Freud Y El Psicoanalisis

FREUD Y EL PSICOANALISIS

La aparición de la psiquiatría dinámica se puede datar en 1775, en un enfrentamiento entre el médico Mesmer y el exorcista Gassner.

La doctrina de Mesmer se puede resumir en cuatro principios básicos:

1.- Existe un fluido físico sutil que llena el universo y forma un medio de unión entre el hombre, la tierra y cuerpos celestiales.

2.- La enfermedad se origina por la desigual distribución de ese fluido en el cuerpo humano, la recuperación se restaura cuando se logra el equilibrio.

3.- Con la ayuda de ciertas técnicas, este fluido puede ser canalizado, almacenado y transmitido a otras personas.

4.- De esta forma se puede provocar crisis en los pacientes y curar las enfermedades.

Sus teorías fueron rechazadas, no obstante había proporcionado el impulso decisivo para la elaboración de la psiquiatría moderna. Pasó casi un siglo antes de que Charcot y sus contemporáneos integrarán los hallazgos de Mesmer en el cuerpo oficial de la neuropsiquiatría.

Charcot como médico interno fue asignado durante algún tiempo a la Salpetriere, viejo hospital que por aquella época era una especie de asilo médico para cuatro o cinco mil ancianas. En 1980 se le encargó la supervisión de una sala especial reservada para un número bastante elevado de enfermas afectadas por convulsiones. Unas eran epilépticas y otras a pesar de la similitud de los síntomas eran histéricas. Se esforzó en hallar un medio de distinguir una convulsiones de otras.

Fue capaz de reproducir experimentalmente parálisis muy semejantes a las postraumáticas en pacientes sanos mediante sugestión hipnótica. Las parálisis hipnóticas mostraron los mismos síntomas que las parálisis histéricas espontáneas y las parálisis postraumáticas. En los últimos años de su vida dirigió su atención a la curación por la fe.

Freud comenzó sus estudios en 1873 y por aquel entonces estudiaba zoología. Trabajó con Karl Claus. Decepcionado con éste orientó sus pasos hacia la Histología y comenzó a trabajar con el fisiólogo Brücke, que le enseñó fisiología y anatomía superior.

En 1883 fue asignado al departamento de psiquiatría donde colaboró con el anatomista cerebral Theodor Meynert. Luego pasó por el doctor Schollz, donde adquirió experiencia clínica con pacientes neurológicos.

Freud rompe con Meynert, que había criticado las teorías de Charcot. Su amigo Breuer, que poseía una de las clientelas más ricas de Viena, seguía confiando en él y derivándole pacientes. En 1900 Freud era considerado como un explorador del inconsciente y alguien capaz de interpretar los sueños, aparecía como el artífice de una revolucionaria teoría sexual y de un método psicoterapéutico.

La publicación en 1900 de La interpretación de los sueños marcó el fin de la neurosis de Freud. En 1904 escribió Psicopatología de la vida cotidiana, 1905; Tres ensayos sobre una teoría de la sexualidad, en 1910 Freud en su obra Sobre un tipo especial de la elección de un objeto en el hombre da a conocer la expresión en el psicoanálisis de Complejo de Edipo que hace referencia al conjunto organizado de deseos amorosos y hostiles que el niño experimenta respecto a sus progenitores entre los 3 y 5 años. En las niñas se llama Complejo de Electra. Se concluye que tanto en el caso del niño como en el de la niña, es durante este período de latencia cuando se consuma la génesis del Superyo o Ideal del Yo. En 1912; escribió Totem y tabú, 1923 publicó El yo y el ello, consideró que la vida mental era producto de la interacción de tres organismos psíquicos: el yo, el ello y el superyo. Reconociendo en el primero la existencia de una parte consciente y la otra inconsciente.

El psicoanálisis es un tratamiento de naturaleza psicológica que se desarrolla entre un especialista y una persona que necesita ayuda debido a sus problemas emocionales.

Para Freud el psicoanálisis es un método de investigación que lleva al descubrimiento y conocimiento de hechos psicológicos nuevos y difícilmente accesibles por otra vía. Empleó la hipnosis en 1887. En 1889 en el caso de Emmy von N. usó la hipnosis con fines catárticos.

No fue hasta 1892 cuando Freud trató por completo mediante la sugestión en estado de vigilia a la paciente Elisabeth von R. Por medio de las interpretaciones y construcciones podía llegar a los recuerdos reprimidos. El procedimiento de la asociación libre se conoció como la regla básica o fundamental del Psicoanálisis.

