Resumen de terapia centrada en la personalidad

Trabajo Terapia Centrada en la Persona de Carl Rogers

En el siguiente texto se presenta algunos términos importantes realizados por Carl Rogers quien ha ejercido una influencia muy importante para la Psicología y la Psicoterapia, de igual modo que en la educación. A él se le atribuye el aporte de la terapia centrada en la persona, la realización de los grupos de encuentro, la fundación que se realizó junto con el apoyo de otros psicólogos, de la psicología humanista, además de la realización y dirección de los primeros  grupos centrados en la persona dedicados a una resolución de conflictos políticos internacionales.

En el desarrollo de su vida profesional, sus intereses se enriquecieron al extenderse no solo a la psicoterapia individual y la terapia de grupos, sino también a los sistemas educativos, sociales y gubernamentales, los conceptos filosóficos de Carl Rogers siempre se enfatizaron en el optimismo y el humanismo que los caracterizo desde un principio.

A continuación se muestran algunos conceptos más destacados y catalogados como los principales dentro de la terapia centrada en la persona, los cuales son:

La Esfera de la Experiencia:

Se plantea que existe una esfera de la experiencia propi de cada ser humano que contiene  todo lo que sucede dentro del organismo de una persona en cualquier situación y este encierra la posibilidad de acceder a la conciencia.  “…esto comprende los sucesos, las percepciones y las sensaciones de las cuales la persona no tiene conciencia, pero podría adquirirla si se concentrara en esos datos empíricos. Se trata de un mundo personal y privado que corresponde o no a la realidad objetiva y observada…” (Rogers )

Dicha esfera de la experiencia es selectiva, subjetiva e incompleta. De algo está sujeta a limitaciones tanto de tipo psicológico, como bilógica. Dicha experiencia se centra en las preocupaciones o intereses más inmediatos, excluyendo a todo lo demás.

La esfera de la experiencia tiene la representación del mundo real, aun cuando no se parezca al mundo real que perciben las demás personas, cada uno tiene una recepción del mundo real, única y diferente.

El Self Real (Yo real) - El Self como proceso:

Se manifiesta que dentro de la esfera de la experiencia se encuentra el self, que es una entidad inestable y mutable. No obstante si se observa en cualquier momento, tiene la apariencia de estable y predecible, ya que para poder obsérvala de algún modo se toma en cuenta que queda como “congelada” una parte de la experiencia. De este modo “… Rogers concluye que no hablamos de una entidad caracterizada por un crecimiento lento o por un aprendizaje gradual…”   (Rogers). De esta manera se puede concluir que cualquier aspecto que se modifique estaría alterando la configuración completa de un conjunto. Se asemeja al self a una Gestalt organizada y coherente que está sujeta a un proceso de constante formación y reformación a medida que van cambiando las situaciones.

El self no se puede captar mediante imágenes fijas. Por lo que se trata de una entidad que está en constante cambio y movilidad, dicha imagen no revelara nada acerca de su inestable naturaleza.

Hay que tener en cuenta que muchos se refieren a la self para señalar una parte de la identidad personal a la que caracteriza la estabilidad y la inmutabilidad. Pero no obstante se hace la aclaración de que el significado que le da Rogers al self es contrario a esa afirmación. El self al que se refería Rogers es un self de proceso, un sistema que por definición, cambia constantemente. El énfasis que se hace del cambio y la flexibilidad de este, es donde se radica la originalidad de la teoría rogeriana. A partir de un concepto llamado fluidez, Rogers planteaba la idea de que los seres humanos no solo son capaces de conseguir un crecimiento y desarrollo personal, sino que esos cambios positivos constituyen una progresión natural y esperada, dicho self o concepto sobre sí mismo, es la forma en que las personas se entienden con base en sus experiencias, vivencias y experiencias del futuro.  

Self Ideal (Yo ideal):

Partiendo del concepto de “Self” como proceso mutable e inconstante, donde se establece el planteamiento de que los seres humanos además de pasar por un transcurso de progreso y crecimiento, aguardan por dicho proceso que viene de forma natural. El “Self” se puede ver como la manera en que cada persona se comprende a sí misma, con base en las vivencias experimentadas en los diversos escenarios y momentos de su vida, ingresa también con particular relevancia el aspecto temporal, cómo el pasado y presente son fuentes de experiencias cada una en su momento que inciden en como la persona se reconoce y a vez median de alguna manera la forma en que crean expectativas para el futuro. El “Self” puede tomarse como el autoconcepto del individuo, se le considera según Tomas, U (2015) como “una estructura de la personalidad”, al estructurarse como una serie organizada de percepciones subjetivas sobre sí mismo, este puede cambiar, adoptar nuevos elementos, relegar otros, pero siempre será caracterizado por el mantenerse integrado, organizado y consistente, por tanto dicho autoconcepto permanece a través del tiempo, hasta que se modifica, es el armazón psicológico a través del cual las personas descifran su propia realidad, su mundo y a sí mismos.

Dado el elemento de la temporalidad, el “Self” no sólo se limita a la visión que tiene el individuo sobre sí mismo en el presente, también se proyecta a futuro y es ahí donde se propone el “Self Ideal” como su nombre lo indica es idealizar características, situaciones, habilidades que la persona desearía poseer en un momento dado, ahí se incluyen todas las percepciones que se tengan sobre algún elemento y que sean consideradas altamente importantes para el autoconcepto. Además de los significados que la persona le adjudique a dichas cosas.

Si bien las ideas de cómo se quiere llegar a ser, puede traer consigo beneficios y crecimiento personal, social, familiar, laboral, etc. Se debe tener muy en cuenta que si “Self Ideal” llega a estar en total contraposición con el “Self Real”  la persona estará insatisfecha, inconforme y dicha situación desembocará en problemas neuróticos lo afirma Rogers, C. (1956). Se puede afirmar que si la visión real de la persona es muy diferente a la visión de sí mismo que quiere lograr, se entra a hablar de signo negativo de insatisfacción, también puede darse que el “self ideal” esté en contravía de los comportamientos y valores actuales o reales del sujeto, lo que estancaría el desarrollo de la persona, a modo de ejemplo si un deportista siempre se ha destacado en su grupo de entrenamiento por su alto desempeño y ha ganado cada torneo local al que ha asistido, él se idealiza a sí mismo como un hombre exitoso, que siempre debe ganar y estar en el primer nivel, ese es su self ideal, es la manera en la que él siempre quiere estar y es su forma de proyectarse en el futuro, como un absoluto ganador. Un día el deportista pierde un campeonato, y no gana ninguna medalla, se ve en ese momento como un perdedor, ese es su self real, es su realidad, lo que le está ocurriendo, se aprecia claramente que su self ideal de siempre ganar y ser el mejor, está contrapuesto a su self real donde perdió la competencia, lo que lleva a que él no acepte su realidad de fracaso y siga empeñado en verse de forma futura como un ganador, entonces sus esfuerzos y atención se dirigen a esa visión idealista, es así que decide seguir en el deporte mas no volver a participar en competencias, es así que no se generan esfuerzos para comprender su realidad concreta y entender que no siempre se puede ganar.

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