Introducción Al Ensayo

Las drogas en los adolescentes.

Me gustaría reflexionar sobre el consumo de drogas en los adolescentes.

Lamentablemente tengo un primo, que está involucrado en este tema. Ambos tenemos la misma edad, tuve el placer de conocer a Nico hace algunos años, él como cualquier otro chico jugaba al fútbol en un club de Santa Fe capital, llevaba una vida sana y llena de afecto, o al menos eso parecía. Por la distancia no tenemos la suerte de poder verlo seguido, solo en ocasiones especiales como las vacaciones.

Este año para la época de semana santa, viajamos para ver a mis familiares, y nos llevamos una sorpresa que fue como un balde de agua fría. Ese chico de 14 años que habíamos conocido, deportista y muy alegre, estaba convertido en un adolescente totalmente perdido por las drogas.

Nicolás dejó atrás esos momentos de inocencia y hoy es un “delincuente”, a tal punto que le roba a su propia familia para poder comprar lo que él dice y cree que le hace bien.

Soy una adolescente al igual que Nicolás, y en mi corta vida interpreté las drogas de diversas maneras, siempre adecuado a la edad correspondiente. Recuerdo que hace unos años, tres concretamente, solo conocía esas sustancias que la gente aspira por la nariz, pero era tan ignorante del tema que no conocía los efectos y consecuencias de la misma.

Al tiempo, por los medios de comunicación y por amigos conocí, lo que ellos llaman “porro”, (cigarrillo de marihuana). Aclaro que al decir “conocí”, me refiero a escuchar estos nombres.

Gracias a una charla de drogadicción que tuvimos con un especialista en el tema, pude aclarar mis dudas y comprender esos momentos por los que pasa una persona enferma o adicta.

El tema de Nicolás es en particular un tema que me toca muy de cerca, no solo por la familiaridad sino también porque no puedo entender cómo los padres solo creen que es una enfermedad y que con el tiempo se va a curar solo. Consideran esta adicción parte de la adolescencia, y asi como entró solo, saldrá solo. Es entendible que les pueda dar vergüenza la situación, pero no es entendible que para esconderse de eso, digan que la adicción de Nico sólo es un periodo y no busquen la manera de ayudarlo.

El consumo de drogas tanto en Nicolás como en todos los adolescentes, viene acompañado de problemas personales, ellos creen que consumiendo pueden huir por un momento de la realidad que llevan. Entonces podemos pensar que esa imagen que ellos daban como familia unida y afectuosa, en realidad no era así. Podemos pensar que la vida que llevaban, a Nico le estaba afectando mucho, y la única solución que él encontró, fue empezar a consumir.

En una ocasión que viajamos a Santa Fe, estábamos todos cenando, y el ambiente que se palpitaba no era muy agradable.

Por un lado estaban mis tíos, los cuales por vivir cerca, conocen mucho más a Nico y comparten muchas más cosas. Ellos trataban de integrarlo a las charlas, y eran muy afectuosos con él; por otro lado estaba mi familia, obviamente también lo tratábamos con cariño, pero al desconocer esta “faceta nueva” de Nicolás, nos costaba no mirarlo tan extrañamente y dejar de llamarnos la atención todo lo que podía hacer. Y por otro lado estaban sus padres, dos personas agradables, pero totalmente ignorantes al tema. Los dos sufrían, lógico, su único hijo se encontraba atrapado en esta mierda, la cual ni ellos sabían cómo manejar. Era tanta la vergüenza que sentían de la situación, que ni lo dejaban participar de las charlas. Yo sentía que Nico en un punto dejaba de tenerle respeto a su padre, y eso se convertía en miedo; y todo ese “respeto” que tenía por su padre, no lo tenía por su madre.

Sé que su madre, acarrea problemas psiquiátricos, los cuales también podían influir en él.

Ella, preocupada por la situación de su hijo, quiso sentarse a dialogar conmigo, tal vez por la proximidad de la edad. No pude dejar de asombrarme al escuchar que para ella solo se trataba de algo pasajero, y que ella creía que lo que necesitaba Nico, solo era tiempo. Claramente mi opinión no es la misma, pero hay ocasiones en las que una persona no puede decir lo que piensa, porque no sería bien interpretada o solamente porque el otro no quiere ver la realidad.

Es evidente que los adolescentes no sabemos las consecuencias de las cosas, pero sin embargo las hacemos por diversión o porque realmente lo necesitamos. Pero lo interesante de esto, es saber porqué estas cosas llegan a ser una necesidad. Tanto este tema como el tema del sexo, son temas que requieren mucha importancia. Cualquier adolescente está seguro que sabe de sus consecuencias, o eso cree; y esto me lleva a estas preguntas, ¿Por qué siguen consumiendo? .

¿Realmente saben de esas consecuencias? .

De la charla que mencioné antes que tuvimos con el especialista, puedo destacar algo que nos dijo: - “…Solo logran salir aquellos que tienen valor para asumir su enfermedad, y los que están acompañados por sus seres queridos…”-

Concuerdo en todo sentido con esas palabras, la contención familiar en esta época es lo más importante para los adolescentes, sobre todo por los cambios que transitamos. Es difícil dejar de ser niños y prepararnos para esas responsabilidades que llegan cuando uno se

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