OPTIMIZANDO EL TIEMPO EN LA SALA DE CLASES

Optimizando el tiempo en la sala de clases.

Sin duda alguna, la tarea de avanzar en los aprendizajes para cumplir con las metas establecidas, no es algo fácil. Si siente que el tiempo se viene “encima”, aproveche la oportunidad como profesor para poner a prueba toda su creatividad, capacidad de organización y trabajo en equipo para cumplir la meta. Aquí le presentamos algunas sugerencias para aprovechar bien el tiempo en la sala de clases.

1.- Cuidar la salud física y mental:

Lo primero, para enfrentar los aprendizajes es cuidar la salud física y mental. Esto puede realizarse mediante:

• Alimentarse en forma adecuada y balanceada.

• Dormir entre siete y ocho horas diarias.

• Evitar estudiar hasta altas horas de la noche.

• Realizar ejercicios físicos.

• Acomodar algunas técnicas y estrategias para estudiar según características personales.

2.- Clima de estudio grato:

Crear un clima de trabajo grato, distendido, ordenado y alegre en aula resulta beneficioso para la apropiación de los contenidos. Para ello, podemos recurrir a sencillas estrategias, como escuchar música relajante que pueda evocar algunos recuerdos y, junto con ello, estimular la memoria y facilitar la concentración. Está comprobado que este sencillo recurso ayuda a “fijar los conocimientos”.

3.- Buena distribución del tiempo:

• Plantear metas semanales de aprendizaje.

• Intercalar adecuadamente tiempos de estudio con períodos de descanso, especialmente en establecimientos que contemplen jornada escolar completa.

• Recalendarizar horarios. Estos deben ser realistas y flexibles, acorde a las características del alumnado. Tres horas seguidas de Lenguaje, por ejemplo, para “recuperar” tiempos, más que un aprovechamiento y aprehensión de conocimientos puede conducir a un mayor porcentaje de fracaso en los estudiantes.

4-. Ejercicio físico y actividades recreativas:

El ejercicio físico y las actividades recreativas no debieran estar ausentes. Muy por el contrario, pues ayudarán a los alumnos a predisponerse de mejor forma para los aprendizajes efectivos. En estas actividades, sin duda alguna, se puede recurrir a los propios alumnos, apoyados por los profesores de Educación Física.

A modo de ejemplo: Un baile, organizado y creado por los alumnos resultará altamente beneficioso para distenderse y luego volver al trabajo.

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