Ensayo sobre Los peligros de la obediencia

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               Centro Universitario del Sur

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          Nombre: Brenda Fernanda Rodríguez [pic 6]

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Materia: Psicología Social        

     Carrera: Enfermería

     Asesor: José Luis Chávez Cárdenas

      Grado: 1 A

Tema:  Los peligros de la obediencia

Puerto Vallarta, Jalisco a 29 de noviembre del 2017

Los peligros de la obediencia

Los peligros de la obediencia, siembre ha sido un tema conflicto, desde los tiempos de Platón, ha sido un tema de controversia, ya que existen pensadores mas conservadores que dicen que la desobediencia atenta con la trama de la sociedad, mientras que los pensadores humanistas recalcan la primicia de la conciencia individual. Un ejemplo antiguo de esto es la historia bíblica de Abraham cuando Dios le pidió a este el sacrificio de su hijo, la cuestión aquí es que si debemos obedecer un mandato que choca con nuestra conciencia.

Los aspectos legales y filosóficos de la obediencia son trascendentes, pero aclaran muy poco el comportamiento de las personas en circunstancias mas concretas. En la Universidad de Yale inicie con un experimento para ver que tanto dolor puede infligir un ciudadano común a otra persona solo porque el experimentador se lo ordena hacerlo.

El plan básico del experimento: van dos personas a un laboratorio de psicología para que fueran parte de un estudio sobre la memoria y la capacidad de aprender.  A una le nombran el profesor y al otro el alumno, al alumno lo siente y lo sujetan, le explican que le dirán una seria de 8 pares de palabras y que tendrá que recordar la segunda cada vez que le digan la primera, en caso de errar en la respuesta este recibirá una descarga eléctrica de intensidad creciente.

 Este experimento se centra en el profesor, después de que sientan al alumno, el profesor se siente delante del interruptor de descargas, este tiene las leyendas de choque ligero a choque moderado, choque fuerte, choque muy fuerte, choque intenso, choque de intensidad extrema y al final peligro, choque grave. Al principio al maestro se le da una descarga (la más baja) para demostrarle que el equipo es real.

La conciencia en ejercicio

El profesor es un sujeto ingenuo que acudió al laboratorio por un anuncio en el periódico, solicitando voluntarios para un experimento de memoria. El alumno, no es mas que un actor que no recibe ninguna descarga. El fin del experimento es ver hasta donde es capaz de llegar una persona en una situación concreta, a ser capaz de causar dolor a una víctima que protesta, solo por cumplir una orden.

El conflicto empieza cuando el alumno empieza a mostrar su molestia, a los 75v refunfuña, a los 120v se queja en voz alta, a los 150v pide que paren la prueba, cada vez que aumentan el voltaje grita mas, al llegar a los 285v lanza un grito de agonía. Poco después no emite sonido alguno.

El profesor llega rápido a un estrés culminante, para el no es un juego: el conflicto es intenso y evidente. El sufrimiento le impide continuar, pero cuando empieza a dudar en continuar el experimentador le ordena seguir. Para librarse de este compromiso debe de romper sin contemplación con la autoridad.

Varios sujetos rompieron ese vinculo, fueron pocos los que desistieron a continuar. Ya que no querían ocasionar daño y a pesar de la orden del experimentador hizo caso omiso y siguió su conciencia.

Esta minoría reacciono como todos esperamos que actuaran. Mientras que otros a pesar de que objetaban y abogaban por el alumno, continuaban el experimento solo porque el experimentador se lo ordenaba.

Un resultado inesperado

Antes de iniciar la prueba pedí que predijeran los resultados a variedad de personas, psiquiatras, profesores de universidades, estudiantes y a trabajadores normales, todos concluyeron que no llegaría la prueba muy lejos, hay que desertarían al ver el dolor infligido hacia el alumno, pero erraron, ya que de 40 sujetos puestos a prueba, 25 de ellos llegaron hasta el tope de los voltios, después de 3 descargas de 450v el experimentador le ordenaba que pararan, los profesores suspiraban aliviados, otros secaban sus sienes sudorosas, otros se fumaban un cigarrillo y otros mantenían un mínimo de presión desde el inicio hasta el final.

Al principio del experimento se realizó con estudiantes de la Universidad de Yale, y el 60% continuo con la prueba hasta el final, uno de mis colegas invalido este resultado porque decía que los estudiantes de Yale eran personas agresivos e inclinados a competir. Me aseguro de que obtendríamos diferentes resultados con personas comunes.

Se realizo el experimento en personas comunes como: profesionales, empleados, obreros industriales y el resultado fue el mismo. Inclusive se realizó en diferentes países como: Alemania, Italia, Sudáfrica y Australia, el resultado fue mayor que en los pasados experimentos, pero en Múnich fue del 85% el porcentaje de obediencia.

Papel del instinto de Agresión

En una interpretación teórica de esta conducta se afirma que todos tenemos instintos agresivos, según esta teoría cuando se pone a una persona en situación dominante para someter a otro, saldrá sus instintos sádicos y bestiales.

Es importante comparar la conducta de la persona cuando esta sometido por ordenes y cuando se le pone elegir la intensidad de las descargas. Al realizar este experimento, el resultado fue el mismo.

La persona ordinaria que daba las descargas y sometía a su víctima, solo lo hacía por su sentido de obligación (impresión de deberes como conjunto) y no por una tendencia agresiva. La lección fundamental de nuestro estudio es: al desempeñar sencillamente un oficio, sin hostilidad especial de su parte, el hombre común puede convertirse en agente de un proceso terriblemente destructor.

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