Procesos Psicológicos Pensamiento y Lenguaje

Universidad de Guadalajara[pic 2][pic 3]

Centro Universitario de Ciencias de la Salud

Licenciatura en Psicología (LPGI)

Procesos Psicológicos  

Pensamiento y Lenguaje  

Profesor: Víctor Nodal

Alumna: María Fernanda Nuño Curiel 215388668

8 de octubre del 2018

Guadalajara, Jalisco.

Introducción.                                                                                                                     Los seres humanos somos seres pensantes y razonables, que al evolucionar, pudimos mejorar nuestras condiciones y pasar de ser simples animales a ser seres capaces de pensar, razonar,  descubrir métodos nuevos para ampliar  nuestras oportunidades de supervivencia y así lograr colocarnos en el lugar que ahora ocupamos; estar por encima de los animales debido a la capacidad de reflexión que tenemos y por qué pudimos desarrollar el lenguaje, una característica que nos diferencia notablemente de los animales, pues nos proporcionó un método más efectivo y rápido para mejorar la comunicación y las relaciones entre la especie humana. El pensamiento y el lenguaje forman parte de los procesos psicológicos básicos del ser humano, podríamos considerarlos como unos de los más importantes puesto que, nos permiten avanzar y mejorar nuestras capacidades de comunicación, además de que se relacionan y van de la mano de los demás procesos psicológicos. Para Vygotsky (1896-1934), el pensamiento y el lenguaje son fundamentales para el desarrollo del ser humano pues son un medio de comunicación importante, además, de que nos facilitan el intercambio de conocimientos y aprendizajes;  pero para poder comprender en qué consisten estos procesos y cómo influyen en nuestro desarrollo, así como su importancia en el mismo, es necesario que comprendamos primero que es un proceso psicológico, por lo que me daré a la tarea de explicarlo, y posteriormente profundizar en que consiste el pensamiento y el lenguaje.

1Los procesos psicológicos constituyen elementos fundamentales en el estudio de la psicología. Son los procesos que permiten a la persona tomar conciencia de sí misma y de su entorno, se encuentran en el origen de cualquier manifestación conductual y hacen posible el ajuste del comportamiento a las condiciones y demandas ambientales. (Fernández-Abascal, Martin & Domínguez, 2001)

Como nos hacen mención Fernández et al (2001), los procesos psicológicos juegan un papel fundamental para el desarrollo humano y para regular nuestro comportamiento, son una herramienta importante para llevar a cabo las acciones cotidianas, así como las actividades y procesos cognitivos y los activadores, que son los que nos llevan a actuar de tal o cual manera según la situación y contexto en el que nos encontremos o simplemente en lo que requerimos realizar en un momento especifico.

Una vez clarificado el concepto de proceso psicológico y entendido en que consiste éste, podemos enfocarnos en los procesos de pensamiento y lenguaje, estudiar en qué consisten, como se ven involucrados en el desarrollo y comportamiento de los seres humanos y por qué son importantes.

Desarrollo.                                                                                                                            El pensamiento y el lenguaje son procesos psicológicos interrelacionados entre sí, pues uno surge a partir del otro y se complementan mutuamente, ya que se desarrollan paralelamente. El lenguaje depende del pensamiento y el pensamiento depende, en cierto grado, del lenguaje; citando a Vygotsky: “La experiencia nos enseña que el pensamiento no se expresa con palabras, sino que más bien se da cuenta de sí mismo a través de ellas”. Ya que para él, el lenguaje es esencial para el pensamiento, pues sin él, este no podría ser transmitido y entendido por los demás individuos y por nosotros mismos. La relación que existe entre el pensamiento y el lenguaje, implica un aspecto fundamental para nosotros los seres humanos, pues son estos los que nos dan la capacidad de pensar y expresar nuestras ideas, sentimientos, conocimientos y aprendizajes; lo que nos permite ir ampliando los mismos y transmitirlos de generación en generación.

El pensamiento es la capacidad que tenemos para formar ideas y representaciones mentales y de asociarlas unas con otras; es un proceso cognitivo que nos permite elaborar nueva información a partir de la que ya tenemos y nos ayuda a resolver problemas, utilizando la razón, la capacidad de reflexionar que poseemos, ya que esta es considerada como el pilar fundamental del pensamiento. El razonamiento es la base del proceso de pensar, y este se origina, según sus bases biológicas, en la corteza prefrontal del lóbulo frontal, que es el área implicada en unificar la información que recibimos desde otras zonas del cerebro ayudándonos a darle un sentido y un entendimiento.  Existen dos tipos de razonamiento que en conjunto nos ayudan a crear el pensamiento. Uno es el razonamiento inductivo, son reflexiones basadas en experiencias individuales, las llevamos a cabo con cierta incertidumbre de saber si estamos haciendo lo correcto o no, si debemos actuar de tal o cual manera, nos hace dudar en cierto momento de comportarnos de una forma u otra. Debido a esta incertidumbre que la inducción causa en los seres humanos, existen heurísticos (atajos mentales) que nos ayudan a replantearnos la situación y nos ayudan a resolverla de una manera más sencilla y rápida cuando nos encontramos en una situación donde  no sabemos de qué manera responder ante ella, son cuatro tipos, está el de representatividad, es decir, que representamos algo mediante la comparación de características y cualidades de la situación, así como sus similitudes para inclinarnos por la que mejor nos parezca; disponibilidad, realizamos juicios dependiendo de la facilidad y rapidez con la que relacionamos situaciones y aspectos guardados en nuestra memoria; simulación, nos permite construir o imaginar modelos mentales ya sean futuros o pasados para tomar una decisión, es decir que imaginamos la probabilidad de que algo ocurra y como según la manera en que la llevemos a cabo; y por último el anclaje y ajuste, que nos permite hacer juicios basados en un punto de referencia, en alguna experiencia previa, y posteriormente anclarlo, es decir, tomar un punto de partida adecuado a la situación previa. Y está el razonamiento deductivo, este a diferencia del inductivo, no es necesario experimentarlo personalmente, si no que podemos inferir la situación a partir de premisas dadas (puede ser la experiencia de terceros, información previa que se conoce, algo ya establecido, etc.) que nos ayudan a llegar de algo general a lo particular y saber de qué manera responder ante una situación. El razonamiento deductivo nos ayuda a tomar decisiones concretas y seguras, sin dejar cabida a la duda o incertidumbre, es un razonamiento más sencillo, más obvio, en el cual influyen mucho la posibilidad y las preferencias por ciertos aspectos que nos facilitan el tomar la decisión correcta, sin necesidad de generarnos un conflicto.  

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