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LAS PRÁCTICAS DE INTIMIDACIÓN EN LA ESCUELA

chuny_05Tesis6 de Marzo de 2014

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LAS PRÁCTICAS DE INTIMIDACIÓN EN LA ESCUELA

Este escrito es producto de los resultados de un estudio que aborda la problemática de la intimidación entre los

niños en edad escolar e intenta describir ésas prácticas, en las escuelas de EGB públicas de la Zona Centro de

la Provincia de Santa Cruz.

La intimidación entre los niños en edad escolar es una problemática poco estudiada en la argentina. En

realidad no se asume el tema con la seriedad que los tiempos demandan. En los últimos tiempos se está

vislumbrando una creciente preocupación de muchos expertos la intimidación que algunos niños ejercen sobre

otros. Y que como plantea Giberti

1

“La incapacidad de los mayores para detectar estos casos propicia el

desborde violento del amenazado”. Puede considerarse como uno de los problemas relacionados con la

violencia escolar, más específicamente con la violencia en la escuela. Tema éste último que tiene amplia

preocupación y desarrollo en la investigación en nuestro país durante los últimos años. Muy probablemente

porque los hechos de violencia escolar en los últimos años han presentado un nivel de espectacularidad nunca

antes alcanzado. Mucho de esto tiene que ver con el trato que los medios de comunicación le otorgan al tema

y producto de la trama escolar que se ha presentado como un escenario en el que tales hechos ocurren, y que

aunque a nivel social no es un fenómeno nuevo, sí, es bastante reciente que los mismos acontezcan en el

ámbito escolar.

El fenómeno de la intimidación se conoce en el ámbito europeo y norteamericano como “bullying”, que

podría traducirse al castellano como “intimidación” o “acoso”. Van der Meer, un psicólogo holandés, definió

la intimidación de la manera siguiente:

"la intimidación es una acción de violencia sistemática, psicológica, física o sexual por parte de un alumno o

grupo de alumnos hacia uno o más compañeros de clase, que ya no están en posición de defenderse a sí

mismos".

Giberti (2000) establece una distinción entre intimidación y amenaza. La intimidación se caracteriza por su

persistencia en el tiempo. Por lo general se habla de "chicos que amenazan a otros chicos" transformando la

intimidación en amenaza, sin embargo se trata de hechos diferentes. La intimidación deriva del verbo temer y

es una acción destinada a acobardar a otro, reducirlo a la pasividad produciéndole temor; se asocia a la

conducta de los matones. Existe diferencia entre la amenaza y la intimidación, la primera puede convertirse

en la segunda cuando se sistematiza y se convierte en recurrente. “Se trata de una relación víctima-victimario

que excede la definición de conflicto: enfocarlo como tal arriesga equivocar el diagnóstico”

2

.

Es un comportamiento prolongado de rechazo social, intimidación y/o agresividad física entre los propios

alumnos que se convierten en víctimas de sus compañeros. Se trata de relaciones de dominio-sumisión en las

que determinados alumnos emplean prácticas abusivas para someter y controlar a otros.

La intimidación se compone de comportamientos directos, por ejemplo, molestar, atormentar, amenazar,

golpear o asaltar, que son hechos por uno o más estudiantes en contra de una víctima. Además de los ataques

directos, la intimidación puede ser más sutil, como, por ejemplo, causar el aislamiento social de un alumno a

través de la exclusión social intencional. Mientras que los niños típicamente se involucran en los métodos más

directos de intimidación, las niñas que hacen este tipo de agresión comúnmente utilizan métodos más

indirectos y sutiles, como, por ejemplo, propagar rumores injuriosos e imponerle el aislamiento social a su

víctima. Sea directa o indirecta la intimidación, su componente principal es que la agresión, física o

psicológica, ocurre repetidas veces, creando así un patrón constante de hostigamiento y abuso.

El maltrato entre iguales incluye comportamientos de acoso, de burlas y ridiculizaciones, amenazas, insultos,

robo de propiedades y agresiones físicas y verbales de diferente gravedad, hablar mal de los demás,

vandalismo, chantaje, prácticas de exclusión o marginación ignorando a la víctima e impidiendo su

1

Giberti, Eva: Formas de violencia escolar. Diario Clarín. 13 de noviembre del 2000. Bs. As.

