El Museo Nacional de Antropología

INTRODUCCION

El Museo Nacional de Antropología e Historia es uno de los museos mas importantes de México y América Latina , fue construido entre 1963 y 1964 en el Bosque de Chapultepec lo mando a hacer el presidente Adolfo López Mateos, quien lo inauguró el 17 de septiembre de 1964.

Actualmente, el museo tiene 23 salas de exposición permanente, 1 sala de exposiciones temporales y dos auditorios. Además tiene el acervo de la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia.

Las salas permanentes están en la parte de arriba. Abajo están las salas dedicadas a la introducción a la antropología y a las culturas arqueológicas del territorio mexicano, desde el Poblamiento de América hasta el Período Posclásico mesoamericano. En el segundo piso se encuentran las 11 salas de etnografía, donde se exponen muestras de la cultura material de los pueblos indígenas que viven en México en la actualidad.

Las salas de antropología y arqueología son:

• Introducción a la antropología

• Poblamiento de América

• Preclásico en el Altiplano Central

• Teotihuacán

• Los Toltecas y su época

• Mexica

• Culturas de Oaxaca

• Culturas de la Costa del Golfo

• Maya

• Culturas del Norte

• Culturas de Occidente

La colección del Museo Nacional de Antropología está conformada por muchas piezas arqueológicas y etnográficas que vienen de todo México.

Este museo tiene una arquitectura muy hermosa grande y muy elegante.

En este patio hay un estanque de lirios y una fuente con forma de paraguas o sombrilla, sostenida por un pilar central alrededor del cual se precipita una cascada artificial. Las salas de exhibición están rodeadas de jardines, muchos de los cuales contienen exhibiciones externas.

DESARROLLO

Mi visita al museo fue una experiencia muy divertida e interesante ya que fui un sábado y en los alrededores del museo estaban unos voladores de papantla y fue muy interesante porque en la ciudad nunca había visto más que en pueblos.

Mi entrada al museo me encontré con la famosa fuente.

Al entrar la primer sala que visite fue la de “Rostros de la divinidad: los mosaicos mayas de piedra verde” la cual es una exposición temporal, en el interior me encontré con varias esculturas que se muestran en el periodo Clásico.

Como los jugadores de pelota que decía que en el arte maya se representaban en posiciones dinámicas para transmitir el movimiento ellos contaban con protecciones en el cuerpo.

Este es el relieve de un señor maya sentado sobre un prisionero.

Durante la fase terminal del periodo clásico los principales centros ceremoniales mayas fueron abandonados como consecuencia de una crisis en el gobierno dinástico derivada de diversos factores como el incremento de la población, el agotamiento de los suelos de cultivo y los excesos de la clase gobernante con el consecuente colapso de la economía agrícola. A la llegada de los españoles a la península de Yucatán en el siglo XVI, las ciudades del Clásico permanecerían resguardadas bajo una vegetación exuberante desde varios siglos.

En el pensamiento maya la renovación del dios del maíz era un factor indispensable para la supervivencia y la continuidad de los ciclos cósmicos. Por esta razón se recreaban en ritual su esencia y su imagen.

Mientras que durante el clásico temprano la cuidad de calakmul contaba ya con los fundamentos que la llevarían a convertirse en el centro del reino de la serpiente en la tierras bajas del sur, la ciudad de piedra de los 3 soles se consolidaba política económica y socialmente. Durante el clásico tardío llego a tener varias piezas.

Durante el Clásico diversos centros ceremoniales se consolidaban como entidades políticas bien estructuradas y reflejaban en sus monumentos acontecimientos relevantes. En este periodo se estableció la sucesión dinástica enfatizándose el papel de los dignatarios mayas quienes eran representados con inscripciones que nombraban su nobleza identidad y parentesco.

La segunda sala fue Preclásico donde me encontré un mapa

En esta sala vi sobre el preclásico que abarca aproximadamente de 2300 años a.C a 100 d.C es el periodo durante el cual se formaron los patrones básicos mesoamericanos que dieron lugar a las grandes civilizaciones.

La principal característica económica fue el desarrollo intensivo de la agricultura. A partir de este primer horizonte, la actividad agrícola constituyo la base de las comunidades

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