Criterios de Exclusión        17

ANÁLISIS DE RESULTADOS        18

Respecto a Pedro Alonso López (El Monstruo de los Andes)        18

Respecto a Edmund Kemper        19

Respecto a Andrei Chikatilo “El Destripador de Rostov”        20

Referencias        24

INTRODUCCION

La primera aproximación hacia el termino perversión por parte de Freud se da en el año 1896 cuando Freud postula que la perversión es una entidad distinta de la paranoia y la neurosis, en un inicio Freud concebía a la perversión como una inmadurez sexual, aseguraba además que toda la sexualidad en su origen es perversa. Se decía además que la perversión podía debutar en bestialismo por el carácter animal que tenía pues estaba ligada a los órganos de los sentidos como el gusto y el olfato.

Freud introduce el termino Fetichismo dentro de su ensayo sobre las aberraciones sexuales en el año de 1905. Este término tiene sus raíces semiológicas en el latín facticius, cuya connotación obedece a dos significados; artificial y sortilegio. Ya llevado al psicoanálisis se entiende como un objeto que reemplaza al objeto sexual normal, sin embargo, este no puede hacer las veces de servir al fin sexual normal. El objeto sexual es sustituido por alguna parte del cuerpo o determinado objeto inanimado que tenga alguna relación con la persona a quien reemplazo

Se considera también que cierto grado de fetichismo puede ser considerado normal tomando como ejemplo a las relaciones amorosas, este se convierte en una condición patológica cuando es una condición necesaria para obtener excitación sexual y la obtención de placer, caería entonces en el plano de la perversión. Una de las pretensiones del fetichista (perverso) es que usa el objeto debaA  reemplazo para dotar de falo a la mujer pues aparentemente el perverso que ha caído en fetichismo sufre de constantes angustias hacia la castración, la mujer vendría a representar esta figura de castración, situación que el sujeto no acepta y reniega.

La diferenciación de la instancia perversión respecto a la neurosis es la predominancia del goce sobre el deseo y la experimentación de este sin indicios de culpa, se dice pues que el perverso en lugar de experimentar culpa experimenta angustia y esta está dirigida hacia la castración.

JUSTIFICACIÓN

La presente investigación busca, por medio del estudio y análisis de tres casos clínicos explicar cómo se presenta el fetichismo en sujetos ubicados dentro de la estructura psíquica perversa, esto desde una perspectiva psicoanalítica. Con esto se busca realizar un aporte a la literatura existente acerca del tema, lo que posteriormente nos permitirá ampliar el conocimiento académico y popular acerca de sujetos que encajan dentro de la estructura psíquica anteriormente mencionada. La presente investigación se realizará con apoyo teórico preexistente acerca de la perversión basado en las teorías de Freud y Lacan.

OBJETIVOS

Objetivo General:

• Estudiar diversos casos de fetichismo desde un enfoque psicoanalítico.

Objetivos Específico:

• Conceptualizar el fetichismo en la estructura psíquica perversa
• Analizar la casuística de perversión fetichista en tres casos
• Explicar las características del fetichismo en la perversión.

CRONOGRAMA

MARCO TEÓRICO

1. Perversión según Freud

Freud fue quien introdujo el término de perversión a la teoría psicoanalítica como resultado de la búsqueda de una denominación en la que se pueda ubicar a ciertos sujetos que presentan características bastante especificas en cuanto a su actuar siendo lo más remarcable su comportamiento sexual. Según lo manifestado por López (2013) Freud le otorgó en un principio, el carácter de infantilismo: el placer perverso para el psicoanálisis, es inicialmente el retorno o regresión, y el mantenimiento o fijación, de una práctica sexual infantil. El psicoanálisis posteriormente desarrolla el concepto de sexualidad perversa para referirse a la sexualidad que ha dejado a un lado la búsqueda de la reproducción como meta y que busca únicamente el placer.  La extensión del concepto de sexualidad en Freud, nos lleva a descubrir la naturaleza sexual escondida en acciones, pensamientos y síntomas, en los cuales una observación superficial nunca podría hacernos pensar que allí está implícito el sexo y es cuando lo descubrimos, que se puede pensar que hay algo perverso.

Partiendo de esta postura Freud planteó la hipótesis de que la perversión se puede observar desde la etapa infantil en actos que a primera vista parecerían ingenuos e inocentes, para tratar este tema Freud creo un término que acompañara a todo analista que pretenda llevar un proceso de estudio de un caso de perversión, este término es el de “perverso polimorfo”. La sexualidad en el psicoanálisis se aborda desde dos fuentes, estas son la sexualidad infantil y las “perversiones” de las que se hablará posteriormente. López (2013) señala que. Lo infantil en psicoanálisis no es un retroceso desde un estado avanzado hacia otro anterior, sino que lo infantil (aunque ya haya pasado en el tiempo), puede ser considerado como un progreso. Por su parte Roudinesco (2016) sostiene que. En síntesis, hacía del niño de menos de cuatro años un ser de goce, cruel y bárbaro, y capaz de entregarse a toda clase de experiencias a las que, sin embargo, se vería obligado a renunciar en la edad adulta. De ahí la idea de los diferentes estadios –anal, oral, genital y más adelante fálico– tomada del evolucionismo, que servía para definir las etapas de la vida subjetiva conforme a los objetos escogidos. El tiempo en la realidad psíquica no fluye igual que en la realidad física. Se puede decir que el tiempo en el inconsciente no pasa, sino que permanece en el presente y sólo se resignifica. Con el desarrollo de este concepto Freud llega a la conclusión de que la sexualidad humana en un inicio es siempre perversa (tiene como única meta el encuentro con el placer) y que poco a poco esta se va convirtiendo en un “fantasma perverso” a medida que el sujeto se va neurotizando, con respecto a esto Freud (1897) menciona: Esto me permite considerar por qué, en algún momento del análisis, los pacientes no necesariamente perversos, reportan con frecuencia sensaciones sexuales parecidas que les repugnan, pero que a veces reconocen como fuentes de placer sexual. Ortega (2020) menciona que la perversión sería la persistencia de una fijación a una pulsión parcial: se trataría del signo de un retraso en el desarrollo y la evolución hacia la pulsión genital. Se definiría por una detención en tal o cual placer calificado de preliminar, pero que no tiene nada de tal. La transformación por el Edipo no habría tenido lugar. Al leer esto se llega a la deducción de que los sujetos inmersos en la neurosis dejan sus fantasías perversas en un plano imaginativo mientras que los sujetos que no han sido castrados y por ende no se han ubicado en la estructura neurótica (sujetos perversos) llevan a cabo dichas fantasías ya que no sienten el peso de la norma social sobre ellos. Con respecto a esto López (2013) señala. El neurótico es, en cierta forma, un perverso en potencia, al menos en su fantasma y esto, por efectos de su propia censura, lo lleva a rechazar enérgicamente en él, y sobre todo en los demás, cualquier pensamiento o deseo relacionado a la perversión.

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