2

Ibidem.

La intimidación entre los niños en edad escolar.

Sur, el Bullying también existe.

Autor:

Norman.Pautasso

2

participación socialGaray y Gezmet

3

mencionan como una forma de violencia en la escuela “la intimidación y

acoso entre pares” (bullying), y nos remiten a un maltrato que no incluye violencia física, señalando dentro de

éstas conductas a las bromas, motes descalificantes, insultos, discriminación y aislamiento, mentiras y

rumores. Plantean además que en nuestro medio no suele ser identificada como una forma corriente de

violencia por los docentes, las autoras afirman que existe con mucha fuerza en nuestras escuelas y que suelen

sufrir una suerte de “naturalización” como una forma corriente de trato.

”La violencia o la intimidación en la escuela es un comportamiento (directo o indirecto) negativo, dirigido

hacia un alumno y de carácter repetitivo. No es una cuestión de ataques esporádicos dirigidos hacia diferentes

alumnos, sino más bien un acoso sistemático hacia una víctima. Otra característica importante de la

intimidación en la escuela es el desequilibrio del poder entre las personas implicadas: es difícil que la víctima

pueda defenderse, experimentando de este modo una sensación de impotencia y de indefensa frente al

"matón" de la clase. La intimidación ocurre de muy distintas manera: (1) presión verbal, amenazas o burlas;

(2) abuso físico, empujones, patadas y golpes; (3) indiferencia, rechazo; (4) mano dura y a veces chantajes; o

(5) vandalismo

4

.”

En un trabajo de recopilación bibliográfica acerca de la cuestión de la violencia escolar Bejarano y Recio

5

abordan la problemática precisando lo siguiente: “centrándonos un poco más en la violencia escolar, es

necesario saber que la situación de acoso, intimidación o victimización es aquella en la que un alumno es

agredido o se convierte en víctima cuando está expuesto, de forma repetida y durante un tiempo, a acciones

negativas que lleva a cabo otro alumno o grupo de ellos. Por acciones negativas se entienden tanto las

cometidas verbalmente o mediante contacto físico y las psicológicas de exclusión. Por lo tanto, un aspecto

esencial del fenómeno es que debe existir un desequilibrio de fuerzas (D. Olweus, 1998).

Los autores mencionados establecen la siguiente distinción con respecto a otros fenómenos que es preciso

diferenciar de las prácticas de intimidación: “Es necesario valorar y distinguir el problema de la victimización

entre iguales de las malas relaciones entre escolares, aunque ambos cursen con algunas características

semejantes. Las malas relaciones son un problema más generalizado pero menos intenso. Cuestiones como la

indisciplina o el mal comportamiento, son fenómenos perturbadores que alteran la buena marcha de la vida

escolar, pero que no deberíamos considerar verdaderos problemas de violencia”

6

.

El fenómeno de la intimidación en la escuela es tomado con gran preocupación en el contexto internacional,

especialmente en el ámbito europeo en países como Holanda, España, Francia, Suecia, Irlanda, Bélgica, y otro

largo listado de naciones. En el ámbito americano hay una importante producción en EEUU, y “el fenómeno

recién ha comenzado a estudiarse en países latinoamericanos”

7

. Aunque ello no significa que el problema real

no esté instalado desde hace mucho tiempo en las escuelas. Los estudios han pasado de evaluar la incidencia

y grado de la intimidación a estudiar los efectos y las consecuencias emocionales de este trato injusto. Entre

las consecuencias devastadoras para el sujeto infantil se han demostrado baja autoestima, una imagen negativa

de sí mismos y sus relaciones con otras personas son poco seguras. Se han establecido también vínculos entre

pensamientos suicidas, depresión e intimidación. Algunos niños han manifestado pensar en auto lesionarse o

en ejercer violencia contra los demás. Según este estudio la circulación de rumores es la forma más angustiosa

de intimidación en la muestra investigada

8

.

Las prácticas intimidatorias son difíciles de detectar, y las víctimas de las mismas aún más, suele ser más

frecuente identificar

...

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