El Hombre De La Religion O La Religion Del Hombre

Introducción

El hombre admite una cierta relación con la divinidad, no en virtud de su animalidad sino de su racionalidad, dotado de inteligencia percibe la existencia de un ser distinto y superior a él, hay en su mente una cierta conciencia de su origen y de su destino último. Es por eso que el hombre expresa de diferentes maneras su ser religioso, desde los inicios de la historia hasta nuestros días; estas expresiones se pueden observar mediante creencias y comportamientos religiosos como son oraciones, sacrificios, cultos, penitencias, meditaciones entre otras

La religión es una manifestación específicamente humana, no se ha dado en ningún otro ser vivo sobre la tierra.

El origen de la religión se remonta, generalmente, al Antiguo Cercano Oriente, y puede clasificarse en tres categorías básicas: Politeísta (creer en muchos Dioses), hay habitualmente un dios responsable de la creación. Panteísta (creer que todo es Dios) una doctrina en la cual se iguala a Dios con las fuerzas y leyes del universo, y monoteísta (creer en un solo dios), dios está considerado por unanimidad como el padre, consejero y preservador del mundo. El Ateísmo es realmente una creencia moderna que resultó del período de la Ilustración del siglo XVIII (Banagan, 2013).

El hombre es religioso por naturaleza está presente inclusive en los ateos y en quienes niegan la existencia después de la muerte, solo que en tales casos esta expresada negativamente.

Pero el hombre es un ser dotado de libertad y ante Dios puede responder si o no, aceptarlo o rechazarlo, amarlo, odiarlo o permanecer indiferente, con la consiguiente plenitud o frustración de su ser y de sus ansias de verdad o bondad y de perfeccionamiento o superación propia.

Desarrollo

Con frecuencia se habla de religión y se dice que una persona es muy religiosa o que no cree en una religión.

La religión es el resultado del esfuerzo del ser humano por contactar con "el más allá". La experiencia religiosa proporciona explicaciones globales e interpretaciones acerca del mundo. Las religiones tradicionales se basan en una intensa ceremonia de intercambio de los vivos con sus ancestros y a su vez con el mundo espiritual que les rodea. La gran mayoría de religiones creen que el mundo y la humanidad fueron creados por una fuerza o ser superior. El hombre nacido como todos los animales con un miedo instintivo, se ha visto en la necesidad de creer que hay algo o alguien más poderoso y grande que el mismo.

Todos los seres, incluido el hombre, llevan en su seno de forma más o menos desarrollada un sentimiento o percepción de la influencia y dependencia de la naturaleza. La esencia de la religión para Bakunin es ese sentimiento de absoluta dependencia en el individuo frente a la naturaleza eterna y omnipotente. El miedo sería uno de los sentimientos predominantes en la vida animal, y ese miedo instintivo se encuentra en el origen de la religión (Vidal, 2013).

La religión en diferentes épocas de la historia ha resultado ser un método para someter al hombre y evitar revelaciones, en un principio no era más que miedo a seres que los castigaba si no cumplían con el mandato ordenado, impuesto por algún elegido. La idea de la divinidad es una creación del hombre para establecer un respeto por la ley y la moral, para la vida en sociedad.

Decía Marx que a los pensamientos Hegel sólo había que ponerlos boca abajo para que adquirieran un sentido materialista. Lo mismo tendríamos que hacer con la afirmación fundamental de la teología cristiana y católica: Dios hizo al hombre a su imagen y semejanza. Invirtiéndola: El hombre hizo a Dios a su imagen y semejanza. Dios es una imagen del hombre. Sin duda ese hombre está dotado de poderes que no posee el hombre en medida en que los posee Dios.

Ateísmo

El hombre posee imaginación, ha creado representaciones “fantasmáticas”, imágenes de potencias, de entes extra naturales, que llegan a ser creídos poderes y personas reales. Ser parte de las personas que creen en Dios, es ser parte de las personas que creen en seres imaginarios. Y quien cree en seres imaginarios es una persona irracional.

Por ello, la citada definición del hombre como animal “racional” mercería reconsiderarse. Si se entiende la racionalidad como la capacidad del pensamiento para operar lógicamente, u obtener conclusiones nuevas de datos preexistentes.

El ateo evalúa y sopesa el papel que ha desempeñado la religión en toda la historia de la humanidad. La pregunta que debemos hacernos ahora es ¿La religión pertenece al hombre o el hombre pertenece a la religión?, El ateo está encerrado en su cuarto de estudio, sólo tiene libros

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