CONSTITUCIÓN DEL MINISTERIO AGROPECUARIO EN COLOMBIA

CONSTITUCIÓN DEL MINISTERIO AGROPECUARIO EN COLOMBIA

El Ministerio de Agricultura fue creado por la ley 25 del 8 de octubre de 1913 como "Ministerio de Agricultura y Comercio", por un proyecto de ley presentado al Senado por Rafael Uribe Uribe. El primer Ministro de Agricultura y Comercio fue Jorge Enrique Delgado, quien asumió las funciones el 7 de agosto de 1914, bajo la presidencia de José Vicente Concha.

Al asumir la presidencia Eduardo Santos en 1938 sancionó la ley 96 por medio de la cual fusionó el Ministerio de Industrias y Trabajo con el Ministerio de Agricultura y Comercio en el nuevo "Ministerio de Economía Nacional" y nombró como titular a Jorge Gartner. La institución permaneció nueve años hasta que la Ley 75 del 24 de diciembre de 1947 dividió el Ministerio de Economía en dos: Ministerio de Industria y Comercio y Ministerio de Agricultura y Ganadería.

Durante las décadas siguientes la población pasó a concentrarse en las ciudades. En 1960 se expidió la ley 135 que dio inicio a la reforma agraria creando el Instituto Colombiano de la Reforma Agraria (INCORA). Esta ley fue complementada por la ley 1 del 26 de enero de 1968.

La ley 101 del 23 de diciembre de 1993 estableció el desarrollo agrario y pesquero en el país de acuerdo con los artículos 64, 65 y 66 de la Constitución. En complemento a esta ley se dictó el decreto 1279 del 22 de junio de 1994 a través del cual se reestructuró el Ministerio de Agricultura y se le dio el nombre actual de "Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural". El Decreto 2478 de 1999 regula el funcionamiento del Ministerio, establece su organización actual y da pautas para el funcionamiento de las entidades y corporaciones adscritas.

POLITICAS AGROPECUARIAS DEL GOBIERNO SANTOS

La nueva política agraria de Gobierno del presidente Juan Manuel Santos: la Política de Restitución de Tierras; la formalización de la propiedad agraria en Colombia y la política de desarrollo rural.

En materia de restitución y titulación dijo que no se entregarán tierras peladas. “Queremos, en lo posible, que estos procesos vayan acompañados de políticas de acompañamiento en lo rural que hagan más digna y sostenible la vida de los campesinos en Colombia”, anotó el ministro en el marco de su presentación en la Mesa que tuvo como primeros temas el subsidio integral de tierras y el Programa de Desarrollo Rural con Equidad, DRE.

Sobre el DRE el ministro Restrepo reiteró que los cambios que se le introdujeron al Agro Ingreso Seguro son sustanciales y no simplemente de “etiqueta o de rótulo al programa”.

El asesor para los Diálogos Sociales del Vicepresidente de la República, Angelino Garzón, Oscar Gutiérrez, dijo a nombre de él que “para el Gobierno Nacional la instalación de la Mesa de Concertación Campesina y Agraria constituye la puesta en práctica de diálogo social que el Gobierno de Juan Manuel Santos ha venido impulsando como estrategia de entendimiento y fortalecimiento de las relaciones con el sector campesino y agrario organizado”.

Dijo que la Mesa tiene la inmensa responsabilidad de iniciar su gestión con la mirada puesta en las políticas públicas para el sector rural y dar su aporte en los programas dirigidos a beneficiar prioritariamente a la población de pequeños y medianos productores, a la compra de tierras y al apoyo de proyectos productivos que permitan el cultivo de alimentos de la canasta básica.

Luis Alejandro Jiménez, de la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos, ANUC, destacó el nuevo instrumento de diálogo con el gobierno y dijo que la Mesa “es la oportunidad de darle salida a los más críticos y urgentes problemas que vive el sector campesino que tiene el derecho de intervenir en la discusión de los temas de política que se trazan”.

Anunció el pago de un jornal para los campesinos menores de edad que estudien y no trabajen.

Otro punto que destacó es el apoyo para el sector agropecuario que tiene que ver con los insumos. Se facilitará la producción de los mismos en el país para bajar los costos, al igual que la importación también a costos más bajos.

De todo el paquete vale la pena destacar el proyecto de restitución de tierras cuya meta es devolver a sus legítimos propietarios unos dos millones de hectáreas de los 5.5 millones que han sido calculados como el total del despojo durante los últimos 12 años por parte de la Comisión de Seguimiento a la Política Pública sobre Desplazamiento Forzado. Sobre las cifras mismas hay un gran debate y crece la expectativa por los resultados que en éste sentido presentará la Comisión de Seguimiento a finales del mes de octubre como resultado de su tercera encuesta nacional de verificación sobre la situación de los derechos de la población desplazada. Precisamente y hay que decirlo sin reservas el Gobierno de Santos acierta poniendo en el centro de la superación del estado de cosas inconstitucional, la restitución de la propiedad de la tierra a quienes fueron despojados, durante los últimos años. En el comienzo del debate se han anotado dos críticas principales, una de las cuales ya fue aceptada por el Gobierno y se espera que sea incorporada en la discusión que se realizará en el Congreso de la República. Se trata de ampliar el articulado de tal manera que se contemplen mecanismos judiciales como rebaja de penas a quienes decidan entregar tierras que fueron despojadas ilegalmente a los desplazados. Este punto es importante puesto que como lo ha señalado el propio ministro de Agricultura Juan Camilo Restrepo, hay que evitar a toda costa que el proceso pueda derivar en nuevas formas de violencia. El Gobierno se ha comprometido a introducir nuevos mecanismos de justicia transicional que permitan evitar estas nuevas confrontaciones.

SUBSISTEMA DE TRANSFERENCIAS DE TECNOLOGIA

El Sistema Nacional de Transferencia de Tecnología Agropecuaria (SINTAP), fue creado como un instrumento de política agropecuaria, cuyo objeto es fomentar la producción nacional a fin de lograr el autoabastecimiento alimentario i el mejoramiento de los niveles de rendimiento social y económico del sector rural, mediante la modernización y actualización de la tecnología aplicable a la explotación agrícola, pecuaria, forestal y piscícola.

Para lograr este objetivo, el SINTAP busca ordenar el proceso de validación, ajuste, transferencia y adopción de la tecnología agropecuaria; coordinar y racionalizar la acción de las entidades públicas y privadas que transfieren

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