La técnica catártica descubre un hecho sorprendente: la disociación de la conciencia de un grupo de representaciones que por su implicación afectiva y emocional resultan penosas, dolorosas o desestructurantes, un grupo de ideas que se hace visible a ese método en cuanto se produce una ampliación de la conciencia. Breue postula que la causa de tal fenómeno disociativo es el estado hipnoide; un estado anormal de la conciencia, mientras que Freud se inclina por atribuirlo a un trauma.

Freud con Miss Lucy y sobre todo con Elisabeth uso la coerción asociativa, le confirmó que las cosas se olvidan cuando no se las quiere recordar y no se las quiere recordar porque son dolorosas, feas y desagradables, contrarias a la ética y/o a la estética. Así Freud hizo el descubrimiento de las resistencias, piedra angular del psicoanálisis. Hay un juego de fuerzas, un conflicto entre el deseo de recordar y el de olvidar. La interpretación aparece como el instrumento técnico fundamental.

La teoría de la resistencia se amplía en dos direcciones: se descubre por una parte lo inconsciente con sus leyes y sus contenidos, son todas las fuerzas que dentro del paciente se oponen a los procedimientos y procesos de la labor psicoanalítica. De mayor a menor grado, está presente desde el principio hasta el fin del tratamiento. La causa inmediata de una resistencia es siempre la evitación de algún efecto doloroso como la ansiedad, la culpabilidad o la vergüenza. Uno de los primeros pasos en el análisis de una resistencia es convertirla en ajena al Yo para el paciente, por otro lado, nos encontramos con la teoría de la transferencia, una forma precisa de definir la relación médico-paciente. Es volver a vivir el pasado y no entender el presente por querer entenderlo en función del pasado, también es la fuente de las mayores resistencias durante el análisis. Hay muchos modos de clasificar las diversas formas clínicas de reacciones de transferencia la positiva se refiere a las diferentes formas de apetencias sexuales así como el amor, el respeto o el gusto por el analista. La negativa abarca alguna variedad de agresión en forma de enojo, disgusto, odio o desprecio por el analista. Tanto la resistencia como la transferencia son las que comunican información de vital importancia acerca de la historia, reprimida, del pasado del paciente. La contratransferencia hace referencia al conjunto de reacciones inconscientes del analista frente al analizado.

Raket distingue dos tipos de contratransferencia; por un lado está la concordante es cuando el analista identifica su Yo con el Yo del analizado, y lo mismo para las otras partes de la personalidad, ello y superyo; por otro lado, cuando el Yo del analista se identifica con los objetos internos del analizado, cuando el propio analista prácticamente se transforma en uno de estos objetos internos, hablamos de contratransferencia complementaria.

Para analizar las resistencias hay tres técnicas: la confrontación, clarificación e interpretación. El primer paso para analizar un fenómeno psíquico es la confrontación. El fenómeno en cuestión tiene que hacerse evidente para el Yo consciente del paciente. Este paso da lugar a la clarificación, ambos procedimientos se funden, es aquella actividad que tiende a enfocar nítidamente los fenómenos psíquicos que se están analizando. La tercera es la interpretación, procedimiento que distingue el psicoanálisis de las demás psicoterapias. El analista emplea su propio inconsciente, su empatía e intuición, así como sus conocimientos teóricos, para llegar a una interpretación.

El cuarto paso del análisis es la translaboración, se trata de una compleja serie de procedimientos y procesos que se produce después de presentarse un insight. Se trata de las exploraciones repetitivas, progresivas y elaboradas de las resistencias que se oponen a que el insight conduzca a un cambio.

La alianza de trabajo es la relación racional y relativamente no neurótica entre el paciente y analista que hace posible la cooperación decidida del paciente en la situación analitica. Freud menciona una transferencia aprovechable, una relación que debe establecerse antes de que se le dé una interpretación al paciente. La alianza se forma entre el Yo razonable del paciente y el Yo analítico del analista. La capacidad de establecer una relación múltiple con el analista sólo es posible teniendo un Yo flexible.

Para analizar con éxito la neurosis de transferencia es necesario que el paciente haya formado con el analista una firme alianza de trabajo. La neurosis de transferencia es el medio que permite al paciente llevar a la situación analítica el material reprimido e inaccesible. Los tres procesos no analiticos son la abreacción o catarsis, que está relacionada con la descarga de emociones e impulsos reprimidos. Breuer

...