Deuda Externa Argentina
Belu150410 de Noviembre de 2014
4.037 Palabras (17 Páginas)444 Visitas
Trabajo práctico:
Deuda externa
Profesora: María Fernanda Bonelli
Integrantes: Micaela Barberis, Priscila Mercorelli, Sol Spano y Belén Gastaldo.
5to ECO - ISA
Año 2014
Índice:
Historia 3
Crisis de 1873 3
Crisis de 1890 3
De 1892 a 1900 4
Perón y la deuda externa 4
Argentina y el Club de París 4
Argentina y el FMI 5
Desde 1976 en adelante 5
Plan Brady 6
De 2011 a 2014 6
Camino al default 8
La estabilización económica 8
El desgaste del modelo 8
El blindaje 9
El megacanje 9
El corralito 9
Default y devaluación 10
Reestructuración de la deuda 12
Primer canje 12
Cancelación de la deuda con el FMI y con España 12
Reapertura del canje en 2010 12
Pagos Boden 2012 13
Acuerdo con el Club de París en 2014 13
Conclusión 14
Historia:
• Crisis de 1873:
Durante 1867 hasta 1873 comenzó a convertirse la moneda gracias al aumento de capital externo de empréstitos contratados por el gobierno, logrando la expansión del crédito bancario y, así, impulsar la actividad comercial. Además aumentó el gasto público y las importaciones (que crecieron en diferente cantidad que las exportaciones).
En ese momento, Argentina no podía pagar, aunque recibiese capitales del exterior y el ingreso de capitales cesó por efecto de la depresión europea, esto provocó una disminución de la existencia de oro. Para solucionar el problema hubo que suspender la contratación de nuevos créditos en el exterior, dejar de convertir los billetes del Banco, disminuir los sueldos de empleados y reducir el personal administrativo.
Para fines de 1870, la crisis económica fue superada, permitiendo el comienzo de un nuevo periodo de prosperidad y expansión económica.
• Crisis de 1890:
Durante la década de 1880, aumentó fuertemente la inversión extranjera en Argentina, especialmente por parte de inversores británicos, quienes poseían un alto interés en el ámbito ferroviario. Dichos inversores tuvieron demasiada confianza, prestando una gran suma, para darse cuenta que no lograrían recuperarla sino hasta luego de varios años, cuando los proyectos lograran crecer lo suficiente.
Al crecer la deuda, hubo una creciente expansión monetaria que logró la depreciación del papel moneda, que disminuyó la rentabilidad de inversores y paralizó la entrada de capital. Gracias a esto, los inversores británicos se “asustaron” y decidieron invertir en nuevos mercados.
En 1889, se comenzaba a notar graves problemas para pagar la deuda, lo que alertó a la Bolsa y provocó el aumento en el precio del oro, así como la desconfianza en el gobierno argentino. Ante esta situación Baring Brothers presentó una oferta, en la cual el gobierno argentino debía transformarse en austero, lo que haría a Celman perder el apoyo de la sociedad.
Luego de ciertas disputas con la Unión Cívica, Celman optó por no seguir las políticas austeras propuestas por Baring Brothers y J. E. Uriburu, lo que desembocó en un aumento desproporcionado del oro y en la finalización de negociación con los inversores europeos.
Con la Revolución del Parque, Celman finalizó su mandato y fue reemplazado por C. Pellegrini, quien logró reabrir las negociaciones y logró reducir las condiciones a solamente reducir la circulación monetaria.
• De 1892 a 1900:
Continuando la negociación con los bancos acreedores iniciada por Pellegrini, J. J. Romero propuso a los bancos acreedores que Argentina pagara su deuda de acuerdo con la capacidad real de pago, sin pedir préstamos, logrando un acuerdo en el cual los intereses de varios títulos argentinos se reducían por cinco años. Durante este periodo el gobierno argentino se comprometió a pagar cada un año 1.565.000 libras al Banco de Inglaterra, para que el mismo la distribuyera entre los tenedores de bonos. Este acuerdo funcionó porque tuvieron en común la voluntad de mantener el comercio y la inversión entre ellos y logró resolver el problema de las deudas provinciales y puso fin a las garantías ferroviarias otorgadas por el gobierno argentino.
Las inversiones británicas en Argentina no se recuperaron hasta 1904 debido a la crisis de 1890 y los préstamos al gobierno registraron una declinación pronunciada mientras el sector agro-ganadero experimentó un aumento en los valores y volúmenes de sus exportaciones.
Gracias a una petición de Roca durante su segunda presidencia, Pellegrini redacto un proyecto de unificación de la deuda pública externa, pero al final, Roca decide no apoyar esta propuesta.
• Perón y la Deuda Externa:
Perón inaugura la recuperación de la deuda externa argentina demostrando el poder e independencia en la toma de decisiones destacando que el país deudor se convertía en acreedor.
El período de 1947 al 51 indico una tendencia a la baja de las tasas de interés en consonancia con la estabilidad económica, y una disminución de la deuda externa gracias a las grandes divisas por el fin de la Segunda Guerra Mundial y el superávit comercial. Se empieza a crear entonces la situación inédita en la historia argentina del préstamo de Baring Brother de 1824.
En 1949 el crecimiento del mercado interno nacional fue más acelerado, apareciendo la inflación que había sido casi inexistente, por lo que el gobierno peronista se acerca a Estados Unidos y acuerda con Argentina un préstamo de 125 millones de dólares destinados a saldar las deudas con los comerciantes norteamericanos.
• Argentina y el Club de Paris
Una vez que Perón fue derrocado por Aramburu se intentó reactivar el comercio, para lo que se necesitó pedir prestado a Europa nuevamente, pensando en devolverlo dentro del plazo de un año, lo cual se vio imposibilitado, y por eso, los acreedores de la Argentina se reunieron en Paris para conversar sobre la refinanciación de la deuda externa argentina, creando así el Club de Paris.
• Argentina y el FMI:
Luego de la Revolución Libertadora, la condición económica empeoró por el exceso de gastos sobre la producción nacional, lo que produjo déficits comerciales y la reducción de inversión. Por esto las reservas en oro y divisas se redujeron hasta tal punto que la deuda superaba a las reservas en el Banco Central.
Para lograr revertir esta situación, se acudió al FMI quien determinó que la situación económica y la aplicación de un programa de estabilización no eran muy rentables por la debilidad política del gobierno y por la falta de comunicación y diálogo que evitaba un acuerdo entre las partes para ajustar el gasto económico.
Para acceder a la asistencia solicitada, Argentina debió modificar su política económica y obtener la convertibilidad a dólares de sus saldos comerciales favorables con los países acreedores europeos nucleados en el Club de Paris.
El FMI actuó como intermediario entre Argentina y Europa Occidental donde se logró fijar modos y tiempos de pago, y además logró que los tratos y condiciones monetarias no cambiaran. Con esto Europa notó la intención de Argentina de pagar su deuda en los mismos términos ya pactados. Con este acuerdo el FMI otorgó 329 millones de dólares como ‘’Plan de Estabilización Económica’’ que permitió la unificación y liberación del mercado cambiario argentino. Con el préstamo del FMI, se pudo salir de la crisis económica, logrando que el Estado se ocupara de otros asuntos.
Debido a los conflictos sociales y la renuncia de Alsogaray surgieron varios vencimientos de deuda y la fuga de capitales hubo que pedir un nuevo préstamo que excedió el límite convenido y el FMI declaró que la Argentina violó los acuerdos firmados.
• Desde 1976 en adelante:
La dirección económica del país redujo los niveles de proteccionismo industrial, mientras que se encaró un proceso de apertura para la llegada de capitales extranjeros. Se destacan dos medidas en particular: la “reforma financiera” que liberalizó la actividad y el sector bancario y la otra medida fue la “la tablita” un instrumento donde se fijaba cual sería la relación entre el peso y el dólar para cada día de los siguiente ocho meses. Es decir, el gobierno ofrecía una información anticipada que permitía saber cuál sería el porcentaje de devaluación de la moneda argentina.
Estas medidas permitieron el surgimiento de la “bicicleta financiera” que consistía en aprovechar la diferencia que existía entre las tasas de interés locales e internacionales. El negocio se basaba en solicitar créditos al exterior, cambiar las divisas ingresadas al tipo de cambio sobrevaluado y colocar ese dinero en el mercado financiero, así finalmente reconvertir esos pesos en divisas lo cual generaban ganancia. En Argentina el crédito internacional se utilizó principalmente con fines especulativos, a diferencia de otros países.
Para 1980 el fracaso de la política económica se sumó un alza en las tasas de interés internacionales. La crisis bancaria estalló en marzo cuando el gobierno decidió cerrar el Banco de Intercambio Regional, a los pocos días se dispuso el cierre de todos los grandes bancos y la política de liquidación continuó todo el año. En 1981 la moneda tuvo que ser devaluada, lo que ponía al borde de la quiebra a grupos económicos locales y empresas multinacionales.
El presidente del Banco Central resolvió la implementación de un seguro de cambio para permitir
...